Ya era sábado y Lief no podía parar de sonreír. En menos de dos horas vería a Ren para tener su esperada "cita".
Distintas emociones abrumaban sus sentidos: nerviosismo, ansiedad y sobre todo, felicidad.
Lief buscó lo que vestiría por primera vez le pareció agobiante tener que elegir un conjunto, pero al final terminó escogiendo un algo básico - pantalones azules, polo plomo a rayas y un par de tenis negros.
Creyó que le tomaría menos de quince minutos arreglarse, pero estaba totalmente equivocado. Luego de media hora - arreglando su cabello, limpiando sus tenis, y dándose una última inspección en el espejo - al fin estaba listo.
Lief ojeó el reloj que traía en su muñeca izquierda, este le indicó que aún faltaba alrededor de una hora para las cinco, pero aún así decidió salir de casa e ir al punto de encuentro; era mejor llegar temprano ya que muchas complicaciones podrían aparecer en el camino – el tráfico, ayudar a alguna anciana a cruzar la calle o rescatar a un gatito indefenso de un grupo de perros.
Lief observó el inmenso árbol que se encontraba situado en medio del parque, tal y como había calculado, había llegado media hora antes así que se situó en un banquito a esperar.
Diez minutos antes de las cinco, Lief empezó a sentir que el nerviosismo lo carcomía a pasos agigantados. No tenía ni idea de lo que se haría en una cita.
Los minutos fueron transcurriendo, diez, veinte... treinta y empezó a preocuparse por Ren. No había rastro de él por ninguna parte. El menor decidió sacar su celular y enviarle un mensaje, pero maldijo al recordar que no tenía el número de Ren en su lista de contactos "Debí habérselo pedido" – pensó internamente.
Media hora más tarde – cerca a las seis. Lief se acurrucó en aquel banco. No había rastro de Ren por ningún lado, lo más probable es que lo hubiera olvidado o plantado.
-¡Hey!
Lief levantó la cabeza ante aquel llamado. Podía reconocer esa voz en cualquier lado.
-Lamento la demora – dijo Ren agitado – Yo... en serio, surgió algo.
Lief quería quejarse, pero al observar a un Ren agitado, declinó de hacerlo. Para el menor, el simple hecho de que Ren estuviese ahí – aunque tarde – era algo que le hacía sonreír.
-No te preocupes – dijo situándose de pie.
- ¿Esperaste demasiado? – preguntó Ren.
- No – dijo desviando la mirada – Llegué un poco tarde, por que... porque ayudé a una vecina a rescatar a su gato. "Pésima excusa" – pensó Lief avergonzado "¿No puedo ser más ingenioso?"
- Me alegra oír eso – expuso sonriendo – Me sentiría culpable si te hubiera hecho esperar demasiado.
Lief sacudió su cabeza.
-No... no pasa nada – dijo sonriendo lánguidamente.
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Lief se mordió el labio debido al nerviosismo y después suspiró. Tal y como había predicho, no sabía que hacer en una cita. Tenía miedo de quedar en ridículo con Ren.
-No estés tan nervioso – Ren lo animó – Te olvidarás de todo cuando subamos a los juegos.
Y así fue. Lief, jamás imaginó que tener una cita era así divertido. Ren y él habían decidido ir al parque de diversiones. Percibió que todas sus preocupaciones se habían esfumado en cuanto subió al primer juego.
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Inocencia Perdida [Yaoi]
Teen FictionRen intenta desesperadamente olvidar a su antiguo amor y para eso hará hasta lo imposible ¿Será capaz de olvidarlo? ¿Que métodos inauditos usará para lograrlo? Por otra parte, Lief es un muchacho sin experiencia en el amor esto cambia cuando por aza...