Abrí los ojos, miré la ventana y noté que ya era día, me levanté y me coloqué zapatos, un pantalón y una franela que estaba colgada, me dirigí al baño hice mis necesidad y cepillé mis dientes. Tomé mi desayuno y la mochila, y salí de casa a realizar las compras.
Caminé a tomar el bus, debía realizar mis compras cuanto antes puesto que debía ir al lugar dónde realizaría la fiesta, tenía un dinero ahorrado gracias a mamá, y un par de labores que encuentras por allí.
Lista:
-Codeína.
-Alcohol.
-Cigarrillos.
No tardé tanto como pensé, coloqué todo en una vieja mesa situada en el centro de la casa, me situé a descansar un poco en una vieja silla de papá, marqué el número de Elissa, quería hablarle.
J: ¿Vendrás?
E: Tal vez, hay un par de cosas que es necesario que sepas.
J: ¿Cosas?
E: Si, cosas.
J: Ve al grano.
E: No debería decirlo acá, incluso todo lo notarás.
J: Tengo una intriga y miedo al mismo tiempo. ¿Porqué me haces esto? Dejarme así.
E: Esto no es nada.
J: Demonios ¿al menos vendrás?
E: Claro.
J: Esta bien, espero verte acá.
E: Supongo que nos veremos en tu casa.
J: Seguro.
Supuse que había una cantidad considerable de personas, estaba preparado para ello y después de esto no me importaría nada, si la casa puede ser destruida, si viene la policía, estoy preparado para todo hoy. No quise realizar algún tipo de limpieza a la casa, no valía la pena, esto será un caos.
Me quedé sentado pensando en todo lo que pasaría, en las múltiples posibilidades de sentirme en la gloria, en ese trance que sientes cuando todo parece tan divertido. Jugué algunos videojuegos y decidí recostarme y dormir un rato, en un par de horas llegarían las personas y debía estar enérgico.
Escuché que entraban personas, pero estaba dormido, no podía ni levantarme, era una gran siesta.
Mientras dormía sentí que alguien se situó a mi lado, comenzó a hablarme al oído, supuse que sería Elissa, tenía tanto afán por abrir mis ojos pero quise ser discreto, lo abrí lentamente y rayos. Hola Paula ¿que haces aquí?
—¿Esperabas que fuera otra?
—No, sólo me impresiono de que estás aquí.
—¿Como no estar aquí? No querría dejarte solo.
—Entiendo.
Maldición, tal vez todo pueda arruinarse ahora, no quiero lastimar a Paula, quiero seguir teniéndola, que quizás pronto deba ser el momento de cortar con esto, ella se está exagerando respecto a su amor por mí, piensa que he llegado a sentir ese sentimiento por ella, ese de sentirte seguro de alguien ¿que pasa por su cabeza? En realidad se enamoró sola.
—¿En que piensas?—Me preguntó mientras me miraba fijamente.
—En nada, sólo estoy un poco ido lo siento, me estoy levantado y no sé que haré con estás personas, y el resto que pueda llegar, apenas son las 8:00 pm.
—Bueno, esta bien, te espero afuera, lávate la cara y quita esa cara de sueño.—Dijo mientras me besaba.
Me sentí aliviado cuando cerró la puerta de la recámara, en cualquier término conservaba las más inmensas ganas de permanecer solo, después de todo me sentía tan cansado de que las cosas fuesen tan complicadas, que todo radicara de sentimientos que debían manifestarse de una forma u otra, para sentirme humano quizá o sentir que después de todo hay un par de sentimientos ahorrados en mi repertorio de carencia de expresiones. Estaba sentado allí, sin saber en que momento debía ponerme de pie y vestirme, tomarme una ducha y que todo de cualquier forma tornara un modo pacífico.
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Alma Caótica. #Wattys2016
Romance"Escépticos de amar, pero creyentes del caos". Dos jóvenes enamorados junto a un mundo caótico, que se acompaña de sentimientos pasajeros, Elissa y Jacob, un amor dividido entre la extrañeza y lo puro, entre el miedo y la valentía, entre quedarse...