Wishing Room✨ (UT NicePants)

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Si ya lo leíste pos léelo de nuevo que esto ha sido 🌈editado🌈

Nota: los primeros capítulos los subí todos juntitos y luego este tarde una banda en subirlo, lo sé. Es que empecé la escuela y aunque tengo tiempo libre mi cabeza anda en otra, así que me disculpo y puede que haya veces que suba 3 capítulos por día y otras que tarde una semana en subir. A parte que aquí tengo que empezar a poner el salseo para poder hacerlo de unos quince capítulos o ocho si los hago más larguitos como estaba planeado, talves termine haciendo un fic de unos 60 capítulos, pero no se. En fin, aquí está.

A eso de las siete de la mañana todos los inquilinos del MTT Resort iban de acá para allá, era un caos. Estaban los que pedían servicio al cuarto, los que esperaban que terminaran de arreglar el ascensor para finalmente irse de allí, los que recién llegaban, los que hacían reservaciones y los que se quejaban de que, aunque no tenían reservación, debían entrar al restaurante ... Entre otros.

Y ahí estaba el pequeño felino, atendiendo a los apresurados, a los hartos de esperar y a los que no habían reservado en el restaurante. Dándoles su comida, cobrando. Básicamente lo de todos los días.

La gente parecía aun mas enojada que usualmente, algunos lo trataban con amabilidad y otros decidían por criticar las Glamburgers escupiendolas en el mostrador. Pero el siempre con una Sonrisa, fingida, claro está. Una sonrisa que impedía que lo despidieran.

Las horas pasaban, las personas seguían llendo de aquí para allá y Burgy seguía allí.
Finalmente llegó su descanso, pero un último cliente parecía muy apurado y, la muy pequeña parte de Burgerpants que no odiaba a todo Underground hizo presencia, así que lo atendió.

El niño le cayó bien, cosa que le resultó extraña... Pero era solo un niño, no podía caerle mal ¿O sí? Su cabello despeinado y su suéter sucio delataban que había tenido una semana movida, y al parecer tampoco había comido en toda esa semana dado que casi se lleva todas las glamburgers del lugar.

Burgy no pudo evitar hablar con él, y a diferencia de el resto de personas que había conocido, el chico parecía interesado, haciendo preguntas, mirándolo con regocijo, sonriendo...

Finalmente se fue dejando a Burgerpants tomar su descanso, el cual se quedó mirando a todos los monstruos ir y venir de aquí para allá, todos tan apurados, con miles de cosas que hacer, tratando de aprovechar su vida al máximo sin saber que en realidad solo la desperdiciaban. Pero el gato no podía opinar sobre eso, el ni siquiera intentaba. Estaba harto, la vida le había golpeado demasiado como para seguir intentando. Desilusiones, Corazones Rotos, Golpes, Sueños Frustrados... Todo eso llenaba el alma del monstruo. Nunca nadie lo quiso, nadie lo quería y jamás alguien iba a ser capaz de quererlo.

Estaba solo...

Aunque el no tenía en cuenta al conejo de pelaje azulado y sonrisa perfecta que entraba por la puerta principal buscándolo. El nunca se esperaría que alguien... Bueno... Ya lo sabremos en varios capítulos más ¿Cierto?

Y al terminar el descanso, el felino finalmente se encontró con Nicky...