Tras aquella conversación todo se solucionó, obviamente ninguno de los dos olvidamos lo que había pasado aquella vez pero de algún modo sirvió para estar más unidos.
Cuando llegamos a casa descansé un poco y luego fui al ático, todo había cambiado bastante desde la última vez que lo visité ya que Alejandro había podido comprar algunas cosas con su propio dinero y ahora había más utensilios de pintura bastante modernos aunque lo que más destacaba era un caballete que descansaba junto a la única ventana de la habitación.- Lo compré hace unos días -dijo al ver que mi atención se centraba en aquello-.
- Parece caro.
- Lo es, pero me hace sentir bien el hecho de haberlo pagado de mi propio bolsillo.
- Que bien...
- Bueno... ¿Que quieres hacer?
- ¿Eh?
- Me gustaría pasar el rato contigo... Pensé en llevarte al teatro pero... Me gustaría de tener un poco de privacidad contigo.
- Sí... Sera lo mejor...
- Vamos -dijo dando golpecitos en la cama para invitarme a que tomara asiento- sientate.
- Sí...
- Elliot... Hay algo que quiero saber...
- ¿Eh?
- ¿No te molesta... Que me gusten los hombres?
- Oh... No... No diría que me molesta aunque no consigo entenderlo del todo.
- A veces eso es suficiente para alejarse de mí... Pero tu no lo has hecho...
- Sí que lo hice...
- Pero no fue por mis gustos sexuales ¿Verdad? Tu solo estabas asustado y confuso por lo que hice.
- Sí... Bueno...
- Por eso... Agradezco que seas tan bueno conmigo.
- Debería decir lo mismo...
Tras aquello se hizo un silencio entre nosotros, no porque no supiéramos que decir sino porque era mejor no decir nada. Yo me incliné hacia un lado apoyándome en el hombro derecho de Alejandro, él apartó su brazo y lo usó para rodear mi cuerpo con él.
- Me gusta que hagas eso...
- ¿hmm?
- Que me abraces... Me recuerda a cuando éramos pequeños...
- Te abrazaré todo lo que quieras.
- Gracias... Y... Oye...
- ¿Pasa algo?
- ¿Como supiste que... estabas enamorado de mí?
- Fue facil... Lo supe en cuanto mi cuerpo empezó a reaccionar a tí.
- ¿Eh?
- Dejando al margen la parte sexual... Es facil -dijo tomando mi mano y posándola en su pecho- ¿Notas mi pulso?
- S-sí... Va... Muy rápido.
- Esto es lo que pasa cuando estás cerca, mi corazón se vuelve loco por tí...
- ...
- ¿Elliot?
- ¿Y... Eso ocurre siempre?
- Siempre que estás cerca.
- Y si eso me ocurriera... ¿Significa que estaría enamorado de tí?
- No se que decirte Elliot... No se como funciona tu corazón.
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La Ciudad De La Luz (GAY)
Romance1887: Elliot es un joven francés, hijo menor de una familia de la alta burguesía parisina. Su familia está llena de triunfadores y de gente increíble pero él no consigue encontrar su vocación en la vida. Por suerte siempre tuvo a su lado a su amigo...