Nerd a la vista de todos ©

Capitulo 9

Me desperté atontada aun. Ya me había relajado por todo lo sucedido y si se preguntan dónde estaba mi mamá en ese entonces pues, aún seguía de fiesta con su novio. 

Me levanté golpeándome la cabeza para poder concentrarme. Eran como las 6 de la mañana. Sé que Justin se levanta como a las 7:45 así que me imaginaba que no tendría problemas.

Miré mi celular, tenía 47 llamadas perdidas de Daniel, 25 de Kim. Lo más probable es que Daniel le haya contado lo sucedido, pero ninguna de mamá....

~No te desanimes por lo menos alguien te llama~

Al menos a mí sí me llaman

~ Solo levántate y ya. Ya me amargaste la mañana ~

Me puse mi uniforme y me dirigí hacia la puerta de mi pieza. Cuando la abrí vi que Justin estaba dormido a un lado de esta, lo miré de reojo y me sentí en paz ya que hoy no quiero pelear con nadie.

Avance sigilosamente por su lado y me dirigí hacia la cocina, me hice el desayuno y a él también, solo porque ayer hizo el almuerzo

~ ¿Cómo sabes que no lo compro en una tienda? ~

Dix no me molestes en los tiempos que intento estar en calma

Le dejé el desayuno a un costado suyo y le puse una manta encima para que no se enfermase, me di cuenta que se estaba despertando, entonces agarré mis cosas y me fui al colegio

Verdad que ahora voy a tener que ver a todos de inventar una excusa por lo de ayer y blablablá...

-¡Laura! –Era Daniel quien me llamaba y vino corriendo a abrazarme.

-¿Cuál es la gracia de abrazarme? –Le dije entre risas

-¿No te duele la nariz? –me dijo preocupado

-Me duele solo un poco, pero no es para tanto -le dije dándole una sonrisa

-Perdón –Me dijo tocándome la nariz

-Te perdono si no vuelves a tocarme así la nariz –Dije apartando su mano

-¿Nos podemos tomar de las manos, como cuando éramos pequeños? –Dijo extendiéndome su mano

-¿Y eso porque? –Lo miré raro

-Tú solo dame tu mano –Tomó mi mano y la apretó

~ Se niña buena y síguelo ~

En eso escuché el grito de Justin a lo lejos. Miré hacia atrás y ahí venía él corriendo a toda prisa hacia nosotros.

-Laura ¿porque no me despertaste? –me miró enojado mientras tomaba el aire nuevamente

-Porque calladito te ves más bonito –Le contesté con indiferencia

De pronto apartó su mirada a nuestras manos e hizo una expresión de frustración, luego miró a Daniel

-¿Porque están agarrados de las manos? –Le dijo con un tono de voz serio

-Eso a ti no te importa –Le respondió Daniel de la misma manera

~Uy hay viene~

¿Qué viene?

Miré hacia los lados y era Sandra la cual me dio un empujón que hizo que casi me callera. Por suerte Daniel me tenía de la mano y me agarró

-Oye, ten más cuidado –le dijo Daniel enojado, pero al parecer no lo escucho ya que se estaba besando con Justin. Los miré por un momento y me acordé del beso.

Tendré que lavarme la boca con cloro. Quien sabe a qué mujer besó antes que yo

Hice una mueca de asco

-Vamos, dejémoslos solos –Me dijo Daniel. Yo asentí sin quitar la expresión de asco del rostro.

Comenzamos a caminar. Justin se percató de esto también y dejó a un lado a Sandra y se dirigió hacia nosotros. Me tomó de la cintura y me puso de la misma manera en la que llevan a un saco de papas

-¡Oye suelta a Laura! –le grito Daniel

-¡Si suéltame! –Le reclamé.

-¡Suéltala! –Le ordenó Sandra tomándolo de la camisa

-¡Justin bájame! ¡Me quiero bajar! ¿No sabes lo que me va hacer Sandra y su sequito cuando llegué al colegio? –Él no me hizo caso y comenzó a caminar

~ ¿Porque no le pegas? ~

Porque dije que no quería pelear con nadie hoy

~ Yo que tú le pegaría un puntapiés y se acabó~

Eres mi conciencia tendrías que aconsejarme de buena manera

~ ¿Has escuchado sobre los ángeles buenos y malos? Pues yo soy el malo. La parte buena se perdió en el camino cuando naciste ~

Justin siguió caminando. Yo no tenía ni idea de porqué Daniel no lo había seguido, además, no sabía ni a donde me llevaba

Se detuvo en un lugar y me bajó. Estábamos enfrente de un hospital

-¿Que hacemos aquí? –Le dije enojada

-Te voy a llevar a que te revisen la nariz por lo del golpe.

-Me voy al colegio –dije con una voz desinteresada

-¿Qué pasa si tienes algo mal?

~  No, eso lo tiene de nacimiento ~

-Me da lo mismo, aparte todos mis malestares son por tu culpa, te conozco apenas hace 4 días y me has hecho más daño tu que cualquier otra persona –Le reclamé enojada

-¿Que hice tan terrible para que digas esas cosas? –Me dijo cruzándose de brazos

Le pegue una cachetada. Me sorprendía lo estúpido que podía ser al no recordar todas las tonteras que había hecho

-Aunque me pegues no te voy a dejar –me agarró de la muñeca y me llevó de nuevo rumbo al hospital.

Al llegar me examinaron y me dijeron que no tenía nada importante.

-Te dije que no tenía nada –Le reclamé saliendo disparada en dirección al colegio. Él no me dijo nada y solo me siguió

Llegamos tarde al colegio. Al sentarme en mi puesto todas mis compañeras de abalanzaron sobre mí al verme llegar junto a él

-Fue solo casualidad –Les dije sentándome en el puesto –Él vive cerca mío, así que llegamos al mismo tiempo.

Todas me miraban dudosas, y en especial Sandra, la cual me miraba con más mal ojo que antes.

Después de decirles se alejaron milagrosamente.

~De la que te salvaste~

Cuando tocaron la campana de recreo no tenía ni hambre, me dirigí al quiosco y de nuevo me encontré con esa escenita de Justin besando a otra 

 Este no se cansa de hacer esto. Cada vez me asusto más de si se me puede contagiar algo por lo de los besos

 Lo ignoré y seguí mi rumbo. Hice lo de siempre hasta que regresamos a casa.

Al llegar mi estómago por fin rugió.

-¿Quieres almorzar? pregunto Justin

-Si –Le di la espalda y me dirigí al baño para lavarme las manos.

Sacamos la comida congelada que mamá dejaba siempre y la calentamos. 

Nos sentamos en la mesa y empezamos a comer 

-Gracias estaba rico –me levanté de la mesa y fui a dejar mis cosas.

Me fui a mi pieza y me recosté en mi cama. Sentí la puerta abrirse y era Justin ¿De qué quería hablar ahora?