¿Pain?

6

¡Holis! ¡Nuevo capitulo!

Esta vez con Stancest para la banda con algunos cambios, ya lo verán... bueno, a leer.

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Stan ya no tenía voz, ya sólo hacía gestos faciales y abría la boca sin producir ningún sonido. Ford forma de hacerle el amor -porque a pesar de lo salvaje, había amor de por medio- era una forma de agradecerle y disculparse.

Aunque esos agradecimientos y disculpas le gustarían más si no estuviera en cuatro, la cara contra la almohada e hiper cansado a punto de desmallarse... Pero le gustaba.

- Stan, voy a correrme.

- Te mato si lo haces en mi espalda, que lo sepas...- le respondió en un largo gemido, Ford le beso la espalda- yo también voy a correrme.

El científico* rió sin pensarlo por el reclamo de su hermano, habían aprovechado la salida de los niños para hacerlo y ya era la segunda vez que lo hacían. Las dos veces muy salvajes, muy para el pesar de Stan.

Ford agarro con delicadeza el miembro de su hermano, comenzando a masturbarlo lentamente en comparación a lo rápido de las embestidas.

Y ambos se vinieron por segunda vez, juntos y de manera brutal. Stanley creía ver estrellitas y casi no podía abrir los ojos, además de que no veía porque se le habían caído los anteojos. Stanford, en cambio, aún seguía con sus anteojos y no podía dejar de respirar agitado.

- Te amo, seis dedos... - le dijo el gemelo menor cuando se dio la vuelta, el mayor aun seguía sobre él y quedaron enfrentados - pero es un bruto, nerd.

- Yo también te amo.

Se besaron con tranquilidad, transmitiéndose su amor y cariño por el otro.

Si, quizás estaba mal... Pero, para Stan, esta no era la peor de las cosas malas que hizo o haga. Además, para el amor no hay barreras.

- Abra que cambiar las sábanas, amor.

- ¿Cómo me llamaste?- Ford le preguntó sorprendido, Stan no le había llamado así desde que habían vuelto a estar juntos ni en un momento muy alocado.

- Iré a cambiarme, antes de que lleguen esos tres- le respondió evadiéndolo.

- Repítelo.

- ¿Amor hay que cambiar las sabanas? Creo que la edad ya comienza a afectarte- comenzó a reírse, lo cual ocasiono que su hermano lo mirara con enojo obviamente fingido para luego acercarse dejando su rostro a escasos centímetros del rostro del otro.

Recibió un beso largo pero que no llegó a profundizarse, siendo sólo un roce que lleno a ambos de una sensación cálida.

Aún en una relación de años, que tuvo sus altos y sus bajos e idas y vueltas, pueden descubrirse cosas nuevas de vez en cuando.

¿Cómo empezó su relación?

Todo había comenzado cuando tenían dieciséis, en uno de esos días en que se ocupaban de su barco.

Ford estaba arreglando alguna cosa y Stan estaba limpiando mientras se quejaba de algo pero casi no se lo escuchaba.

- ¿Y ahora qué pasó?- le preguntó Ford mientras veía como su hermano soltaba el trapo que estaba usando y miraba refunfuñando al piso- ¿algún problema con alguna chica?