#Día 6

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Ya llevo seis días sintiéndome incapaz de hacer muchas cosas.
Sintiéndome realmente inútil y queriendo quedarme en mi cuarto encerrada todo el día, o toda la vida si es necesario.
Mi mayor debilidad, por así decirlo, es el colegio. Después de que me entere de que Sebastian y yo somos, o fuimos aún no queda claro, novios todo ha sido mucho mas confuso. Él ya no hace esfuerzo alguno de hablarme, pero si se la pasa observándome en silencio entre las clases y en los recesos, lose por que puedo sentir la intensidad de su mirada en mi espalda.
Lo único que logra tranquilizarme ha sido mis espacios a solas, en donde puedo llorar sin importarme si alguien me anda oyendo, y no es necesario reprimir los sollozos. También he pensado demasiado acerca de toda esta situación, y al fin puedo sacarle algo bueno a todo este drama. Lo bueno es que me he concentrado mas en lo que me rodea, he mirado detenidamente los comportamientos de mis padres para sacar la conclusión de que ellos no andan bien.
Hace una hora, después de cenar, mis padres y yo nos sentamos en la sala de estar al ver la televisión. De lo que recuerdo ellos siempre se sentaban juntos mientras yo estaba sentada a sus pies, pero esta vez mi padre se sentó en el mueble individual de la derecha y mi madre y yo en el familiar.
Tenía miles de preguntas para ellos, pero sus caras y la tensión que se sentía por toda la sala me lo impidieron. No se tenía que ser muy inteligente para saber que ellos andaban mal y tampoco muy tonto para no darse cuenta.

En algún momento eso me llego a asustar, pensar que mi pequeña familia se estaba desintegrando, en vez de estar unidos por lo que acabábamos de pasar, y mas por mi estado de salud y mi estabilidad mental, aunque no le ponía mucha importancia a esta ultima.

Tal vez ande muy paranoica, pero yo los conozco y se que esos pequeños detalles son mas que pequeños, son pistas claras. Los pequeños detalles son los mas importantes.

Por otro lado, la escuela seguía igual a como los otros dos días anteriores. Temas que no entendía, dudas, frustración y la desesperación eran los sentimientos que reinaban hoy en día en mi vida.
Debo admitir que Esther ha sido una base solida en todo esto, me ha estado apoyando y siempre explicando.
Los chicos de mi salón han sido muy comprensivos, algunas veces han parado las clases para que retomemos desde el inicio para que yo me ubicara, ese gesto lo llevo grabado en mi corazón, y mi memoria. Al parecer en ese ámbito mi vida estaba mejorando, pero en casa y en mi mente no.

También he estado leyendo el libro "Madame Bovary", ese libro me ha desaburrido en mis penosas tardes y me ha gustado demasiado.
De lo que he podido leer he sacado la conclusión de los sueños son solo eso, sueños. Las realidad es mas frustrante, pero es la realidad y eso no se puede cambiar, en cambio, los sueños se pueden tergiversar a nuestro gusto y para nuestra conveniencia. Y eso estoy tratando de tenerlo siempre presente en mi.
La vida es real, no un sueño.
La vida es la humanidad contra Dios.
La vida es todo y no la nada.
Por que esos son los sueños, nada. Absolutamente nada.

-Sofia.

Dulce Agonía Donde viven las historias. Descúbrelo ahora