Caída libre /Yaoi/ [Finalizada]

Capítulo 16 "¿Estás enamorado?"

Después de reconciliarme con Luke había vuelto a sentirme relajado.

Pasaron dos días de aquel suceso.‭ ‬Me tranquilizaba saber que ahora todo estaba en su sitio ‬y ambos podíamos volver a nuestras vidas cotidianas.‭ ‬Por mi parte podía concentrarme en mis estudios y adelantar mucho trabajo que tenía pendiente desde hace tiempo.‭

Terminé de atender a dos chicos en busca de un juego de PlayStation antes de que me devolviera a mi asiento frente al mostrador. Teclee un par de cosas en la computadora y abrí mi Facebook revisando los próximos eventos que habría, justo en ese instante me di cuenta. Mañana era el cumpleaños de mi madre, lo había olvidado completamente, sí lo se, soy un pésimo hijo.

Suspiré antes de enviarle un mensaje rápido a Ana, necesitaría su ayuda para poder elegirle un regalo a la mujer que me trajo al mundo porque yo era un desastre para estas cosas. Por suerte ella aceptó gustosa y pude relajarme, cerraría un poco antes la tienda para poder encargarme de esto sin preocupaciones.

El día transcurrió bastante veloz después de eso, en el momento en que le avisé a mis empleados que hoy podían salir temprano no pareció molestarles. Eran dos holgazanes.

Tomé mis cosas rápidamente, tenía que apresurarme ya que había pactado un punto de encuentro con prima y si no llegaba a tiempo se enfadaría bastante. Por supuesto, no quería que aquello ocurriera.

Me movilicé hasta la parte céntrica de la ciudad y pude divisar la esbelta figura de Ana desde la lejanía, llevaba un abrigo color beige que le llegaba hasta arriba de las rodillas. Tenia su cabello atado en un moño y un bolso colgado de su brazo derecho, al verme sonrió corriendo hacia mí para saludarme.—No puedo creer que olvidaras el cumpleaños de tu madre.—Reprochó luego de darme un beso en la mejilla. Me encogí de hombros, no era el primer año que ocurría y dudaba que fuera el ultimo.—Bien, vayamos a algunas tiendas y así podremos escoger.

Primero recorrimos una tienda de accesorios, a mi mamá le gustaban mucho los collares, podía ser una posibilidad, pero no vi ninguno que llamara especialmente mi atención. Luego continuamos por un par de locales de ropa o de zapatos, me sentí confundido al ver la altura que poseían algunos tacones en las vidrieras. ¿De verdad alguien podía caminar sobre eso sin romperse la pierna en el intento?

—¿Has visto algo que pueda llegar a gustarle?—Pregunté escondiendo mis manos en el interior de mi chaqueta.

Ana frunció el ceño pensativa.—Hace unos días vi unos zapatos en la tienda que hay a dos calles de aquí y pensé que serían perfectos para tu madre.—Sonrió.—Pero yo ya le había comprado mi regalo así que no podría ser, de todas formas supuse que tú lo olvidarías.

Puse los ojos en blanco ante sus palabras pero tenia razón.—Bien, vayamos.—Al salir del lugar en el que nos encontrábamos hice dos pasos hasta que escuchara una voz pronunciando mi nombre desde la lejanía. Podría reconocerla donde fuera, pero me hizo sentir bastante incomodo el hacerlo y fue extraño ya que antiguamente hubiera corrido a abrazar a la dueña de esta. Me giré mientras veía a Hannah acercarse hacia mi vistiendo una chaqueta roja a juego con los borceguíes oscuros.

Le había contado a Ana lo ocurrido estas ultimas semanas y al ver a mi amiga se tensó, me dio una mirada nerviosa pero la ignoré de la mejor forma posible. Tendría que lidiar con este asunto de alguna forma u otra.

Alcé una mano en forma de saludo.—¡Hey, Hannah!—La chica rodeó mi cuello antes de que me diera cuenta y en el momento de alejarse no lo hizo, sino que depositó un pequeño y rápido beso en mis labios. Abrí los ojos de par en par completamente estupefacto ante lo que acababa de ocurrir, miré a mi prima nervioso, pero se encontraba con la misma expresión adornando sus facciones. No podía creer que me hubiera besado. Como si nada y en público.