Flor de Otoño

Capítulo 40:

-Vale, vamos...-

-Pero, ¿Por qué recordaste esa canción?-

-No lo sé, me hace tener en cuenta muchos detalles.-

-¿Cómo cuales?-

-Ninguno muy importante.- me dijo sonriendo.

Volvimos al café y tomamos nuevamente la motocicleta. Él condujo muy rápido por la calle sin decir una sola palabra.

-¿P..Pasa algo?- le pregunté.

-No, nada.-

-¿Seguro? Estás diferente desde el muelle...-

-No pasa nada.-

-Te quiero Leon.-

-Y yo a ti Shawn, por eso no quiero que esto algún día temine.-

Decidí no responderle e ignorar su comentario. Mi padre siempre me decía que "Todo como comienza, algún día acabará.", dandome como ejemplo su relación con mamá. Pensé inmediatamente en eso que él decía y por esa razón no le seguí hablando del tema con Leon.

Llegamos a un pequeño conjunto de casas que estaban una al lado de la otra. El abrió la cochera y colocó allí su motocicleta. Luego llegamos a la última casa de todo ese conjunto. Una casa con unas escaleras bastante altas y con pequeños jardines a los lados.

Sacó sus llaves y entramos, me quedé impactado por la gran organización de esa pequeña casa. Estaba todo muy bien distribuido y nada fuera de lugar. Alcancé a ver una foto de una pareja con dos niños, al parecer era Leon y su família. Decidí no preguntar sobre el asunto.

-¿Quieres algo de tomar?-

-Ehm... ¿Tienes té?-

-Si, enseguida preparo.-

-Tu casa es acogedora.-

-Procura no hacer mucho ruido, Bradley de seguro ya está durmiendo.-

-¿B..Bradley?-

-Si, es un cachorro de tres meses de nacido, un pequeño Labrador dorado.-

-Ah, vale.-

-Vamos, no te quedes ahí parado, sientate en algún sillón.-

-Vale...-

Me senté en un sillón, era muy cómodo, como si nunca hubieran sido utilizados. Luego me llevó el té a la mesa y colocó la dichosa canción en un viejo tocadiscos. Era un soul de 1.967, pero no alcancé a reconocer la voz del cantante. Tenía una melodía bastante suave constituida por sonidos de piano y algo de bajo en el fondo, con unas hermosas voces en el coro.

-Es buena, ¿Cierto?- me preguntó Leon.

-Si, tu casa es muy calida.-

-No, la canción.-

-Ah, lo siento. Si, es muy hermosa.-

-Me alegra que las cosas que me gusten sean de tu agrado también.-

-S..Si...-

-Quería enseñarte esto hace un par de días atrás.-

-Creo que ha valido la pena toda la espera.-

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