Carl Grimes imagine: Forgiveness

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- ¡No es lo que tu crees!
- ¿Entonces qué es?

Tu muñeca estaba roja de su agarre. Sólo querías correr. Desaparecer.
- Suéltame Carl.
- No hasta que me dejes explicarte.
- ¿Explicarme qué? ¿Cómo ibas a besuquearte con Enid mientras no te estaba viendo?

Carl se paró en seco
- ¿Eso es lo que tú creías?
- No es lo que creí, es lo que iba a pasar.

- _____ por favor...
- Se acabó Grimes, adiós.
Te soltaste y caminaste a tu casa.
Él no hizo nada por detenerte, lo cual te dejó en pedazos.

Una vez que llegaste a tu casa, cerraste la puerta y no dejaste que nadie más entrara.
Te recargaste en la puerta de tu habitación, donde nadie te podía ver y lloraste todo lo que no habías llorado antes.

~Flashback~

- Hey Rick, ¿donde está el mini sheriff?- preguntaste
- Jaja, buenas tardes señora Grimes- dijo él- Está en la casa
- Gracias

Caminaste hasta dar con la casa, de donde provenían risas.
"¿Estará con alguien?" Pensaste
Abriste la puerta con cuidado de no hacer ruido y caminaste a la pequeña sala.

Ahí, en un sillón de la sala estaba Carl sentado con Enid. Besandose...
Con lágrimas en los ojos, abandonaste la casa corriendo.

- ¡______, espera!- gritó Carl mientras te seguía.

~Fin de flashback~

Después de tanto llorar, sin darte cuenta, te quedaste dormida.

Horas más tarde, cuando había oscurecido, ya habías tomado una decisión. Te irías de Alejandría. Ya no había nada o nadie que te pudiera detener. La única persona que te había retenido para hacerlo era Carl, pero con él fuera ya no quedaba nadie.

Tomaste tu mochila con tus cosas y llevaste tu pistola a la mano.
Cuando llegaste al muro, ibas a empezar a escalar para subir, pero...

- ¿A donde crees que vas?- dijo una voz
Su voz.
Suspiraste
- ¿A donde crees?
- Sabes que no puedes salir sin mi permiso- dijo mientras se acercaba
- Y sabes que no puedes besar a otra chica sin MI permiso- remataste

Carl suspiró
- Si tan sólo me dejaras explicarte
- A ver, señor inteligente, dilo ya antes de que cambie de opinión
- Yo estaba en la casa y Enid llegó con la excusa de que quería ver a Judith. Ella subió y yo me quedé abajo haciendo unas cosas.
Un rato después, ella bajó y me dijo que quería hablar conmigo. Me dijo que le gustaba y que no soportaba verme contigo, que siempre había querido ser más que mi amiga.

"¡Que hijaepuuuuta!" Pensaste "y pensar que quería que fueramos amigas"

- Y eso no es todo, yo le dije que se fuera, que te tenía a ti, pero cuando tu entraste me tomó por sorpresa y me besó.- continuó él.

Aún con la oscuridad de la noche, viste como sus ojos pasaban de normales a vidriosos.
- Y yo....yo...lo siento, se que te hirió ver eso pero ¡yo no quería te lo juro! Sólo, por favor, perdóname.- dijo él
- Si me dolió, y no sé si creerte o no...- respondiste
Decidiste escalar la pared para huir de toda esta situación, no querías volver a ser lastimada.

Estiraste el brazo hacia un borde del muro para empezar a escalar, pero él te tomó por la muñeca y te jaló hacia él.
- Si alguien merece irse, es ella.- susurró en tu oído
Te mantuviste inexpresiva.
- Sabes que yo no te cambiaría por nada. Ni por la cura contra todo esto.- siguió diciendo- Pero....si lo que quieres es irte, lo entiendo, pero necesito que me perdones.
- P-¿Perdonarte por qué?- preguntaste confundida y a la vez conmovida por sus palabras.
- Por no ser lo suficientemente bueno para ti. Por no haber apartado a Enid al instante. Por no darte bien el lugar que te mereces en el mundo.

Te soltó y se apartó un poco de ti.
- Tu decides- dijo él

Miraste al muro, luego a él. Viste la pistola en tu mano. ¿De verdad quieres hacer esto? ¿Después de todo lo que ha hecho él por ti? ¿Después de todo lo que han pasado juntos?

"No" pensaste
La pistola hace ruido al caer en el duro suelo. La mochila que se descuelga de tus hombros también.
Los brazos de Carl brindan calor en el frío aire de la noche.
Un susurro invade el silencio.
- Te perdono. Y me voy a quedar...

Imaginas de Chandler Riggs y Carl Grimes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora