Capitulo 19. Me la pagas

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Jos.
Desperté para ir a la escuela, no es tan tarde pero tampoco es muy temprano. Me bañe, vestí y luego baje para desayunar donde ya estaba mi familia.

Termine de comer y salí para ir a la escuela, justo cuando salí vi a Alonso cerrando la puerta de su casa, rápidamente corrí hasta él.

- Alonso, hola -sonreí.

- H-hola Jos.

- ¿Vas a la escuela? -claro que va a la escuela, que pregunta tan estúpidamente estupida. El río.

- Creo que si -comenzó a caminar.

- ¿Y Bryan?, ¿no te va a acompañar?.

- No, dijo que iba pasar por Freddy a su casa -se encogió de hombros.

- Esos dos traen algo entre manos -Alfredo tiene novio.

- Pero es tierno, me gusta ver a Bryan feliz.

- Y a mi a Freddy.

Cuando llegamos a la escuela me despedí de Alonso porque tenemos clases diferentes. Al llegar a el salón me encontré a Freddy, lo cual no me sorprende ya que el y yo compartimos, literal, todo nuestro horario.

Lo vi sentado en una mesa solo, con las mejillas un poco rojas y con una pequeña sonrisa.

- Ahora si, Alfredo -me senté- Cuéntamelo todo -lo mire directo a los ojos invadiendo un poco su espacio personal.

- Jos me asustas -me alejo de él- ¿Todo sobre que?.

- No te hagas el que no sabe -me miro confundido- Sobre tu cita con Bryan -susurre y el abrió los ojos en grande mientras sus mejillas se ponían mas rojas.

- N-no fue u-una cita.

- No, solo salieron los dos juntos, solos, y a un lugar donde normalmente ocurren las citas -¿sarcasmo?, pff, para nada.

- P-pero eso no q-quiere decir que haya sido una c-cita -noté algo de ¿tristeza? en su comentario- No lo quiero mal interpretar -murmuró.

- Vamos Freddy, a kilometros se nota que le gustas -animé.

- ¿Tu crees? -su rostro se iluminó.

- No lo creo, lo sé -sonreí.

- ¿Tan obvio es?.

- Sip -aseguré.

- ¿Tanto como lo tuyo y Alonso?.

- Sip -reaccioné- Espera ¡¿Que?! -me levanté de la silla al gritar y el se empezó a reír como foca retrasada.

- JAJA ¡hubieras vis...! JAJA ¡visto tu...! JAJA ¡tu cara! JAJAJA -ja ja.

- Eso no fue gracioso Alfredo -me volví a sentar.

- Claro que lo fue, tenias la cara tan pálida como si hubieras visto un fantasma y después mas roja que un tomate.

- Esta me la pagas Alfredo -amenacé señalando su rostro con mi dedo.

- Ya, perdón -quitó mi dedo- Y deja de decirme Alfredo, desgastas mi nombre.

-- No pues quien te entiende, si te digo greñas te enojas y si te digo Alfredo ¡también te enojas!, ¿como quieres que te diga?.

- ¿Sabes que?, olvídalo -bufó

- Bueno, pero ya enserio... ¿Te gusta Bryan?.

- Yo... No lo sé, creo que si. Él es muy gracioso y divertido, y también puede ser muy tierno, creo que si me gusta Bryan...

- Enton... -me calle y voltee hacia arriba de Freddy- Hola Bryan.

- ¡Bryan! -gritó parándose de la silla todo pálido y en un momento su cara estaba tan roja como... No tengo ni idea como que, y al voltear noto que no había nadie detrás de el. Yo empecé a reír soltando grandes carcajadas.

- JAJAJA ¡te dij...! JAJAJA ¡dije que! JAJA ¡me la pa...! JAJAJA ¡pagarías! JAJAJAJA.

- No fue gracioso -tomo asiento, molesto.

- Pero ahora estamos a mano -hable con lagrimas en los ojos por la risa.

Y por si se lo preguntaban, si, todo el salón nos estaba viendo.

Te Amo - Jalonso Villanela Donde viven las historias. Descúbrelo ahora