3_Mantente alejada.

604 24 0
                                    

Miré en mi horario que clase me tocaba y vi  matemáticas en unas enormes letras rojas. La verdad, no se me dan genial pero tan poco soy de suspender esta asignatura.

Fui hacia el aula y al entrar, todos me miraron. Vi como Sam sonreía desde una de las mesas de atrás mientras me hacía un gesto con el brazo para que fuese. Yo asentí riendo y me acerqué a ella.

A su lado estaba Thomas con dos hojas de cálculo  en la mano.

-Toma, es lo que estamos dando.-Dijo él dándome una de las hojas.

Eran bastante fáciles, esto lo dí en mi antiguo instituto y soy bastante buena si me piden este nivel.

Entonces, entró el profesor. Era alto y delgado, moreno con una raya al lado y unas gafas finas de pasta. Iba vestido con un polar de rombos y unos pantalones color beige. ¿No se está muriendo de calor?

-Buenos días alumnos. Hoy, como habréis notado, ha llegado una nueva alumna al instituto. ¿Por qué no sales y te presentas?- Dijo con un acento raro.

Yo asentí y me levanté de mi sitio, colocándome enfrente de la pizarra.

-Hola, soy Paula Becker.-La verdad esto de las presentaciones no se me daba muy bien la verdad.

-Vaya, qué directa.-Todos rieron.- Por qué no nos cuentas algo de tu vida.

-La verdad, tengo una vida lo suficientemente triste y simple como para contarla. Pero bueno, diré que nací en Madrid pero que por el trabajo de mi padre he viajado más de lo que nadie haya podido viajar a lo largo de estos 16 largos años. Mi madre apenas ha estado presente y mi hermana es más sociable que yo a si que prácticamente pasa de mi, a pesar de ser su melliza.

-Vaya, yo lo siento...-Dijo el profesor.

-Ya, todos lo sienten...-Dije desviando la mirada.

-Bueno señorita Becker, soy el profesor Andrew. Le pondré un ejercicio en la pizarra y lo resolverá. Es para medir su nivel.- Yo asentí y me giré para ver como Andrew escribía una larga operación en la pizarra.Todos hicieron "oh" y yo pensé "vamos, es fácil, he hecho peores". 

Cuando terminó me dio la tiza blanca y la hice en un minuto. Era fácil y era bastante rápida con el cálculo.

-Vaya señorita Becker. Debo de felicitarla. Por lo menos hay alguien que sabe hacer algo de provecho, eh panda de vagos.-Dijo mirando los decimales que había sacado y después a los alumnos.- Puede sentarse.

Me dirigí a mi sitio al lado de Thomas y Sam, que me miraba con compasión . Cuando llegué y me senté entre los dos, Sam me abrazó y sonrió triste.

-Yo me integraba mal, tenía varios problemas familiares, pensaba que era el fin del mundo y ahora me doy cuenta de que hay personas que lo pasan peor que yo.-Dijo con un audible nudo en la garganta.

-Da igual. Ahora estoy con vosotros, ¿no?- Dije intentando sonreír.

-Claro que estás con nosotros.- Dijo Thomas agarrando mi mano.

***

Las siguientes clases se pasaron rápido, y en un abrir y cerrar de ojos, llegó la hora del almuerzo.

Iba cargada con carpetas y libros para dejarlos en mi taquilla, cuando de repente, me choqué con alguien y caí al suelo con todo encima.

Al parecer, me había chocado con un chico que ya había visto antes. Era moreno y con unos ojos negros que me miraban culpables. Quizás me cruzase con su mirada en matemáticas.

-Lo siento mucho, no te había visto.- Dijo él recogiendo mis carpetas.

-No es nada. Llevo un día algo estresante y... No es la primera vez que me caigo con unas carpetas...Bueno, no es la primera vez que me caigo.-Dije y él me sonrió amablemente.

-Te oí en matemáticas, y yo lo siento.-Le iba a responder pero se adelantó.- Y no me digas "todo el mundo lo siente"-Dijo poniendo una voz chillona para imitarme. A lo que yo reí.

-¿Acaso me has leído la mente?- Dije con una sonrisa irónica pero él se puso serio.

-No te mereces lo que te ha pasado.-Dijo y al ver como me ponía roja rió nervioso y se corrigió a si mismo.-Digo nadie...

-Gracias, emm... No sé tu nombre.-Él sonrió.

-Soy Lucas, pero todos me llaman Luke.- Entonces me tendió su mano para ayudarme a levantarme.

-Vaya, pensaba que el suelo necesitaba apoyo emocional, pretendía quedarme un rato mas haciéndole compañía.-Me reí y él también. Su risa era melodiosa y contagiosa. Una de esas risas que te marcan.-Gracias Luke, pero tengo que irme.- Dije y cogí las carpetas para meterlas en mi taquilla.

-Un gusto, Paula.- Dijo dándose la vuelta.

-Igualmente, Luke.-Dije cerrando la puerta de la taquilla para irme, cuando de repente unas chicas, aparecieron cerrándome el paso.

-Puede que él se haya tragado tu historia de niña buena.- Dijo una rubia de ojos marrones.- Pero yo no. Osea que más te vale alejarte de mi chico si no quieres tener un problema.

-Al parecer tú eres mi problema ahora mismo.-Dije mirándola con indiferencia.

-Uy, uy, uy, la niña abandonada no sabe defenderse. Cuidado.-Dijo esto último con tono de advertencia en su voz.

-Aléjate de ella, Saray.-Dijo Thomas acompañado por las chicas.

-Eso, ve a perseguir a tu novio, que me extraña que no se haya cansado de ti ya.- Dijo Lora.

-Llevárosla antes de que pueda revivir momentos de sus antiguos institutos.- Dijo con desprecio y me acerqué dispuesta a acabar con ese rostro de "muñeca de porcelana". Apenas nadie sabía sobre los variados casos de bullying que había sufrido en el instituto y no tenía ni idea de como se había enterado.

Pero los brazos de Thomas me agarraron por la cintura, cuando en una esquina alejada, vi como Luke nos miraba, con lo que parecía una expresión de tristeza. Pero deje de mirarle cuando, Thomas me arrastró hacia la esquina del jardín.

-Ya nos han contado lo de mates, lo siento mucho.- Dijo Emma abrazándome.

-No te mereces nada de eso.- Dijo Lora añadiéndose al abrazo, cuando Sam dijo: -Abrazo grupaal- Y todas, menos Thomas que me miraba bastante serio, se tiraron encima mía.

-¿Puedo hablar contigo?- Dijo bastante serio Thomas.

Me alejó de las chicas y empezó a hablar:

-Te he visto con Luke y no deberías de estar con él. Es el novio de Saray, la rubia a la que casi le partes la cara hace unos minutos.- Algo en mí se rompió al oír que un chico como Luke salía con una arpía como Saray. Y Thomas lo notó.- Mantente alejada.- Y me abrazó. Sentí un extraño cosquilleo cuando esto ocurrió pero, seamos realistas, apenas nos conocemos.

-No siento nada por Luke.-Dije contra su pecho.

-Debes de saber que Saray no se anda con jueguecitos. Si de siente amenazada por ti hará cualquier cosa para alejarte de él.

______________________
Capítulo editado

Campamentos en acción [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora