Solo una Marinette (Adrien vs Nathaniel)

Capitulo 9. "La ventaja de Chat Noir"

*Marinette*

Habían pasado ya dos días desde mi "cita" con Adrien. Desde entonces Nathaniel había estado conmigo en todo momento, desde el receso, durante las clases y hasta acompañarme a casa después de la escuela. Gracias a él mi mente se encontraba despejada y podía casi olvidar el suceso de aquél día.

- Sigo sin creer del todo el hecho de que Adrien se comportara así sin ninguna razón.- dijo Alya en clase cuando le expliqué lo sucedido.- sé que él creció con Chloe, pero vamos Marinette, ambas sabemos que él no es para nada como ella.-

- En verdad no quiero hablar de eso Alya, solo puedo decir que me alegra que Nathaniel estuviese ahí para mí.- susurré para no llamar la atención de la profesora.

- A eso quiero llegar. ¿No te parece curioso que siendo Nathaniel la persona menos sociable del planeta estuviese convenientemente en un callejón oscuro en plena lluvia en el mismo momento que tú?.- cuestionó.

-¿A qué te refieres exactamente?.- pregunté

- Yo solo digo lo que pienso. Si no conociera lo inocente que es Nathaniel podría incluso decir que...-

- ¡Alya!.- dijo la profesora de química.- sí hay algo que desees compartir con la clase te agradecería que lo dijeras.-

- L-lo lamento profesora, no volverá a pasar.- le contestó Alya ligeramente avergonzada.

Después de eso pasé un tiempo reflexionando sobre lo que Alya había dicho. Si bien eran buenos sus fundamentos para sospechar que la aparición repentina de Nathaniel era algo poco común, eso se desviaba completamente del tema principal. Definitivamente no tenía nada que ver el comportamiento de Adrien con mi encuentro con Nathaniel.

Sin embargo tenía que admitir que en los últimos días antes del beso Adrien se había comportado mucho más cercano y amable de lo normal conmigo, lo que hacía mucho más complicado el comprender su actitud de aquella tarde.

Pero ya no había vuelta atrás, yo ya tenía a Adrien completamente fuera de mis pensamientos. Me limitaba a dirigirle una mirada asesina cada vez que se atrevía a voltear en mi dirección, pues después de todo él no me había si quiera dirigido la palabra desde entonces, lo que para mí era mejor que nada.

Al sonar el timbre de salida Nathaniel corrió en mi dirección, pero al tratar de saludarme como usualmente lo hacía pude notar cómo se inclinó hacia a adelante en un signo de dolor.

- ¿Te encuentras bien?.- pregunté poniendo una mano sobre su hombro.

- Si, yo solo... Necesito un momento.- dijo alejándose en dirección a la parte trasera de la escuela para dejarme sola.

*Nathaniel*

En cuanto estuve fuera de la vista de Marinette pude escuchar la voz de Papillon en mi cabeza.

- Sé que dije que dispondrías de más tiempo de lo normal, ¡pero esto se está volviendo ridículo!. Yo solo te veo juguetear con los poderes que te he otorgado sin si quiera intentar conseguir los miraculous. Me parece que que cometí un error contigo...-

-¡Te equivocas!, todo forma parte de mi plan.- dije tratando de mantener la compostura.

- ¡Usar tu poder para conquistar el corazón de una chica no me parece exactamente un plan!.- dijo Papillon enfurecido.- deberás explicarme exactamente qué pretendes, o si no...

Tras esas palabras empecé a sentir como mis pulmones se quedaron sin oxígeno de golpe, mientras mis energías decaían y subían lentamente, como un foco parpadeando a punto de descomponerse.

- ¡Espera!.- dije tomando mi garganta mientras usaba el poco oxígeno que me quedaba para hablar.- ¡Marinette es Ladybug!.- grité mientras después de un breve silencio sentí como mis energías se recobraban lentamente.

-¿Qué has dicho?- preguntó Papillon perplejo.

- Te lo explicaré todo. Pero antes déjame hacer una pequeña cosa...- dije sacando mi tableta para hacer un dibujo.

*Adrien*

Al acercarme a la puerta de la escuela para tomar mi limosina logré ver a Marinette completamente sola, cosa rara tomando en cuenta que Nathaniel no se había alejado de ella desde que me obligó a no volver a hablarle.
Casi sin querer un repentino impulso de correr hacia ella y explicarle todo me pasó por la mente, como si algo o alguien me obligara a hacerlo, sin embargo sacudí mi cabeza tratando de entrar en razón. Sabía que debía mantenerme alejado de ella por nuestra seguridad, su seguridad...

Antes de poder reflexionar un poco más, logré visualizar como su mirada se posó alarmada detrás mío antes de tomar su bolso y correr hacia la cabina de teléfono más cercana. A primera vista no entendí la razón de su reacción hasta que desvíe la mirada hacia mis espaldas viendo como ligera pero amenazantemente la punta de la Torre Eiffel empezaba a ser rodeada con llamas color morado que amenazaban con quemarla por completo.
En ese momento corrí en dirección a los contenedores de basura al costado de la escuela mientras sacudía mi bolso para despertar a un somnoliento Plagg.

- ¡Plagg, transfórmame!.- dije con la alegría de tener una pequeña distracción de mis problemas un rato.

Una vez con el traje tomé mi bastón estirándolo con agilidad sobre los edificios de París hasta llegar a la base de la Torre Eiffel donde una voz familiar me llamó a la lejanía.

- ¿Me extrañaste gatito?.- dijo sarcástica Ladybug mientras jugueteaba ligeramente con su yoyo.

- Ni que lo digas My Lady.- dije con un ligero brillo coqueto en los ojos.

- Tendremos que dejar el lindo reencuentro para después gato tonto, primero debemos solucionar un pequeño asunto arriba. Algo me dice que esto es obra de nuestro escurridizo akuma.- dijo apuntando con su yoyo hacia arriba.

- Permíteme My Lady.- dije tomándola de la cintura y haciendo alargar a mi bastón para llegar a la zona del fuego a pesar de las protestas de Ladybug para que la dejara subir sola.

Una vez arriba ambos buscamos sin siquiera pensarlo el origen de la llamas sin éxito alguno.

- Hay que actuar rápido Chat.- dijo Ladybug mientras tomaba con fuerza su yoyo.- ¡Lucky charm!

- Creo que eso serviría si fueran velas de cumpleaños.- dije con una mano en la cintura mientras miraba algo decepcionado un pequeño ventilador (como de juguete) que había aparecido tras las palabras de Ladybug .

- No lo entiendo...- dijo Ladybug accionando el pequeño botón mientras veíamos con sorpresa como las llamas se iban rápidamente dispersando como humo hasta extinguirse totalmente.

- My Lady, solo conozco a un akuma cuyas ilusiones se dispersen como humo.- dije mirando hacia la intacta torre Eiffel.

- Y no te equivocas.- dijo una voz familiar detrás de nosotros... Volphina. - ¿acaso no me extrañaron?.- sonrió maliciosamente.

- Pero Lila volvió a Italia hace dos meses...- gritó Ladybug.- ¿quién eres tú?.-

- Véanme aquí a las 11.- fué lo único que dijo antes de tocar su flauta y desaparecer en una nube de humo.

Pasaron unos minutos de silencio antes de que Ladybug comenzara a pronunciar teorías y a planear lo que haríamos esa noche. Pero sinceramente en lo único que podía pensar era en que podría estar esa noche con My Lady aunque fuese con el traje.
Já, ¡punto para Chat!

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Sé que tardé mucho en subir capítulo pero... ¡Miren un pajarito! *huye*