Capítulo 41

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La Joven Daiyokai permanecia sentada en una banca, tranquila en su jardin, sin la compañia de su Protector. Sonreia al recordar la reaccion del cobrizo horas atras.

FLASHBACK

Sin duda es una mujer perfecta...-comento.

Lo es...-contesto de manera inconsciente, segundos despues abrio los ojos sorprendido- ¡Digo!...perfecta para quien este buscando compañia...-repone nervioso. A lo que la albina sonrie.

Kyoja...-el chico se muestra algo avergonzado- no tienes porque negarme tus sentimientos...mucho menos a ti mismo...-el Protector seguia sin ver su Señora- El amor es hermoso incluso algo poderoso que te enseña lo mas bello que te puede dar la vida...-la chica toma una Gardenia- pero tambien es un sentimiento efimero...-el cobrizo mira a la albina- si lo sabes apreciar, descubriras sus maravillas y amaras hasta que tu Corazon mantenga ese acelerado palpitar ante aquello que amas...-los petalos de la flor comienzan a marchitarse, caen secas y marchitas- si embargo si te niegas a amar te privaras a ti mismo de sus maravillas y seras un espectador que anelara la experiencia que viven otros... y tu corazon se reprimira por haber ignorado sus deseos de amar...-la albina deja caer el tallo seco.

Mi Lady...-musito.

En mi opnion...-puso su de indice en su menton- creo que deberias ser tu quien lleve la delantera...-le muestra una sonrisa- Se feliz Kyoja...-de un momento a otro ______ tenia en sus manos la Gardenia que anteriormente estaba marchita, ahora revosante de vida, la deja en las manos de su Protector para luego seguir caminando por su jardin.

Dejando a un enamorado y esperanzado Yokai, para que tomara una decisión.

FIN FLASHBACK

El trinar de una bandada de aves saco a la chica de sus pensamientos, levanto la vista al colorido cielo teñido de tonalidades rojizas, se levanta de su banca y mira el horizonte donde el cielo comenzaba a oscurecerse, el viento eleva sus cabellos y acaricia su mejilla.

Vuelve al interior del castillo dirigiéndose a su habitación, tomó un cambio de ropa de su armario.

Ya cambiada, se dirige al salón en donde encomendó a la encargada de las labores del castillo que los sirvientes podían retirarse antes pues ella saldría al exterior.

El atardecer se desprende del cielo dando paso a la oscura noche, la albina aumento su vuelo por los cielos, alejándose lo más posible del castillo u aldea cercana, en su trayecto divisó un lago, ni grande ni pequeño.

Cuando la luz de la luna llena tocaba aquel páramo, la albina descubre sus piernas, sentándose al borde y depositando su piernas en el agua.

La vibraciones que emitía su cuerpo se detienen, el calor de su cuerpo comenzaba a descender, sus uñas tomaban su forma normal, su latido se regulan al igual que su respiración.

El baño lunar hacia efecto.

Todo era perfecto y tranquilo, el cielo totalmente despejado mostrando cada estrella, constelación del firmamento.

Una brisa mueve suavemente sus cabellos, un estremecedor escalofrío remueve el cuerpo de la albina, un jadeo se le escapa inconsciente.





















































S-sesshomaru...-el nombrado estaba olfateando su cuello, mientras que sus manos reposaban en los hombros de la contraria.

Tu olor...a cambiado...-susurro, los nervios invaden el cuerpo de la albina- tendré que encargarme de eso...-sus mano bajan por los frágiles brazos de _____, llevándose la tela que cubría sus hombros.

Descubriendo la blanquecina piel que contratas a la luz de la luna, los labios del Inu-Yokai marca y besa la piel de su cuello, reparte beso por los hombros femeninos para volver al cuello.

______ se gira para encontrar el rostro del platinado, aquellos ojos que tanto añoraba ver, después de meses en que no los había contemplado, meses en que solo podia verlos en recuerdos, esta noche estaban
frente a ella, igual de hermosos, igual de dorados, igual de penetrantes, igual de brillantes e igual de enamorados.

Los labios de la chica atraparon los de su amante, los labios sacian su necesidad y trae consigo la pasión, sus lenguas no tardaron un formar parte de aquella unión.

______ se desprende del beso para girar, quedando a horcajadas, sus manos juegan con la armadura y la ropa del masculino, hizo de la estola aún lado, volviendo a unir sus labios.

Sesshomaru vio el deseo despertar en ella por lo que tomo los bordes de su ropa para seguír descubriendo sus brazos, dejando ver el inicio de la separación de aquellos atributos que lo volvían vulnerables al deseo. Antes de descubrirlos dio uno pequeños masajes y apretones sacando jadeos a su amante.

¿A que quieres jugar Lord Sesshomaru? -hablo entre jadeos la peli-blanca, se muerde e labio inferior.

La pregunta de la fémina provocó que la sangre de Sesshomaru corriera rápidamente por sus venas, su calor corporal aumenta recorriendo cada parte de su cuerpo pero él calor se centraba más en su zona baja.

miles de imágenes de ellos dos cruzaron por la mente del peli plata, muchas de esas imágenes de ellos en pleno acto de amor pero de distintas maneras, un gruñido sale de su garganta. La mano que apretaba el Seno femenino aprieta su  agarre arrancándolo un sonoro gemido a ______.

El InuYokai la deja bajo su cuerpo, sorprendiendo a su pareja la beso con pasión y deseo recorre cada parte del cuerpo de su compañera.

¿Recuerdas aquél desafío?...-

FLASHBACK

A mí no me tratas así mujer inmunda...-hablo con furia mientras tenía el cuello de la albina presa de su mano.

Olvidaba que el Gran Sesshomaru tenía orgullo...-aprieta su agarre en el cuello de ______.

No te tengo miedo Sesshomaru...no eres más que un Yokai con el orgullo por las nubes, que solo busca saciarse de poder...-continuó- soy fuerte incluso más que tu...-

Entonces por qué no lo demuestras...-reto.

Lo hare...una vez que termine con la miserable vida de Horuko...-logró alejarlo de ella- pero hasta entonces solo espera a que el momento llegue...-el peli plateado asiente lentamente y se retira.

FIN FLASHBACK

Es hora de saber quien manda...-dijo mientras su mano derecha acariciaba aquella zona donde la chica era vulnerable. Los dedos de Sesshomaru abren sus pliegues para encontrar aquel botón que ponía en delirio a su pareja.

acepto Mi Lord...-responde para reprimir un gemido.










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