Capítulo 25 Zalgo y...

891 65 7
                                    

POV'S Vannesa

Volteé rápidamente para ver quién había originado aquel ruido, al principio creí que era Toby. Pero luego de observar aquella sombra masculina con más claridad pude darme cuenta de que este poseía un cabello cobrizo, y unos ojos de color miel aterradoramente familiares... No,  no podía ser él, había muerto ese día ¿O no...?.

Christofer - ¿No me saludas Vannesa? Es qué acaso ya no te agrado... - No pude responder nada, pues cuando Christofer empezó a acercarse a mi, pude notar que detrás de él una sombra escalofriante lo seguía, parecía el aura de él, llena de maldad y oscuridad. - ¿No dices nada?.

De pronto se acercó de golpe hasta donde me encontraba, acercó sus ojos a los míos, casi no había distancia entre los dos.

Empezó a reírse, luego pude notar como sus ojos color miel empezaron a tornarse de un color más oscuro hasta que sus pupilas llegaron a ser completamente negros. Escuché varios sonidos mientras presenciaba esto, eran agudos, como si un montón de objetos metálicos chocaran entre sí. Miré detrás de Christofer, que era de donde provenía aquel ruido, esa cosa que lo estaba siguiendo al principio, se había quedado cerca de la ventana, empezó a tomar una forma extraña, casi felina, hasta después de pocos segundos fue cuando pude darme cuenta de que en realidad, era todo lo contrario a un felino, era un gran y aterrador lobo color negro, con enormes garras y dientes que daban la impresión de ser muy afilados. Sus ojos emanaban luz, y esto lo hacía verse más escalofriante, empecé a temblar, Christofer solo se dio la vuelta y se acercó hasta aquella criatura que era de su mismo tamaño.

Christofer - Intrigante ¿No lo crees? Me salvó de aquella herida que me había hecho tu noviesito, ahora somos... amigos de cierta forma sabes... Yo dependo de él y viceversa. Es curioso que no sepas quién es, pues ha estado detrás de ti desde hace unos meses. - Claro, era obvio desde un inicio. Pero el solo hecho de afirmar mis sospechas hizo que retrocediera al mismo tiempo de haber murmurado su nombre.

Vannesa - Zalgo...

Christofer - Exactamente...

Vannesa - Y si sabes cómo es "mi noviesito" porqué te molestaste en venir... A menos que seas un tonto no se te hubiera ocurrido volver. - Usé un tono un tanto amenazante, si no podía defenderme de ellos por lo menos podría infundirles miedo.

Christofer - ¡Oh, vamos querida!  Tu y yo sabemos perfectamente que Zalgo es uno de los más fuertes entre los de su mundo, además él maldito de tu novio casi me mata y Zalgo te quiere para él, tanto yo como Zalgo conseguimos lo que queremos.

Dicho esto aquella figura lobuna empezó a elevarse, para luego saltar y penetrar con gran fuerza el pecho de Christofer. Él sólo seguía parado ahí, hasta que empezaron a brotar garras inmensas de sus dedos, su rostro empezó a deformarse de tal manera que su mandíbula creció para poder dejar al descubierto dientes de un gran tamaño, se estaba convirtiendo en aquel lobo que Zalgo era desde un principio, pero este era aún más grande y daba más terror.

No podía moverme de aquel lugar, mis extremidades no respondían, estaba segura d que ese sería mi final. Ahora me arrepentía de no haber aprendido siquiera algo para poder defenderme e intentar ganar, pero no había que más hacer, estaba sola y asustada.

Por suerte un antiguo instinto despertó dentro de mi, llenó mi cuerpo de adrenalina, eso sirvió de apoyo para que mis piernas respondieran y no me quedara embobada viendo aquel espectáculo. Salí de mi habitación, corrí lo más rápido que pude, bajé las escaleras y gracias a Dios la puerta de la cabaña estaba abierta así que pude salir y sin detenerme corrí a algún lugar del bosque.

Instinto (Bloody Painter) [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora