Aventuras espaciales: "The Elementals"

Capítulo VII

Nova miraba sorprendido y eufórico, todos sus planes de juntar a los dos chicos no fueron necesarios, eran como imanes, atrayéndose sin necesidad de que alguien interviniera. Nova se sentía feliz por Vega y Cosmo, pero su felicidad duró poco cuando vio a la novia de Nébula, Zafiro, tomarles una foto a los chicos; Nova sabía que harían con esa foto, su piel se puso pálida y su cuerpo se tensó, no temía por Cosmo, pues ya toda la escuela sabia sobre su heterosexualidad, pero ahora temía por Vega, la pobre chica que lo ocultaba sería sin duda la más dañada.

—¡Bórrala!—le ordenó a Nova a Zafiro

—¿O qué?—desafío Nébula

Vega quien apenas se percataba del asunto no sabía qué hacer, estaba en shock, por una parte porque la expondrían sin duda, y por otra porque había recibido su primer beso, del chico que le gustaba. Las manos era lo único de su cuerpo que se movían, más que nada por los nervios, nervios que la carcomían, su familia, posible bullying, sin mencionar la gran discriminación y miradas que juzgaban peor que el gran Soid.

Nova logró arrebatarle el celular a Zafiro, quien estaba distraída viendo la expresión de Vega y deleitando su cara de horror; El chico castaño oscuro entró a galería y eliminó la foto gusto cuando Zafiro lo tacleaba, ambos cayeron impactando contra el pavimento de las canchas. Cosmo quien sangraba por la nariz, labios y partes del cuerpo, tacleó a Zafiro, Nébula furiosa y ofendida tacleó a Cosmo, Vega quien apenas reaccionaba se aventó contra Nébula.

—De nuevo ustedes—dijo la decana quien los miraba reprobatoriamente a todos.

Los cuatro chicos se encontraban en detención, Nébula y Zafiro estarían las próximas semanas en detención, ya que Vega y Nova habían declararon que golpeaban y acosaban a Cosmo, pero eso no salvaba a Nova y Vega de detención. En cambio a Cosmo lo habían enviado a enfermería y habían mandado a llamar a sus madres. Cosmo quedaría al expuesto como lo haría Vega, de esta manera se acercaría la pequeña llovizna para ellos, esa llovizna que para ellos sería una tormenta, pero la verdadera tormenta apenas se acercaba. Nova miro hacia la puerta de detención y vio como Eclipse se burlaba de Nébula y le enseñaba el dedo de en medio, tal como lo había hecho hace unos días Nébula.

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—Nova ¿ya desayunaste?—le preguntó su padre cariñosamente

—Sí, ya me voy se me hace tarde, te quiero—dijo Nova mientras salía disparado.

Nova salió de su casa, una casa no muy bonita, pero tampoco fea, una casa típica que se podía costear los de la clase media, siguió caminando, hoy no se iría en autobús, hoy prefería irse caminando, el clima estaba agradable. "Clima agradable" pensó Nova "¿Por qué cuando nací no estuvo así?, en cambio, mis padres me dicen que el clima estuvo loco, tan siquiera me hubieran mentido diciéndome que estuvo como hoy"

—¿Qué piensas?—lo sorprendió Deneb

—¡Deneb!—gritó Nova—me asustaste.

—Vaya, eres muy diferente a él.

—¿A quién?—si intrigó Nova

—A nadie olvídalo, ¿en que tanto pensabas?.

—En... en nada olvídalo—sonrió Nova, quien miró más a detalle a Deneb, quien llevaba una playera de cuello V color mamey y un pantalón caqui, sin faltar su típica chaqueta de cuero negra, pero en su mano derecha llevaba un ramo pequeño de flores.—¿Para quién son las flores?

—Para un chico que me vuelve loco—soltó Deneb y Nova se emocionó, él no tendría que hacer nada, porque Deneb lo haría, "Él se me declarara" se dijo con ilusión el chico de ojos verde limón.

—Y ¿Quién es ese chico? Seguro le van a encantar—preguntó Nova sonrojado.

—Un chico de ojos verdes que...... ah.... Es que es tan..... Perfecto, tan para mí. Eso espero me ha costado parte de mi sueldo—a Nova se le aceleró aún más el corazón, Deneb estaba haciendo todo esto tan romántico que Nova juraba que desfallecería en cualquier momento.—Tal vez lo conozcas—Nova no lo pudo contener y abrazó a Deneb.

—Deneb, esto es tan romántico, tú también eres mi chico perfecto y..... y creo que llorare—dijo conteniendo las lágrimas de felicidad.

Nova abrazaba como nunca nadie más abrazaría a Deneb, lo abrazaba con cariño y anhelo, lo abrazaba como si no hubiera mañana, transmitía todo los sentimientos puros que Nova sentía hacia Deneb. Pero algo no cuadraba ahí, algo no esperanzó a Nova, al contrario le inyectó la espina de la incertidumbre. Mientras Nova podía sentir como abrazaba a Deneb, también podía sentir la rigidez e incomodidad del chico castaño y ojos azules. Temeroso el chico de ojos verdes limón, alzó la vista hacia el rostro de Deneb, el cual estaba rojo y se notaba más que incomodidad, repulsión. Deneb separó bruscamente a Nova de si, el chico balbuceaba cosas que Nova no comprendía.

—Nova, tu no me gustas—soltó Deneb sin sentir culpa—Me gusta Eclipse, no tú.

Nova sentía temblar todo su cuerpo, desde sus pies hasta el último cabello castaño oscuro que poseía, su rostro estaba shokeado, tan inexpresivo como pálido, pero su rostro pálido poco a poco se fue tornando rojo. Nova se sentía tan estúpido, avergonzado y furioso, pero lo que más predominaba y contaminaba su corazón era tristeza, ese sentimiento que provoca dolor al corazón, ese sentimiento que provoca extrañamente que las lágrimas fluyan de los ojos. Nova las retenía con la poca fuerza que le quedaba, pero poco a poco, una a una, se le fueron escapando. El chico de ojos limón bajo la vista y se tensó tratando de evitar temblar, pero no podía, quería gritarle a Deneb, quería golpearlo, quería que Deneb no lo hubiera humillado de tal manera, pero ya no había vuelta atrás.

—Nova, no quiero que....

—¡No!—gritó dolido el castaño oscuro—¡No lo digas! No digas nada.—Nova respiró hondo y corrió, corrió como nunca antes había corrido, queriendo alejarse para siempre de este problema.

Tal vez Nova si podía escapar corriendo de este incomodo momento, pero si no se enteraba de lo que estaba por suceder a tiempo, ni corriendo podría escapar.

****

Habían pasado dos semanas desde la incómoda escena que había vivido con Deneb. Nova le había contado todo a Vega, quien estuvo a punto de ir a golpear a Deneb, pero fue retenida por el rubio de ojos azules, los cuales no se habían visto mucho después de detención, Vega le había dicho al castaño oscuro que era para no levantar sospechas, ya que Nébula y Zafiro habían esparcido el rumor, mas no era muy creído porque muchos querían a Vega y la consideraban una niña "bien". Tras pasar las dos semanas Nova se había encontrado en algunas ocasiones con Deneb siendo rechazado por Eclipse, nada fuera de lo normal, Nova deseaba estar en el lugar de Eclipse, para poder tener el amor de Deneb, pero a la vez se negaba ese pensamiento, el no sería Eclipse jamás, no sería ese chico engreído con una vida perfecta y adinerada. Nova terminaba torturándose con sus propios pensamientos todos las noches, hasta las mismas lunas podrían ver cuántas veces Nova lloraba desconsoladamente. Era increíble todo el daño que podía ocasionar el amor. Pero si hablamos de sufrimiento por amor, Nova, no había experimentado ni una millonésima parte de lo que estaba sufriendo Astro.