Capítulo 7 - ANGUSTIA

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No se cuanto tiempo pasó pero seguía sintiendo esa presión en el pecho, me sentía confundido, cerraba los ojos y veía una y otra vez en mi mente aquel cuerpo cayendo en el viejo aljibe iluminado por la luz de la luna, pero supongo que por el tiempo el resto de mis recuerdos eran vagos, si confusos, como si tuviera una amnesia postraumatica, cuanto más intentaba recordar aquella noche más preguntas se venían a mi mente. ¡Riiiing! ¡Riiiing!... ¡Riiiing! El timbre me sobresaltó miré hacia el frente y vi que Romina iba a golpear la puerta cuando se dio cuenta que ya la había visto y se detuvo, ¡Trrrrrrr! ¡Claccc!

Romina: Hola David, almuerzo listo, tardé un poco pero ¿qué te parece estas milanesas con puré de papa y mayonesa? y de postre mandarinas y peras.

Yo: Almuerzo, son las 15:30, cuando hice el comentario me di cuenta que no había sido muy afortunado y Romina me lo hizo saber mirándome fijamente y seguramente conteniendo sus palabras ya que siempre ha sido muy medida y no es de decir nada sin pensarlo un par de veces. Perdón amor, no es un reproche es que no me siento bien.

Romina: ¿No te sientes bien? ¿Qué sucede David?

Yo: No te preocupes no lo sé, vino un Doctor a pedir un presupuesto con una niña y casi se cae, creo que eso me angustió un poco. << Dios no recuerdo haberle mentido nunca a Romina ¿qué estoy haciendo?>>

Romina: A pobre niña pero entonces ¿no se golpeó?

Yo: No está bien, voy a armar los presupuestos que me pidió. Me levanté del escritorio para irme al taller y evitar más conversación "necesitaba estar solo".

Romina: David... ¿no vas a almorzar?

Yo: No perdón no tengo apetito, y sin más palabras comencé a subir la escalera de caracol, cuando daba la primera vuelta de la escalera pude ver a Romina que me miraba extrañada aún con la vianda de la comida en la mano. Me detuve un instante y con una sonrisa fingida le dije, perdón, gracias por prepararme el almuerzo mejor lo dejo para la noche, bajó su brazo con la vianda y la apoyó en el escritorio como resignada sin decir nada. Continué subiendo lentamente hasta llegar al taller.

Me senté en la silla frente a la computadora en el banco de trabajo contra la pared, puse mi cabeza entre mis manos y cerré los ojos, respiraba agitado, no podía terminar mis pensamientos, cuando estaba pensando en algo ya me venía otra cosa a la mente, mi cabeza volaba de un lado a otro, ¿qué estoy haciendo? ¿Por qué miento? ¿Qué voy a hacer? ¿Qué pasó aquella noche en Sayago? Sentí una fuerte puntada en el hombro como si me clavaran una aguja que me dobló y me trajo a la realidad, tenía que detenerme y pensar con más tranquilidad. Lo mejor será hacer los presupuestos para distraerme, entré a internet y escribí la URL de DistriHard una de las distribuidoras a la que compraba habitualmente para ver computadoras y precios, en algún momento no se cuando vi que el cursor parpadeaba pidiendo el usuario y mis manos habían dejado de escribir, estaba paralizado, otra vez en mi mente aparecían preguntas, miré la pantalla y no tenía ganas de seguir, tomé el mouse y moviéndolo lentamente cerré el navegador, volví a cerrar mis ojos y me apoyé nuevamente en mis manos, ¿qué habrá pasado con la casa de Sayago? ¿estará aún? ¿Estará el viejo aljibe? ¿y si descubrieron el cuerpo? me podrían estar buscando, sentí los pasos de Romina subiendo la escalera y alcé la cabeza.

Romina: David ¿cómo estás?

Yo: Bien, bien, buscando precios.

Romina: Vi que retiraron la Tablet de Ana Ferré, dejaste el dinero sobre el escritorio, ¡no lo guardaste!

Yo: Si perdón, pero estoy bien quédate tranquila.

Romina: Ok bajo.

Increíblemente esta visita de Romina me distrajo unos segundos ¿Quería saber? ¿Necesitaba respuestas? Una primer idea llegó a ponerme a trabajar nuevamente en la computadora y no era para buscar precios, abrí nuevamente el navegador y escribí "googlemaps.com" y di enter, en cuanto apareció el mapa de Montevideo di 3 clic para acercar la vista y comencé a desplazarme buscando Sayago, en tres clic más ya estaba en José Caparroz y Bell, cambie el Plano a la vista de Satélite, intenté acercarme más pero la vista se puso tan borrosa que no podía ver bien el lugar y sentí un gran fastidio, seguí buscando y todas las vistas satelitales que encontré usaban Google así que el resultado fue el mismo.

Oí bajar el montacargas, eso significaba que Romina me iba a mandar algo, no me di cuenta del tiempo y eran las 18:20, cerré todo lo que tenía abierto y regresé a la página del proveedor para hacer los presupuestos, me sentía un poco más tranquilo ingresé mi usuario que era mi dirección de correo electrónico "david222@hardfix.com.uy" y la contraseña "lcsdc222" mientras ingresaba en el sitio llegó por el montacargas una PC, la saqué y la puse en la mesa de trabajo central, estaba de muy mal humor y que me traigan una PC sucia era una de las cosas que más me molestaba, nunca pude entender ¿por qué la gente no se da cuenta de la molestia que causa la suciedad? Así que generalmente aunque me digan que soy histérico lo primero que hago en estos casos es darle una lavada por lo menos en el exterior.

Me di vuelta y vi que la página del proveedor ya estaba abierta y fui al acceso de "PC, Notebooks y Talbets" y entré en "Nuevos".

"Tuuuuuu" "Tuuuuuu" Sonó el intercomunicador y conteste, sí Romina.

Romina: Tengo en línea al Doctor Castro de Sayago pregunta si ya están los presupuestos.

Yo: ...

Romina: David ¿me escuchas?

Yo: Si, dile que me disculpe que aun no los terminé que se los envío en unos minutos y lo llamamos para avisarle, gracias.

Romina: Ok.

Otra vez Sayago, volví a perder la tranquilidad, sentía mucho calor y estaba transpirando, dejé la PC en la mesa y me senté nuevamente frente a la computadora, haciendo un esfuerzo para concentrarme tomé dos propuestas de notebook y las pasé al procesador de textos, las modifiqué y agregué los datos de nuestra empresa, información sobre Stock y garantía, agregué nuestra ganancia y los envié al correo, mafeba335@rasmu.com, tomé el intercomunicador y le pedí a Romina que le avisara al cliente que ya se habían mandado los presupuestos.

Eran más de las 19 hs. y estaba comenzando a oscurecer, me quedé en penumbras, no había avanzado nada seguían las mismas preguntas, ¿qué habrá pasado con la casa de Sayago ¿estará aún? ¿Estará el viejo aljibe? ... Tengo que hacer algo, necesito "SABER LA VERDAD".

LA VERDAD TARDÍADonde viven las historias. Descúbrelo ahora