POV'S Vannesa
Después de quitar los pétalos, tomé mi espada e hice una cortada en la palma de mi mano, como tenía los pétalos exparsidos en el césped fue más sencillo derramar algunas gotas de sangre sobre ellos.
Procedí a llenar el cuerpo con los pétalos, no tardé mucho, así que rápidamente me dispuse a coser la abertura de la boca y la cortada.
Cuando por fin terminé me dí cuenta de que había hecho todo a tiempo, pues al mirar la luna esta estaba mitad roja y mitad blanca, así que me apresuré a sentarme y cerrar los ojos. Inhalaba lentamente, podía sentir la frescura del rocío del césped mientras lo hacía, me perdía en mis pensamientos.
No sabía cuánto tiempo iba a permanecer así, pero para que no me invadiera la tentación de abrir los ojos, empecé a centrar mi atención a los aromas que me rodeaban.
POV'S Bloody Painter
Me quedé cerca de aquel lugar para poder estar seguro de que todo estaba saliendo bien.
Vannesa había realizado todo a la perfección, ahora tan sólo hacía falta un poco de mi sangre para que el ritual funcionara. La fusión de mi sangre de creepymonster y la humana debía de ser tocada por la luz de la luna roja, luego de eso espero que todo salga bien.
Me acerqué al cuerpo de aquel tipo, tomé un cuchillo que traía escondido en mi pantalón, e hice un ligero corte en mi mano, justo como lo había hecho Vannesa y dejé caer varias gotas sobre las pequeñas comisuras que todavía tenía el cuerpo de él.
Próximamente me acerqué a Vannesa, me senté ligeramente a su lado y tomé su mano con delicadeza para que no se asustara.
Bloody - Todavía no abras los ojos. - Luego hice que nuestras heridas coincidieran, de tal forma que su sangre y la mía se mezclaran.
Hice el símbolo creepypasta sobre su hombro izquierdo con la sangre, para luego recordarla sobre el césped ligeramente cerca del cuerpo del tipo para luego alejarme de ahí y esperar a que la luna se inundara en su totalidad de color rojo.
No tardó mucho tiempo en que la luna de sangre por fin llegara, en cuanto la luz roja tocó el cuerpo de Christofer, este empezó a desintegrarse, dejando en el aire pequeñas luces rojizas, como cuando el fuego de un incendio descontrolado deja salir alguna que otra chispa del lugar de origen. Presencié aquel espectáculo durante casi media hora, pues aquellas luces empezaron a acumularse sobre Vannesa, para luego irse impregnando poco a poco dentro de ella, la esencia de un creepymonster yace dentro de ella.
Poco a poco su alma y cuerpo irá aceptando su nuevo ser, espero y esto no sea perjudicial en un futuro, pues si no es aceptado en su totalidad, podría incluso empezar una batalla dentro de ella, su ser humano contra su ser creepymonster. Eso sería muy devastador, sin embargo eso sólo le sucede al 5% de las personas que realizan este ritual, un porcentaje muy bajo, así que tal vez no hay de que preocuparse.
Mientras pensaba esto, pude darme cuenta de que Vannesa se estaba incorporando poco a poco, parecía algo agitada, para tranquilizarla salí de mi escondite y me dirigí hacia ella.
POV'S Vannesa
Escuché pasos, como eran calmados y lentos, supuse que era Bloody y no me había equivocado, pues susurró tenuemente "Todavía no abras los ojos" para luego sujetarme de la mano y hacer unos movimientos con su fría mano sobre mi hombro.
Luego de eso sentí cómo las manos de Bloody me recostaban poco a poco para luego alejarse de ese lugar. Al principio no sucedía nada fuera de lo común, pero luego de un rato, mi cuerpo empezó a experimentar un cambio de temperatura demasiado drástico, sentía como si de repente algo hubiera empezado arder en mi interior y poco a poco se expandía por todo mi cuerpo.
Me sentía mal, tenía miedo y no podía moverme desde que empecé a sentir ese ardor, pero poco a poco empezó a cesar, creía que ya había acabado todo, pero aún faltaba más. Todo ese fuego interno comenzó a centrarse principalmente en mi corazón y en mi cabeza, hasta llegar a la sensación de que mi pecho y cabeza iban a explotar, fue cuando pude abrir los ojos.
Miré mi cuerpo con miedo rápidamente, buscando algún indicio de quemaduras o algo así, pero no había nada. Confundida, miré a mi alrededor y mis ojos se toparon con mi razón de ser.
Bloody me extendió su mano y yo la sujeté para poder levantarme, me miró a los ojos y acarició mi rostro. No estaba segura si mi aspecto físico había cambiado drásticamente o no, en ese momento de cierta forma no me importaba, pues lo único que quería hacer era descubrir mis nuevas habilidades y aspectos biológicos.
Lo de las habilidades luego lo vería, al fin y al cabo tendría que pelear tarde o temprano con The Rake, tal vez sea muy presuntuoso de mi parte pero en este momento me siento tan poderosa y con vida, que siento que podría matar a quien fuera.
Sentía que mi corazón palpitaba rápidamente, pero no estaba alterada, mis sentidos ahora eran más agudos, tal vez podía escuchar lo que fuera en un rango de casi un kilómetro, los aromas que antes había olido ahora eran más intensos y podía saber su origen, mi vista también había mejorado, podía ver la cabaña de Bloody desde donde nos encontrábamos.
Tanta información, nuevas experiencias y diferentes perspectivas, todo aquello hizo que en su momento me sintiera mareada y un poco confundida, no estaba acostumbrada a todo esto.
Pero había algo que me preocupaba más que acostumbrarme a mi nuevo ser, no sabía cómo esto le afectaría a mi bebé, sé que yo decidí correr el riesgo al no decirle a Bloody, pero ahora me siento capaz de defender a mi hij@ y a Bloody si es necesario.
Tal vez lo estoy pensando demasiado, debería de ir con Laughing Jill después de esto, tal vez ella sepa algo. O tal vez debería decirle a Bloody...
Hola mis amados asesinos
( ˘ ³˘)♥¿Qué tal, les está gustando el rumbo de la historia?
¿Causará problemas al bebé el hecho de que Vannesa haya realizado el ritual? ¿Será una mini Vannesa o un mini Bloody ewe? (Adivinen)
Que tengan una linda noche mis asesinos.
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Instinto (Bloody Painter) [Terminada]
Fiksi Penggemar¡¡Espera!! No lo hagas. - Gritó Vannesa desde lejos, corría para intentar intervenir en la pelea, estaba dispuesto a sacrificarme para salvar a la mujer que amo, sin embargo, en ese instante parecía más preocupada por mí que por su propia vida. ¡Tú...