Solo una Marinette (Adrien vs Nathaniel)

Capitulo 3. "Pequeño percance"

*Adrien*

Llevaba al menos 45 minutos trabajando con Alya en el proyecto, en realidad ya habíamos escogido el tema y todo lo que teníamos que hacer era recopilar lo más importante de algunos libros que ella había buscado. A pesar de ello no podía sacarme de la mente el asunto de Marinette mientras perdía la mirada en las escaleras al fondo de la biblioteca.

- ¡Adrien!, ¿me escuchas?.- dijo Alya en un tono algo desesperado por llamar mi atención mientras sacudía su mano delante de mi cara.
-Perdona Alya, estaba pensando en otra cosa.- reconocí algo avergonzado mientras me despabilaba un poco.
- Lo noté. Te decía que sería mejor terminar el trabajo mañana, ya llevamos más de la mitad y necesito grabar el robo para mi blog.-
-¡¿Robo?!, ¿qué robo?.- dije tomando instintivamente mi bolso donde Plagg se escondía.
- Un par de ladrones a mano armada están robando el banco que está a unas cuadras.- dijo mientras sacaba su teléfono para mostrarme el artículo.- ¿ves?.
- Oh claro no hay problema, yo acabo de recordar que mi padre dijo que debía llegar temprano a casa así que ya será mejor que me vaya.- dije acelerado mientras me levantaba de mi asiento y corría en dirección a la parte trasera de las escaleras, una vez ahí saqué a Plagg.
- Dime Adrien, ¿qué harás con el pequeño asunto de Ladybug?.- dijo Plagg en su característico tono burlón.
- Lo descubriré ahora, ¡Plagg transfórmame!.- dije mientras posaba al cambiar a mi alter ego de Chat Noir.- será mejor que salgamos de aquí.- susurré mientras me escabullía fuera de la biblioteca en camino al banco.
- Ahí voy, my lady.-

*Nathaniel*

- ...Entonces le dije que era un tonto, claro que se podía mezclar lapiz y carboncillo en un mismo dibujo. Pero él seguía insistiendo en que no era del tipo de chico que mezclaba, ¿puedes creerlo?.- dije mientras hacía las ilustraciones finales para el proyecto.
-Te creo, te creo.- dijo Marinette soltando una pequeña risa ante mi anécdota. En realidad yo era un chico muy hablador cuando se me llegaba a conocer bien, aunque para ser honesto jamás creí que pudiese llegar a abrirme tanto con Marinette.
- ¿No es increíble que la profesora nos hubiera dejado para una semana una tarea de solo un día?.- dijo mientras ponía nuestros nombres al final del trabajo ya terminado.- aunque claro, tengo que admitir que también somos un gran equipo, ¿no crees?.
- Por supuesto.- dije con una pequeña sonrisa mientras agachaba la cabeza- Marinette, a cerca de eso yo... Bueno pues me preguntaba si tal vez pudiésemos, no sé hacer algo.
- ¿A qué te refieres?.- preguntó mientras ponía sus libros dentro de su mochila.
- Bueno, tú sabes... podríamos salir a tomar algo algún día.- Dije posando mi mirada sobre ella, haciendo que ella soltara una pequeña risa nerviosa, que me hizo creer que la idea de ella y yo saliendo le parecía un buen chiste.
- Perdón, perdón.- dijo al percatarse de su error- no quería hacer eso, es solo que nunca me has parecido el tipo de chico que "sale a tomar algo", pero creo que es una excelente idea.- dijo sonriéndome.
-No suelo hacerlo en realidad.- dije algo avergonzado- pero bueno tú sabes, cuando alguien te gust...- mencioné entrecortado antes de crear un momento algo incómodo.- lo siento, lo que quiero decir es tú sabes... bueno...
En ese momento, (afortunadamente) la televisión subió drásticamente de volumen mientras anunciaba un robo a mano armada del banco de París que estaba a unas cuadras de la escuela. Haciendo que Marinette se levantara de prisa de su asiento en dirección a afuera.

- Yo esto... Acabo de recordar que debía ayudar a papá con unos encargos a domicilio.- dijo Marinette desde la puerta- volveré pronto.

Y antes de que pudiese contestar ella se había ido. En cuanto me quedé solo empecé a mecerme sobre mi silla de forma que accidentalmente encendí el computador de Marinette abriendo su carpeta de fotos en las que todas eran de Adrien Agreste.

- No puede ser...- susurré mientras las observaba fijamente sin poder creerlo, alejándome del aparato mientras trataba de olvidar lo que había visto.- ¿a Marinette le gusta Adrien?, ¡no puede ser verdad!.- en ese momento poco a poco las lágrimas empezaron a rodar por mis mejillas hasta llegar a mi camisa. Entonces sentí como algo pequeño como un insecto se posaba sobre una pulsera que llevaba puesta.

- Oh, un corazón roto.- dijo una voz malévola en mi cabeza- un dolor lo suficientemente duro como para corromper a cualquiera. Yo podría quitarte ese dolor, tienes suerte de que crea en las segundas oportunidades, si no mal recuerdo has sido el chico que más cerca ha estado de darme los miraculous, acorralaste muy bien a Ladybug y Chat Noir esa vez. Pero en esta ocasión no puedes fallar, ¿lo entiendes?.
- No lo haré.- dije mientras sentía como una fuerza poderosa recorría todo mi cuerpo hasta consumirme totalmente.

*Marinette*

En el momento que dejé la habitación me sentí mal por abandonar a Nathaniel, aunque el estar con él platicando de esa manera también me había parecido algo incómodo, hasta llegué a ponerme algo nerviosa...

-¡Marinette!, tenemos que apresurarnos.- dijo Tikki desde mi bolso.
-Tienes razón, ¡Tikki transfórmame! .- exclamé recordando que tenía que alcanzar a Chat Noir, saqué mi yoyo y me abalancé sobre los edificios hasta llegar al banco donde Chat entraba en acción al mismo tiempo que yo.

-My lady, pero que gran coincidencia.- dijo Chat en tono seductor.
- Ahora no gatito, primero hay que acabar con este par.-dije dirigiendo la mirada hacia los ladrones que trataban de escapar por la parte trasera del edificio.
- Parece que jamás aprenden, ¿no es así?.- dijo tomándome por la cintura mientras hacía crecer su tubo metálico para llegar con los maleantes desde arriba. Pronto usé mi yoyo para atar a los ladrones desde atrás mientras Chat les quitaba las bolsas de dinero y las devolvía a la policía. Justo en el momento en el que pensaba irme para volver con Nath antes de que pudiese sospechar Chat me tomó de la mano acercándome a él mientras su cola se posaba a mi alrededor sin dejarme separar de él.

- Espera my lady.- dijo mirándome fijamente a los ojos- aún me queda un pequeño asunto que tratar contigo.
-¿Se podría saber cuál es ese asunto?.- dije desafiante mientras ponía todo mi esfuerzo en no sonrojarme por nuestra cercanía.
- En el hecho de que my lady me haya ocultado que era Mar... ¡Cuidado!.- dijo al tiempo que me rodeó con sus brazos tirándome al suelo de forma que rodamos unos cuantos metros, salvándonos por poco de un misil que iba en nuestra dirección.

-¿Pero qué dem...?- pregunté mientras volteaba en la dirección en la que había salido eso, sin embargo cuando me levanté no había nadie más de Chat y yo.
- ¿Qué ha sido eso?.- preguntó Chat sacudiendose el polvo del traje.
- Tengo un mal presentimiento.- dije sin saber por qué, pero estaba completamente segura de que había un akuma suelto, y no sería fácil de atrapar...
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Bueno pues he aquí el capítulo 3, solo quería saber si de casualidad alguien sabía cuál era el apellido de Nathaniel, lo podrían dejar en los comentarios. Eso es todo. Chao! ❤️