5.

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Al cabo de un rato Dipper volvió con una bandeja de limonada para ambos. Se quedó algo extrañado al ver al rubio con la camisa en la cara, pero optó por no preguntar y quitársela, no quería asustarse aun más de su compañero.

-Vamos a terminar con esto. –dijo sentándose en la cama con las piernas cruzadas. Bill lo siguió sentándose a su lado, quizá demasiado cerca. El menor se hizo a un lado para dejar unos centímetros de distancia, Bill lo ponía nervioso y no ayudaba para nada tenerlo en su cama. – tienes alguna idea de lo que quieres hacer.

Bill se encogió de hombros. 

–Me gusta Romeo y Julieta.

-Vale. –Dipper se estiró para sacar de la estantería una edición gigantesca de las obras se Shakespeare, la abrió cerca de la mitad y luego de hacer un repaso mental dijo. –creo que podríamos hablar sobre el estilo narrativo del autor o el impacto negativo que tiene la obra en la actualidad

-¡Pero es muy romántica, eso no puede ser negativo!

-Hay mucho más en la obra que solo cursilería barata. –Bill se lo quedó mirando unos instantes que al menor se le hicieron eternos. -¿Por qué estas mirándome así?

Bill tuvo que morderse el labio para evitar reírse en la cara del menor, si Dipper seguía hablándole así seguramente no podría controlar las ganas de darle un beso. 

–Porque me gustas... Me gustan las cosas bonitas, y nunca había visto algo más bonito que tus cejas juntándose cuando te enojas Y porque quiero recordar cada momento desde que te conocí hasta el día en que nos casemos.

-Como dije... cursilería barata. –Dipper le cerró el libro en la cara y por poco le apreta la nariz. –puedes escoger la escena que vamos a analizar

-¿Escena?

-Escena, acto... Lo que tú quieras. –Bill lo observaba casi sin pestañear, pronto Dipper entendió lo que estaba pasando. –no me digas que ni siquiera has leído Romeo y Julieta. –el mayor le sonrió mostrándole los dientes. –no puede ser...

-No debe ser tan complicada, puedo leer un resumen en internet. –el castaño entrecerró los ojos, sintiéndose tan insultado como si hubieran ofendido a su madre, no iba a permitir que su compañero de proyecto leyera un burdo resumen en una dudosa página de internet.

-Eres imposible. –abrió el libro en la misma página de antes, la ilustración a color de una pareja en el balcón era inconfundible. Se encargaría de que Bill se supiera la historia aunque tuviera que leérsela el mismo. –pon atención, porque no voy a repetir nada.

Luego de dejarle claro que solo lo hacía porque quería una buena nota y de que aceptó el hecho de que no podría despegarse del lado al mayor comenzó a leer en voz alta. Por su parte Bill no podía estar mejor, aunque tuviera que aguantar todas las partes aburridas la historia tenía a su alma gemela leyendo solo para él. Dipper había accedido a dejar que se sentara más cerca con la excusa que quería escucharlo mejor. Sentía su cuerpo tibio rozándole el brazo y su vocecita cantando cada palabra como si hubiera sido hecha para eso. Las palabras sonaban mejor cuando Dipper las decía, incluso las que sonaban ridículas y no tenía idea de lo que significaban.

Pasaron veinte minutos y cada vez bajaba más el volumen, a Dipper le pesaban los ojos y lenta e involuntariamente iba recargándose en el cuerpo del mayor, si todo iba como Bill esperaba podría tenerlo entre sus brazos al final del tercer acto. Pero entonces cerró el libro de improvisto para tirarlo a los pies de la cama.

-Es todo. –dijo. –sigue leyendo por ti mismo

-¿Pero por qué? –Dipper se cruzó de brazos y desvió la mirada, algo no andaba bien. -¿Por qué no te gusta Romeo y Julieta?

-Porque es una tontería, me molesta que hayan personas que crean en cosas como esas.

-Pero Shakespeare está hablando de amor... ¿No?

-El amor está sobre valorado. –no podía estar seguro pero Bill pensó que había algo rompiéndose en cada una de las palabras del menor. –además algo como el amor a primera vista es absurdo.

-Yo me enamoré así de ti

-No puedes enamorarte de mi... no me conoces.

-Ya lo sé. –por supuesto que lo sabía, como si no se hubiera dado vuelta la cabeza pensando en alguna buena razón para quererlo tanto. Aun no había encontrado ninguna... Dipper era guapo pero gruñón. Inteligente pero engreído. Honesto pero sarcástico hasta los huesos y aun así Bill no podía pensar en alguien más que no fuera ese niño arrogante para pasar el resto de su vida. –yo tampoco lo entiendo... pero te amo.

Dipper sintió sus mejillas teñirse de rojo, aun no sabía si era por la rabia o porque el rubio lo estaba matando de la vergüenza. No le gustaba sentirse así, el amor era una tontería después de todo ¿No? le había costado mucho convencerse de eso y no dejaría que Bill llegara a cambiarlo todo así de fácil.

-Idiota... -no quería volver a sentir algo tan desgarrador como el amor.

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Si leíste hasta aquí debes saber que te amo con todo el corazón y que esta historia fue publicada como novela original en la plataforma Dreame, te dejo el enlace aquí: https://www.dreame.com/chapter/eqrgfxNfPu4TduAhDT0eCg%3D%3D.html

Espero que la disfrutes :)

Como Romeo y Julieta #PremiosBillDipDonde viven las historias. Descúbrelo ahora