Guns N'Roses Y El País De Las Maravillas

Capítulo 15.

Axl y Ashba habían entrenado por toda una semana para ver quién gana. Todo esto tenía lugar en unas ruinas el pozo era como el tablero de ajedrez de un lado estaba la reina blanca y del otro la reina roja.
Steven se pasó al centro.

—¡EN ESTA ESQUINA TENEMOS AL VOCALISTA DE LA BANDA MÁS PELIGROSA, AXL ROSE!—dijo Steven con voz de presentador.

Todos lo voltearon a ver con una cara de seriedad, Dejaron a Steven a un lado y ahora Sí era momento de ver la gran pelea.

~Narra Axl~
Pase al frente y saque mi espada, escuche gritar a la reina roja «¡PERDERÁ LA CABEZA!» eso era una señal de que Ashba tenía que atacarme.
El ejército blanco y rojo también estaba peleando alrededor nuestro, debo admitir que Ashba es demasiado bueno con la espada pero era momento de dar lo mejor de mí y salvar a este reino junto con el amor de mi vida.
Cada moviendo lo esquivaba fuimos avanzando hasta llegar a unas escaleras casi en ruinas.

—¡Ríndete!—dijo con voz fuerte.

—¡Nunca!—Conteste sosteniendo mi espada más fuerte que nunca.

Ashba hizo Un movimiento el cual hizo que tirara mi espada y cayera del otro lado.  No tenía con qué defenderme ¿era mi final?, ¿el de todos?.  Esto no podía acabar así, cuando me iba a clavar la espada lo pateé haciendo que se cayera para atrás, se quedó un tiempo tirado y en ese tiempo fui por mi espada. Cuando la tuve de nuevo vi su cara de horror, solo recargue la punta en su pecho sin atravesarlo.

—¡VICTORIA!—grite.

Ashba estaba herido por una pequeña cortada. La reina roja estaba enojada.

—¡ATRÁPENLO!—gritó a su ejército.

La corona de la reina roja se le había caído y había rodado a los pies de la reina blanca. La reina blanca la recogió y se la puso, había cambiado de forma.

—Alexandra Rose serás llevada a las tierras más lejanas con Ashba—contestó la reina blanca con tono serio.

Duff casi se desmayaba por ver a Isabella sería, Izzy lo noto y le dio un golpe en la cabeza.

El reino ahora era de la reina blanca de nuevo, había salvado a todos Slash estaba a salvo, todos estaban celebrando. De pronto mis párpados se volvieron pesados, todo lo comencé a ver borroso.

—¡Axl!—gritó Slash asustado.