Día 571: (mismo día).
-Iré al almacén a verificar las armas- le avise a Rick mientras bajábamos de la furgoneta y comenzábamos a juntar las armas que habíamos llevado a Hilltop.
-luego nos veremos en mi casa para el armado del plano- aviso el continuando mi oración tal y como lo habíamos organizado durante el camino de regreso- y luego los veré a todos en la iglesia- finalizo el con el ultimo paso de la lista.
-exacto, en marcha- ordene ya que todos tenían algo que hacer durante este tiempo, sin duda Rick no sabia con quien se estaba metiendo, estaba tan confiado al igual que el resto que por mas palabra que se les dijera jamas cambiarían de opinión, su elección era luchar y aunque yo no quisiera lo harían y tal ves de esa forma pudiesen entrar en razón sobre lo que estaban haciendo, el trato sin duda no era para nada justo pero así lo habían decidido ellos.
Hice lo prometido y me encamine a al almacén para verificar que todas las armas estuvieran en condiciones de uso con sus respectivas municiones para mañana hacer un largo viaje hacia el santuario de Los Salvadores. Tome la hoja y el papel que estaban sobre la mesa y comencé a anotar el arma y la cantidad de balas que tenia cada una, debíamos estar muy bien organizados si queríamos realmente vencer a Negan, algo que me parecía prácticamente imposible. Tan concentrada estaba que al percatarme de la presencia de Carl allí dentro di un pequeño paso hacia atrás tirando al suelo una caja llena de cueros y fundas para las armas.
-Idiota- masculle en una voz audible mientras recogía lo que se había caído, cualquier chica esperaría que el chico imitando a un príncipe se agachara a recoger las cosas, pero no era el caso, en primer momento por que estábamos en el medio del fin del mundo ¿por que debíamos ser corteses? y en segundo lugar Carl Grimes se parecía menos a un príncipe que yo a Daryl Dixon.
-tu fuiste quien lo tiro- dijo bastante natural, estaba logrando cabrearme pero no lo haría por que era exactamente eso lo que el quería de mi y no lo obtendría.
-ya Carl, déjalo ¿si? Esto es importante- dije lo mas relajada posible, incluso ese tono sonó mas forzado que cualquiera de mis sonrisas y eso era lo que lo hacia inquietante.
-esto es inútil- negó el sacudiendo su cabeza de un lado al otro, suspire resignada y apoye fuertemente la libreta sobre la mesa causando un fuerte sonido para luego caminar hacia donde el estaba.
-llámalo inútil, cuando ya no nos queden municiones y no tengamos las suficientes, mataran a tu padre, a Daryl, a Luke, Jesus, a ti y a todos los que estén allí, luego vendrán hacia aquí y mataran al resto, pero a mi no me harán mas que llevarme con ellos de nuevo, esto lo hago por Alexandria y Hilltop- dije relajada pero no sincera, sabia que si esto fallaba probablemente ocurriese todo eso y pues yo volvería con ellos para ser maltratada y castigada quien sabe que se le ocurriría hacerme a Negan. El se quedo de brazos cruzados con la boca cerrada bastante debatido, volví a tomar la libreta para salir de allí no sin antes golpear su hombro con el mio.
La tarde se baso prácticamente en la charla con Rick y los preparativos previos a nuestra salida, junto a Jesus y Daryl armamos el mapa de aquel lugar y la conclusión mas segura a la que llegamos fue que seria mejor esperar al anochecer para atacar mientras que en el día nos dispersaríamos por el camino en busca de caminantes que se pareciesen a Gregory para simular el cometido de Andy para poder entrar de forma mas fácil. Una ves terminado todo fue mas fácil ir a casa que deambular por las noches vigilando como una imaginaria a la comunidad, estaba demasiado cansada.
Ese fue el fin del día 341 y el comienzo del día 342, día en el que emprenderíamos la partida para enfrentarnos con Los Salvadores, quien sabe cuanta tragedia y desgracia traería este estúpido enfrentamiento, pero si algo me forzaba a decir que si era la seguridad de la colonia Hilltop, la seguridad de Jesus.
ESTÁS LEYENDO
Lucille (Carl Grimes)[Editando]
Fanfiction-Traigan a Lucille- ordeno el hombre fornido con voz sádica, en un lejano termino le recordaba al gobernador y eso era a causa de que se encontraba en una habitación bastante espaciosa arrodillado mientras que sus pies y sus manos estaban atados con...