The beginning

Capítulo 16

N/A: No he tenido una buena semana ;) Gracias por seguir leyendo y comentando!

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-¿Qué te ocurre?

Castle levantó la vista de sus cereales, que lentamente y después de un rato mirando al vacío se habían reblandecido.

-¿mmm?

Martha se sentó frente a su hijo tras acariciar su pelo como cuando era pequeño y le miró enternecida.

Había escuchado a su hijo durante días encerrado en su habitación, mientras en lugar de escribir se hundía más en su miseria mientras escuchaba baladas de grupos de Rock para aumentar su pésimo estado de ánimo.

-Has llegado un punto en el que no eres capaz de escuchar Aerosmith… No queda helado en la nevera…

-Soy oficialmente una chica- suspiró mientras se levantaba y dejaba el plato de cereales en el fregadero.

-Richard, cariño…

Castle miró a su madre.

-¿Es por Meredith? ¿Estas intentando apoyarla con los cambios de humor y de hormonas?

Castle rió casi irónicamente y negó.

-¿Katherine entonces?

Ambos se quedaron en silencio.

-Y lo peor es que… ya no sé que hacer y mis ganas de escribir se han esfumado.

Martha le miró sin saber que decir. Realmente no entendía a su hijo. Estaban en una época en que podía criar a un hijo y estar con la mujer de su vida aunque ella no fuera la madre del bebé, sin embargo, su hijo quería torturarse con una relación que no le llevaría a ningún sitio mientras que la chica perfecta para él cruzaba medio mundo.

-¿Por qué no fuiste?

Castle decidió ignorar esa pregunta.

-Madre… la desilusioné. Lo hice aposta. Pensé que así ella se olvidaría de mí y tomaría la decisión correcta… Ella debe vivir su vida, debe… conocer mundo si es lo que quiere y no quedarse aquí sin saber que hacer y ayudándome a criar aun bebé que no es suyo.

Martha Rodgers sonrió tiernamente.

-Y lo conseguí. Conseguí que pensara que no me importara que cogiera ese avión y que viviera su vida.

-Richard, ella podía estar aquí y vivir su vida, ilusionarse con una relación contigo…

-Madre, voy a tener un bebé… Ella tiene veinte años. ¿Y si se hubiera quedado y luego se arrepintiera por perder años de estudio, o de sueños incumplidos? No soportaría que me lo echara en cara. Hice lo mejor para ella.

La actriz arrugó su frente e hizo una mueca. ¿Realmente todo aquello era lo mejor para Kate? ¿Y para Richard?

Terminó de pagar su helado y sonrió al dependiente. Salió de la heladería caminando con tranquilidad mientras disfrutaba de un paseo y de su helado de chocolate blanco. Se sentó en la escalinata de la catedral de San Andrés y sonrió mirando la impotente vista tras ella.

La catedral era preciosa de color blanco y tonos azules, con algunos detalles en dorado.

Adoraba esa ciudad. Adoraba su arquitectura. Su gente. El idioma. Adoraba empezar de nuevo sus estudios y poder hacerlo en una ciudad con una cultura diferente a la suya.

Llevaba semanas en Kiev y por suerte empezaba a dejar atrás la sensación que le producía el estar sola en una nueva ciudad y sobretodo empezaba a superar su relación o la ausencia de ella con Castle.