Parte 11. "Estoy bien"

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Mis padres me han preguntado como me encuentro, me dijeron que me han visto diferente, les dije que estaba bien, nos tuvimos mucho tiempo para platicar, pero me encargue de que no estuvieran preocupados por mi.
Sinceramente me siento demasiado extraña, no se lo que me pasa, últimamente me he sentido demasiado triste. Me encuentro en mi cuarto con una navaja en mi mano, no se exactamente que es lo que me sucede, si hace unas semanas me encontraba bien, levanto mi brazo izquierdo y alzo mi manga, pongo la cuchilla lentamente en mi muñeca, y sin pensarlo, la deslizo, mi corazón late rápidamente, y mi panza empieza a revolverse, mientras veo correr la sangre lentamente, Bill tenia razón, esto es increíble.
Cuando paso la cuchilla sobre mi muñeca sucede algo extraño, me alejo del mundo, solo soy yo y mis cuchillas, no se si esto esta bien o esta mal, solo se que me gusta hacerlo. Limpio la sangre con un pedazo de papel, y guardo en mi mochila la cuchilla, me acuesto y me quedo dormida.
Al día siguiente me alisto para ir al colegio, me pongo una blusa manga larga, como siempre, me voy al colegio, y decido saltarme la primera hora, me encuentro sentada sola, atrás de la cafetería, Cecilia se me acerca.
-Hola
-Hola -Logro sonreír-
-¿Por que no has entrado a clases Mónica?
-¿Por que no lo has hecho tu?
Ambas empezamos a reír, y Cecilia me cuenta que no se ha sentido bien.
-Me duele un poco la cabeza no se que me sucede. ¿Tu como estas Mónica?
-bien
-¿Segura?
-logro asentir con la cabeza- y después de un rato Cecilia se marcha.
No estoy acostumbrada a mentir, pero no quiero que sepan que me encuentro mal.
Me aproximo al baño, y como es primera hora, esta vacío, me meto a uno, y me siento en el escusado, de mi mochila saco mi navaja, y la observo detenidamente, mientras lágrimas caen de mis ojos, levanto mi manga, y puedo ver las heridas, solo son unas pequeñas rayas, con lágrimas en los ojos, paso la cuchilla a un lado de la herida de anoche y empieza a sangrar, eso es lo mas increíble, sigo llorando, mientras limpio la sangre y guardo mi cuchilla, salgo del baño y me miro al espejo, entonces lágrimas empiezan a salir aun con mas fuerza, no se lo que esta pasando conmigo. En realidad no lo se...

la chica de los cortesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora