Pure and Perverse- Larry Stylinson

Capitulo XIX.

Después de algunas horas Louis regreso con muchas bolsas en los brazos, había conseguido muchas cosas para sus huéspedes, estaba feliz por tener a su hija en la casa, era como si la vida les diera una nueva oportunidad.

El castaño toco varias veces la puerta de la habitación de Emma.

—Pase—escucho una voz delicada.

El alfa entro mostrándole una enorme sonrisa, su hija aún estaba acostada en la cama, le correspondió la sonrisa en cuanto lo vio.

—Te he traído algunas cosas, hermosa, para que te puedas cambiar y espero que te guste—le guiño el ojo dejando las bolsas en el sofá que había dentro—También traje algunas cositas para tu amigo Liam, creo que también debe cambiarse ¿No? —sonrió caminando hacia ella—¿Cómo dormiste?

—Mejor que nunca Louis—suspiro—¿Y tú? Te ves pálido y tienes grandes ojeras ¿Qué te pasa? —pregunto tocándole la mejilla.

—Cosas, asuntos que duelen—sonrió bajo—Pero no importa como este yo. ¿Necesitas algo? Lo que sea yo lo conseguiré.

—No nada, solamente que te quedes conmigo—le omega lo abrazo tocando su nuca. Se despegó un poco de él y con sus dedos jalo la cadena que Louis tenia—¿Qué es esto? —pregunto observando aquel anillo que colgaba en la cadena de plata—Que lindo ¿De quién es?

—De alguien importante mi vida—le sonrió mirando el anillo de Harry—Mis errores me han dejado así Emma, solamente tengo este anillo como recuerdo de que alguna vez fui feliz—Louis respiro tranquilamente no quería llorar y menos frente a su hija—Esto es lo que no me hace perder la cabeza.

—Entiendo—asintió mirándolo a los ojos—Debes estar tranquilo—le guiño el ojo—Todo va a estar bien, te lo prometo.

—Bueno Emma espero que la ropa te guste y bueno, ahí está el baño y si necesitas algo, estaré en la habitación del fondo ¿Vale?

—Louis...—menciono mordiéndose el labio—¿Verdad que tú eres mi padre?

El alfa se quedó en silencio y tomo sus manos.

—Si mi amor, eres mi hija—sonrió dándole un beso en la frente—Mi pequeña niña.

—Entonces eso quiere decir que Harry también es mi padre—afirmo con timidez.

—En efecto mi amor, somos tus padres—le sonrió con un poco de melancolía—Y no dejaremos que nada ni nadie te haga daño ¿Si? Sé que él piensa lo mismo, yo no estoy dispuesto a perderte de nuevo.

—Cuando dices eso se siente bien—confeso sonrojada—Gracias por todo, ahora me siento como en familia ¿Sabes? rodeada de gente que en verdad me quiere, que me cuidan que no me miran extraño, ya decía yo que no encajaba con la familia que me toco, ustedes si me hacen sentir en casa—suspiro mirándolo a los ojos.

—Dejémonos de cursilerías y vete a dar un baño ¿Vale? Después nos vemos, ya sabes a donde ir si me necesitas—Louis se levantó dejando un beso en la coronilla de su hija.

Camino hacia donde había dejado las bolsas y tomo las que le correspondían a Liam. Le dedico una última mirada a su hija y salió de aquella habitación, verla le daba un poco de felicidad, podría enmendar los errores del pasado, ahora no dejaría que nadie la lastimara.

El castaño recorrió el pasillo y justo en las escaleras se encontró con Harry. Cruzaron miradas, Louis sintió un escalofrió en el estómago. El alfa simplemente bajo la cabeza y siguió caminando hacia su destino. El rizado se giró sobre sus talones y observo como Louis tocaba la puerta y entraba en aquella habitación.