Flor de Otoño

Capítulo 24:

Al fín, después de tantas cosas que habían sucedido, estaba de vuelta en casa. El señor que hacía guardia en el edificio solo vio que un joven extraño me llevaba cargado en sus brazos, así que tuvo que detenerlo.

-Disculpe, ¿Quién es usted? ¿O viene de parte de quién?-

-Necesito subir apartamento 69, el de August...-

-Señor Sánchez, ¿No me dejará subir?- le dije en voz baja.

-¡Joven Stwart! ¿Qué le ha sucedido?-

-Nada impirtante, ¿Puedo subir?-

-¡Claro! ¡Está de más preguntar!-

-G..Gracias.-

Entonces Leon subió muy rapido las escaleras, era tan atletico. Hasta que finalmente llegamos a mi apartamento.

Me coloqué en pie y dije:

-G..Gracias por todo, en serio Leon.-

-No vuelvas a hacer ese tipo de cosas...-

-¿A qué te refieres?-

-No te vuelvas a poner en peligro de esa manera, por favor...'

-Tranquilo, fui muy debil, yo soy capaz de sostenerme en dos piernas. Créeme, se defenderme.-

-Y quiero que me dejes protegerte...- me dijo muy preocupado, luego se acercó a mí, tomó mis manos y me besó. No podía detenerlo, pero creo que era obvio que tampoco quería detenerlo.

-Me gustas, Shawn.-

-Tu también, y mucho.- alcancé a decirle mientras nos besabamos.

Él entró al apartamento, y yo cerré la puerta con seguro. Luego, puse mis brazos sobre sus hombros, y él me cargó agarrándose de mis muslos. De esta manera me llevó a mi cuarto y me lanzó a mi cama. Cerró la puerta de mi habitación y se lanzó sobre mí.

Seguiamos besandonos, pero cada uno de estos ahora era cada vez más intenso.

-¿Lo haremos?- le pregunté.

-No lo sé, ¿Tu lo deseas?-

-E..Eso creo...-

-¿Estás seguro?-

-S..Si... ¡Si! ¡Hazlo!-

Entonces el se quitó muy rapido su playera y mentió sus manos por debajo de la camisa de mi uniforme.

-Creo que esto estorba.- me susurró.

Entonces me levantó la camisa rapidamente, dejandome solo en ropa interior, ya que me habían arrebatado el pantalón en la escuela.

Luego de eso, se desabrochó su pantalón y comenzó a hacer movimientos sexys entre mis piernas. Esto me excitó mucho, así que solté un suave grito de emoción. Él empezó a bajar su pantalón hasta que finalmente quedamos ambos en ropa interior. Él comenzó a besarme muy fuerte, luego empezó a besar mi abdomen dejando así un rastro suyo por todo mi cuerpo.

-¿Empiezo ya?- me preguntó.

-Lo antes posible.-

De esta manera, comenzó toda la acción.

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