Guns N'Roses Y El País De Las Maravillas

Capítulo 9.

La Oruga y Alicia se miraban mutuamente, hasta que la oruga se quitó la pipa de la boca.

—¿Quien eres tú?—preguntó la oruga cansada.

—Ojalá lo supiera—contestó Alicia.

—¿Que quieres decir con eso?—preguntó la oruga frunciendo el ceño.

—No se, estoy algo confundida.

—¿Por qué?—la oruga tomó la pipa.

—Me encuentro con un pelirrojo guapo, cambio de estatura.

—¿Por qué?—volvió a cuestionar la oruga.

Alicia se enojó, volteo dándole la espalda a la oruga y siguió caminando. La oruga gritó y Alicia regresó con ella.

—¿Sabes?, con ese carácter no conseguirás nada—la oruga expulsó el humo con forma de círculos.

—Lo lamentó, solo que estoy algo confundida y preocupada por ayudar a un amigo mío.

La Oruga sopló por última vez y bajó de la zeta, se perdió entre el pasto.

—¡Toma Dos pedazos de la zeta, te ayudarán!—grito desde el pasto.

Ella obedeció, la liebre y ella irían al castillo de la reina roja.

~Mientras Tanto Mrs. Paciencia~

—¡MIERDA!—gritó Axl molesto.

—Tranquilizante, Vamo a Calmarno—dicho esto el sombrero sacó unas galletas de su saco.

Axl se quedó mirando el sombrero del sombrero, hasta que dio con un gacho para tejer.

—Préstame tu sombrero—dijo Axl esbozando una sonrisa.

—No—sonrió el sombrero y siguió comiendo sus galletas.

—¡Que me lo des puto!—gritó Axl—te voy a contar hasta tres...

Axl ya no continuó Con contando ya que el sombrero le dio el gancho para tejer.

—El sombrero no se toca—le guiño un ojo y siguió comiendo sus galletas.

Axl comenzó a manipular la cerradura para poder escapar junto con el sombrero.

—Si algo aprendí cuando estuve en prision fue esto—dicho esto la cerradura cedió para que Axl y el
Sombrero escaparan.

—¡Libre soy, libre soy!—decía Axl mientras entendía los brazos—Basta de momentos femeninos, vayamos con la reina blanca y a ver al amor de mi vida.

—Tranquilízate vato, se te empapa la chinampa cuando piensas en el otro Slash—dijo el sombrero caminado.

Axl lo jalo para que corrieran rápido y así poder pero no falta quien los detuviera.

—¡ALTO AHÍ!—dijeron.

Las aprecio ♥️.