Como Romeo y Julieta #PremiosBillDip

9.

-¡Deja de tirarme Bill! Puedo caminar solo. –dijo el menor tratando de zafarse por enésima vez de las manos del rubio, pero sus pasos no se detuvieron en ningún momento sino hasta llegar al patio de la inmensa casa donde una lamparilla de pared y la luna eran lo único que iluminaba el lugar

-El amor esta sobre valorado, ¿No es eso lo que decías? ¿O era solo una excusa para alejarme de ti?

-Bill... -Dipper se había cruzado de brazos y lo miraba fastidiado, aquello estaba llegando muy lejos.

-¿Por qué no me dijiste que estabas saliendo con ella? Me hubieras ahorrado todo... esto. –su mano fue a dar a su pecho, dándose golpes en la zona del corazón.

-Bill...

-Claro, es porque es muy bonita y también se ve agradable... Y ya vi que te sientes mucho más cómodo abrazándola a ella y es... es...

-Mi hermana

-¿Qué? –sus ojos se abrieron del puro asombro. Dipper tuvo que hacer un esfuerzo enorme para mostrar un poco de respeto por los sentimientos del mayor y no reírse de él y de lo gracioso que se veía enfadado. –tu hermana... eso explica porqué es tan bonita.

Las mejillas del menor se tiñeron de rojo, aunque esperaba que Bill no lo notara en la oscuridad. Caminó hasta un auto estacionado en el césped, era antiguo y se notaba que ya no andaba desde hace un tiempo, pero le serviría para apoyar la espalda. Bill lo siguió para acomodarse a su lado. 

–Debí sonar como un idiota.

-Siempre suenas como un idiota, pero no sabía que eras tan celoso.

-No puedo evitarlo, no me gusta verte con nadie más

-No puedes controlar eso, no eres mi novio.

-Aún. –puntualizó el rubio. –es solo cuestión de tiempo hasta que te des cuenta de que somos almas gemelas y que estamos destinados a estar juntos para siempre.

-No puedes asegurar el para siempre. Es imposible que algo dure tanto, ni siquiera el amor. –dijo el castaño. Luego de un suspiro que pareció dejarlo sin aire, dijo. –sobre todo el amor.

Se hizo un silencio a su alrededor, no podría decirse que era incomodo ya que ambos estaban perdidos en sus propios pensamientos mientras miraban las estrellas en un callado acuerdo. Bill fue el primero en hablar.

-¿Crees que si Romeo y Julieta no se hubieran suicidado hubieran seguido juntos? –Dipper lo miró alzando una ceja para luego negar con la cabeza gacha.

-No lo sé, ¿Por qué estas tan obsesionado con eso? Solo es una historia.

-Es que siento que hay algo más... es mucho más que una historia. Porque pasan los siglos y la gente sigue enamorándose igual que ellos. Locos, estúpidos, caprichosos, como quieras llamarlos, pero ¿Acaso puede ser de otra forma? El amor no es organizado ni calculado. Es un completo desastre. – el rubio sacó una caja de cigarrillos del bolsillo, pero en lugar de llevarse uno a la boca lo sostuvo entre los dedos haciéndolo girar. –no puedes pensar si estas enamorado, y realmente no puedes elegir a la persona de la que te vas a enamorar.

-¿Y dices que Romeo y Julieta son como nosotros?

-Solo digo que yo también me suicidaría si tuviera que renunciar a ti

Dipper lo miraba serio y con los labios apretados mientras una tormenta comenzaba a formarse en su estomago. ¿Quién le había dado el derecho a Bill de hablar de ese modo?, ¿De ser tan irritante y adorable a la vez?, ¿De hacer que su corazón latiera tan rápido?

-No sé porqué me gustas niño, pero cada vez que intento hallar una buena razón termino más enamorado.

El castaño se enderezó y camino hasta quedar frente a Bill. Lo abrazó. Con sus barreras ya casi deshechas y sin poder controlarse escondió el rostro en el pecho del rubio, porque quería tenerlo cerca como no había querido a nadie antes, y porque era la única forma que se le ocurría para que el mayor no viera su rostro ardiendo de vergüenza.

-¿Dipper? –dijo Bill abrazándolo y acariciandole el cabello que terminaba en rizos en su nuca. –estas temblando como un chihuahua

-No quiero enamorarme. Es imposible que un corazón aguante tantas emociones sin que termine explotando en mil pedazos.- Dipper se agarro de la tela de la holgada camisa del mayor. Necesitaba sentir que todo aquello era real para no volverse loco. –no quiero explotar.

-Tienes razón es demasiado para una sola persona. Por eso el amor es de dos.

-Aun así es demasiado. No vamos a aguantar

-Sería un placer terminar explotando en mil pedazos contigo. –Bill se inclinó para encajar la barbilla en el hueco que formaba el cuello del menor. Una corriente lo recorrió de pies a cabeza al sentirlo tan cerca. Algo en su interior le decía que había nacido para estar así, por siempre acunando el cuerpo del castaño. Cuando quiso separarse para ver a Dipper a la cara este se lo impidió. No tenía intenciones de soltarlo. -¿Puedo besarte? Me muero de ganas de besarte...

-No... pero no me sueltes aún, quedémonos así un rato más. –Bill no dijo nada más, se quedó mirando las estrellas y acariciándole la cabeza. Tan suavemente que no podía compararse con el caos que tenía lugar ahí dentro. Dipper no quería besarlo porque sabía que una vez que lo hiciera terminaría por perderse completamente en aquel sentimiento que tanto le asustaba. Dipper Pines estaba cayendo completa e irremediablemente enamorado.

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Un aplauso para Bill que acaba de descubrir el dogma de la literatura clásica. Este fic a crecido mucho en muy poco tiempo Uwu han sido muy lindos conmigo, muchas gracias. Por favor sigan votando y comentando para que cada vez más y más personas lo vean y seamos una gran familia billdip. *w* (Dipper sería una mamá super tierna y Bill sería el típico padre irresponsable que deja a sus hijos bajo el cuidado de la televisión... jeje)

eso es todo. Los quiero mucho >3< bye!