Nerd a la vista de todos ©

Capitulo 22

Daniel y Kim me llevaron a casa, los invité cenar, pero los dos me dijeron que no,  ya que según ellos había una prueba.

Me dijeron que Sandra les dijo en la fiesta

No sé si creerle o no

~A estudiar se ha dicho~

Si se, pero antes tengo que bañarme, estoy del asco

Me dirigí a mi habitación a buscar toallas. Esta estaba congelada ya que había dejado la ventana abierta.

La cerré junto con las cortinas. Así tendría un poco de más de calor. Busqué mi pijama y lo dejé enzima de la cama para cuando saliera de la ducha.

Me miré al espejo un momento, de verdad que estaba horrible, lleno de jugo, el vestido se me pego al cuerpo y se veía terrible

~Te pareces a la cenicienta, solo que sin el final feliz~

Pues claro, pero solo que yo tengo un hermanastro que es celoso y no para de humillarme…prefiero ser la cenicienta verdadera, al menos ella conoce a su príncipe al final

Tomé mis toallas y me dirigí a la ducha.

El agua estaba tan tibia que me relajé por unos momentos. La casa estaba sola, o eso creía ya que no había visto salir a Mikaela antes, así que no estaba segura si es que aún estaba aquí.

Al salir me puse mi pijama, no me sequé el cabello ya que nunca me ha gustado como se me esponja.

Tomé mi cuaderno de biología, ¿Cómo me iba a aprender todo sobre las proteínas y sus cosas en una noche, si esto era 4 días de clases?

¿Escuchaste Dix? tienes trabajo

~ Apréndetelo tu sola, yo solo soy tu conciencia no tu memoria. La memoria está aquí a mi lado, la cual es lo más miniatura que había visto. Saluda memoria ~

Ya déjate de bromas y ayúdame con esto

Me tiré en mi cama y me puse mis lentes, ya que no podía leer sin ellos.

Apenas abrí el cuaderno me invadió un sueño tremendo ¿Cómo podía ser esto, si aún no he leído nada? En tan solo recordar la voz de la enseñanza me daba flojera

~ ¿Porque no le preguntas a tu hermanastro, pequeña cenicienta? ~

Prefiero leer antes que eso.  Ahora que lo pienso ¿y Justin?

Me levanté, me puse las pantuflas, abrí la puerta y no había ruido alguno, fui a ver a la pieza de mi mamá y ella ya estaba durmiendo con su tierno novio. Hice una expresión de asco y cerré la puerta.

Bueno de que me preocupo si no está, más tranquila la casa

Me dirigía a mi habitación cuando se escuchó un ruido extraño afuera del departamento.

Iba a mirar por la ventana, pero como dice el dicho “la curiosidad mató el gato” me alejé de esta y me dirigí de nuevo a mi pieza

~Oye, pero el gato murió sabio. Además, ni siquiera eres gato. No seas tonta~

Eso es cierto

Me acerqué de nuevo a la ventana, había un chico, andaba con un chaleco blanco. Estaba peleando con otro joven, con una chaqueta de cuero. No lograba distinguir bien sus caras, pero parecía una pelea seria, de pronto el de chaqueta de cuero sacó un cuchillo y se lo mostró al otro chico. No sé por qué me entró adrenalina, actué impulsivamente y abrí la ventana

~ Tu enserio tienes problemas. ¡No te metas! ~

¡Ahora me lo dices!

-¡Oye! ¿Qué haces con ese cuchillo? –El chico al parecer me escuchó y salió corriendo –Cobarde  –dije viéndolo correr, el otro chico de chaleco blanco me miró curioso – ¿Que miras? –dije afirmando mi brazo en el respaldo de la ventana, poniéndome la mano en la mejilla.

-¿Porque hiciste eso? – Inclinó su cabeza

Porque la idiota de mi conciencia no actuó a tiempo

-Ni yo lo sé –dije levantando los hombros

-Bueno, muchas gracias, te debo una –me dio una sonrisa.

Él chico era totalmente resaltante. Tenía el cabello rubio, casi blanco. No podía ver sus ojos ya que tengo corta vista.

Últimamente los rubios están de moda parece

-¿Cuál es tu nombre? –Al menos sabría algo para después cobrarle

-Me llamo Martin –dijo feliz –y ¿tú?

-Yo Laura –Levanté una mano

-Bueno Laura, te debo una –dijo sonriendo y se fue corriendo.

Lo miré al irse, cuando una bocina suena tan fuerte que me hizo rebotar contra el marco de la ventana.

-¿Que tanto ves? –Justin salió del auto y me sonrió

-¿Y ese auto?

-Es para…

-Espera no quiero saberlo –dije mostrándole la mano, cerré la ventana y entré

Justin entró a la casa, dejo sus cosas en el sofá

-Oye mañana hay prueba ¿estudiaste? –dijo riéndose

-¡Hasta tú lo sabias! ¿Porque no me dijiste? –dije acercándome a él

-Porque me gusta verte enojada –dijo entre risas

Masoquista

~Pídele que te enseñe~

Ahora reaccionas

-Oye

-¿Qué?

-¿Me puedes ayudar a estudiar? –Me cabreaba la idea de pedirle un favor, pero era necesario

-¿Qué? –dijo acercándose a mi

-¡Que me ayudes a estudiar!

-Pídemelo por favor –dijo riéndose

-Por favor –Rodé los ojos

-Pídelo mirándome a la cara

-Por favor –Lo miré con una sonrisa -¿Ahora sí? –dije cruzándome de brazos

-Sabes, te ves más linda cuando sonríes.

Intentaré sonreír lo menos posible

-Pero antes otra cosa

-¿Qué? –Ya me estaba arrepintiendo de hacer esto

-Dame un beso en la mejilla

-Eres un aprovechado -Refunfuñé

-Bueno, estudia sola –Se dirigió a su pieza

-Oye… –Lo tomé de la manga

-¿Y bien?

Voy a arrepentirme en un futuro distante

Me acerqué a su cara para darle el beso, pero él  la corrió y le di el beso en la boca.

-¡Oye! Era en la mejilla –Me restregué los labios contra mi brazo

¡Qué asco!

-Ahora si te ayudo

Él caminó a su cuarto con una sonrisa. Y en cambio aún estaba parada ahí haciendo muecas de asco

¿De verdad voy aprender con él?

~ Vas a aprender más de lo que pensabas~