La arpía y el tritón ➳ Larry AU ✔️

Capítulo 18.

—Harry Edward Styles ¿Qué haces aquí? —Grita su madre mientras corre rápidamente hacia donde Harry y Louis están sentados—. ¡Sabes que está prohibido estar aquí!

Louis no sabe qué hacer. ¿Debería volar lejos? Tiene miedo de que la madre de Harry esté asustada y horrorizada de que Harry sea amigo de una arpía. Harry se ve aterrado y un poco enojado, y sostiene la mano de Louis tan fuerte como puede. Dejarlo solo aquí no es una opción.

—Harry, qué... —Su madre se detiene a mitad de la frase cuando mira directamente a Louis y luego a sus manos entrelazadas. Louis quiere mirar hacia otro lado, pero no puede. Ella no lo está mirando con miedo, y mejor aún, lo mira sin señales de disgusto, lo que Louis asume que sería el caso con la mayoría de las sirenas que no están acostumbradas a estar con otras criaturas.

—Mamá, Gemma, ¿q-qué está pasando? —Harry finalmente se las arregla para preguntar con voz temblorosa. Su madre dirige sus ojos hacia su hijo ante el sonido de su voz.

—Harry, si tu padre supiera que tú...

—¡N-no! Mamá, ¿qué está pasando? Tu... Tu... ¿Dónde está tu cola? ¿Dónde está la de Gems? Estoy-estoy tan confundido... ¿Qué? —Pregunta Harry torpemente una vez más.

—Mamá, sólo dícelo ya. Tiene la edad suficiente como para saberlo de todos modos. —Dice Gemma detrás de su madre.

Harry levanta la vista hacia ella y luego otra vez hacia su madre—. ¿D-de qué está hablando Gemma? ¿Saber qué?

Anne cierra sus ojos y respira profundamente, exhalando un par de segundos después. Sosteniendo su sien, se arrodilla frente a Harry—. Bebé, vamos a casa, tu padre y yo te explicaremos todo...

—¡No! ¡Me siento herido y confundido y quiero respuestas en este momento! ¿Qué está pasando? —Grita Harry.

—Hazza, cálmate. Sólo respira, ¿de acuerdo? —Louis susurra suavemente detrás de él.

Esto hace que Anne mire hacia él de nuevo, con ojos perplejos. Ella lo mira un poco, haciendo que Louis se sienta muy incómodo e inquieto.

—Yo-yo te conozco. —Dice Anne abriendo sus ojos como platos—. Tú eres el hijo de Jay. —Dice finalmente.

Louis se levanta tan rápido que se sorprende de que su columna vertebral no se haya desprendido ante el movimiento repentino.

—¿M-mamá? —Harry tartamudea, lágrimas amenazando con caer por sus mejillas.

—R-reconozco esos ojos en cualquier parte. Son los mismos de Jay.

—¿Qué? —Tanto Louis como Harry preguntan simultáneamente en estado de ¿shock? ¿sorpresa? O tal vez incredulidad.

—¿Cómo... Qué? ¿Cómo c-conoces a mi madre? —Pregunta Louis desesperadamente.

—¿Mamá, de qué está hablando la arpía? —Gemma cuestiona también.

Anne mira hacia los seis pares de ojos que la miran expectantes, y con un largo suspiro derrotado, ella comienza.

—Fue cuando Gemma tenía alrededor de cuatro años, y yo recién había quedado embarazada con Harry. Yo... Nosotros... Hubo un tiempo en que la familia de su padre y yo tuvimos problemas. —Dice Anne con cautela—. Ellos no estaban demasiado entusiasmados con la idea de que el futuro rey del océano tuviera un hijo fuera del matrimonio con una Oceánida, sobre todo cuando él estaba comprometido con otra sirena. —Explica Anne.

—¿Tú no le agradabas al abuelo y a la abuela? —Pregunta Harry muy horrorizado y sorprendido.

—¿Mi padre estaba comprometido con otra persona? —Pregunta Gemma, muy sorprendida por la noticia.