#04

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Me desperté sudando en seco, normalmente esto pasa después de una pesadilla, mis piernas me empezaron a temblar, (con suerte son las 6am, mano no hay peo) pensé pero estaba muy equivocada, miré hacia el reloj y... Oh coño, no dormí un carajo, son las 1am todavía, me levanté para abrir la puerta y terminé cayéndome me mordí el labio para no gritar.













-Oh dios, Ana, te encuentras bien?- preguntó Niall alarmado mientras entraba al cuarto.











Yo no dejaba de temblar, parecía una hoja de papel, literalmente marico, él ayudó a levantarme del piso y me llevo hacia la cama.









-No, no lo estoy- susurré y me puse a llorar, cubrí mi cara con mis manos y empecé a hipear.



-Hay algo que pueda hacer para ayudarte?- preguntó mientras quitaba una mano de mi cara.



-Podrías sostener mis manos? Por favor?- pregunté y él lo hizo sin chistar, suspire.














Hubo un momento de silencio en dónde él solo se puso a acariciar mis manos mientras me daba una que otra mirada, tengo que decirle esto que me carcome la cabeza cada vez que conozco a alguien y me quiero ganar su confianza.











-Niall- lo llamé, levantó la mirada hacia mí -Hay algo que te tengo que confesar.



-Puedes decirme- sonrió -Tranquila, guardaré tu secreto.



-Okay- suspiré -Sufro de ansiedad y ataques nerviosos, se que no es la gran cosa pero es algo con lo que lidio todos los días de mi vida y no es fácil no saber hacer una puta decisión por culpa de la ansiedad- cubrí mi cara nuevamente.



-Desde cuando tienes ansiedad?- preguntó con curiosidad.



-Desde casi un año y medio- dije y pude ver como se levantaba de la cama -No, no me dejes sola, quédate, por favor- susurré.



-Quién dijo que te iba a dejar sola?- sonreí tímidamente -Dame un puesto- dijo y levanté el edredón un poco para podernos cubrir -Acercate un poco.









Dicho esto me fui acercando un poco hacia él y él terminó de acortar la distancia que separaban nuestros cuerpos.














-No tengas miedo- pasó un brazo sobre mis hombros para hacerme sentir cómoda -Necesitas que te dé un abrazo?- preguntó y asentí, posó sus manos en mi cintura pegándome aún más hacia él. Dios, se siente tan bien pero está muy mal.











Pasé mis manos por su espalda y él, aprovechando esto, pasó sus pulgares por mis mejillas secando el rastro de las lágrimas. Estuvimos un rato en silencio, pero no era un silencio incómodo, no, al contrario, era un silencio muy cómodo a decir verdad.










Mano no será que me está gustando la guachafita? No puede ser, Ricardo no me va a creer, me está empezando a gustar Niall, que peo nojoda, yo siempre metía en peo.














-A eso se refería Andrew- dijo y fruncí el ceño.

-Qué coño te dijo Andrew?- pregunté y él negó.


-Él me había comentado de que tenías algo, pero no me lo dijo- sonrió -Dijo que debía averiguarlo por mi cuenta.


-Sí, a eso es que se refería- dije y él sólo me sonrió (es tan bonito) marica pero que habláis? Controlate. -No mucha gente sabe que tengo ansiedad así que cuando tengo un colapso me miran extraño y se alejan, ya eso se ha vuelto normal en este año- alcé los hombros.



-Oh, entiendo- hizo una pausa -Tu secreto está a salvo conmigo, no tengas problema con eso y si llegas a necesitar ayuda, yo te la puedo dar- dijo y sonrió.


-Gracias- sonreí -Lo agradezco mucho.













Poco a poco nos quedamos dormidos, sí, dormimos juntos, terminé durmiendo sobre él, jeje. Como a eso de las 3am escuché un ruido que venía de la planta baja.












-Niall, despierta- lo moví y casi se cae de la cama -Creo que llego alguien, coño e su madre- y tan dicho como hecho, se escuchaba pisadas en las escaleras.



-Ana, estás despierta?- no puede ser, es Nicole.



-Escondete en el baño, verga- susurré y Niall fue hacia el baño y cerró la puerta, me acosté en la cama pa hacerme la dormida.









A quién coño se le ocurre llegar a una casa a las 3 de la mañana? Qué me expliquen por que yo no entiendo nada mialma.









-Ana, cómo estás?- entró al cuarto, la miré mal, normalmente ella no es "amable" conmigo.



-Bien- hice una pausa -No se supone que deberías estar en New York?


-Sí, pero vine solo un día- dijo y se estaba acercando a la puerta del baño.







CHONCE panic.










-Um, me voy a dormir, adiós- dijo y cerró la puerta, esperé a que se fuera como tal.



-Niall, salí- dije y el susodicho salió del baño -Mierda, casi nos descubre, maldita sea.


-En qué estábamos? Ah, sí- sonrió y me abrazó, empezó a caminar causando que terminaramos en la cama.


-Te odio- dije y sonrió.










No seas mentirosa, no lo odias te estás MURIENDO por que te robe un beso, tas'clara.

No, thanks.

























aquí tienen bbs.

Guardaespaldas De Una Venezolana. »NH Donde viven las historias. Descúbrelo ahora