La chica de al lado - El Rubius y tú

Capítulo 36:

Narra Rubén:

[3:00 a.m.]

La encontré en el edificio. No saltó. Está en mi casa, en la cama. La observo silenciosamente. Acaricio su pelo. Sonríe y se tapa hasta el cuello. Caigo dormido.

Es por la mañana. Los rayos de luz penetran por la ventana. Miro a mi lado. ______ no está. Me levanto de un salto y corro hacia el salón. Está en la cocina, tomándose un café con una tostada. Me mira y sonríe. Señala la cafetera, pero niego. Me siento a su lado y ella apoya su cabeza en mi hombro.
Mi barriga suena y ella ríe.

-Anda, ve a desayunar.- Coge su café y bebe. La espuma se le ha quedado en el labio superior. Poso mi pulgar por sus labios y la beso.

Narra ______:

[4:00 p.m.]

Estamos en el sofá. Pienso, pienso en lo nuestro. Esta mañana he hablado con mi madre. Dice que me vaya a Mallorca unos meses, para que todo se relaje. Creo que es lo mejor, pero quiero tanto a Rubén.

-Rubén.- Miro sus ojos.
-Mmh.- Me sonríe.
-¿Podemos hablar?.- Su expresión cambia y se sienta correctamente.
-Sí.- No tiene expresión alguna.
-He estado pensando, y... creo que necesitamos un tiempo.
-Espera, espera. ¿Estás cortando conmigo?.- Su tono de voz se eleva.
-No Rubén, no. Cálmate por favor, te lo pido.- Fijo mi mirada a mis manos.- Esto que está pasando, es problemático para nuestra relación. Nos debemos un tiempo para nosotros mismos y sobretodo, para que todo esta mierda vuelva a la normalidad.

Le cae una lágrima y niega con sus manos nerviosamente. No dice nada, está callado, hay un silencio incómodo.

-Me voy un mes a Mallorca.

Sigue callado, pero esta vez empieza a sollozar. Me acerco a él y le abrazo con todas mis fuerzas. Él no reacciona, sigue con la misma postura de antes. Me acerco a su oreja y susurro: "Recuerda que te amo". Noto como sonríe torcidamente, pero no recibo respuesta.