Celos e inseguridades.

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Capituló 17:

P.o.v. Jasper

Me siento como si traicionara a Lapis. Pero no hice nada malo ¿cierto? Solo ayude, actuaría si con cualquiera que necesite ayuda. Suspiro. A quien engaño tal ves si estoy traicionando a Lapis. Al momento de sentir aquel cálido abrazo, la electricidad al tocarnos, la reacción de mi estomago dando vueltas, y aquel sentimiento que según para mí ya no existía resucitará. ¡Por los diamantes si la estoy traicionado!
Sobo mi rostro. Cierro los ojos.
Peridot, mi primer amor. Fuiste mi fuente de alegría, mi consuelo, el paño de lágrimas, mi felicidad. Te ame tanto. Pero al no aprobarlo mí madre, no logramos seguir con lo hermoso que creamos. Tal ves fue mi culpa, no supe valorar lo que tenía, no te defendí, no pude retar a mi madre por mi miedo a no ser lo que ella desea. Discúlpame.
Lapis. Suspiro y sonrío. Fuiste inesperada. Fuiste un fastidio. Una sabelotodo. Con esa mirada altanera, con tu facilidad de buscarme pelea. Pero, los encuentros lujuriosos comenzaron a surgir, cada tacto tuyo quemaba, ardía. Al principio fuiste un juego para mí. Un reto. No lo vi venir. Pero los roces de tus manos en mi piel hacia derretirme entre tus manos. Cada palabra susurrada fue un poema de amor. Y cada beso tuyo es una promesa de amarnos. Te amo. Eres mi presente y deseo que seas mi futuro.
Pero ahora no todo es color rosa, mi cabeza duele, al igual que mi cuerpo. Estoy molesta conmigo.
No puedo dormir. Después de llevar a Peridot a su casa tome un paseo para despejar mi mente pero fue en vano.
Me encuentro en la cosina, tomando jugo de naranja. Mis manos tiembla y aprietan el vaso de vidrio. Escucho unos pasos bajando las escaleras.

— A qué horas llegaste. Pensé que estarías muy cansada después del cine.— digo algo divertida.

— Lo estoy.— responde Garnet.—Quieres contarme lo que te pasa.—

Suspiro. Ya no me sorprende su facilidad de saber cuando me encuentro mal. Y pensándolo bien no es mala idea hablar con mi amiga de toda la vida, mi hermana, mi socia, comadre. La observo. Somos tan distintas, ella es madura y yo soy un nada. Aunque no sea mi hermana digamos de sangre, la quiero.

—Veras....— Comienzo.

Le cuento sobre lo de hoy, y como me siento al respecto. Cuando terminó no me dice nada. Hay un silencio, no es incomodo. Estoy acostumbrada a su silencio.

— Te diré mi manera de pensar, pienso que tú quieres a las dos. Pero escúchame bien.— Sonríe—Si en verdad amaras a tu primer amor jamás te hubieras enamoras de un segundo.—

Garnet se levanta de su asiento y se va a su habitación. Es verdad lo que dice es verdad.

— ¿lo dices por experiencia?— le grito.

— A diferencia de ti, yo estoy segura de a quién amo.— me responde desde las escaleras.

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P.o.v. Peridot.

Me estaría engañado si dijera que no sentí nada al volverme a encontrar con Jasper. Pero no es lo correcto todo es planeado, me siento una basura. Me pregunto si Jasper aún sentirá algo por mí. ¿Pensará en mí?
Basta Peridot, velo como un trabajo por qué eso es, no hay tiempo de sentir cursilerías. Pienso. Además ella está muy bien con Lapis, pero aun no entiendo la manera de actuar de la señora Jaspela. ¿Tanto odiara a cualquiera que esté con sus hijas?

Las clases transcurrieron muy rápido, es la ultima hora, pero los altavoces dieron información de ir a la cancha de duela para un junta para escoger el consejo escolar. Cosas innecesarias en mi opinión. Estoy sentada en lo más alto de las gradas no me gusta estar tan cerca de todos soy caostrofobica. Observo por la puerta de la entrada a dicho lugar. Tomadas de la manos Jasper y Lapis toman asiento. Podría decir que no me molesta en lo absoluto pero no me puedo engañarme a mí misma. Sonrío altaneramente. Me siento confiada tengo la aprobación de la señora Jaspela y sé que esa pareja no durará este año. Tal ves me digan cruel pero no he podido olvidar del todo a Jasper y viéndolo de esa manera tendré mi futuro seguro además el dinero que me pagara la señora será muy útil para mí madre y poder pagar esa deuda.  Pero siendo sincera no le deseo a Lapis mal, y tampoco un "obsequio" de la señora Jaspela.

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" Entre la sangre y el amor"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora