capitulo 6

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Lleve mis manos a mi cara, poniéndome lo mas roja posible.

-Niñas, por que no entran a su clase.- Dijo el orientador acercándose.

-Uhmm..- Hice un pequeño suspiro.

-Perdón maestro, es que Karen no se sentía bien y la maestra me pidió sacarla a caminar..- Respaldo Jimena. La quería mucho por cubrirme de muchas cosas.

Nos dirigimos al salón, y mi amiga le pidió permiso a la profesora entrar. Camine lo mas rápido a mi asiento y..

-¿Esta bien señorita Karen?- La profesora se acercó a mi, mi corazón se aceleraba mas y mas. No podía estar tranquila alado de esa hermosa mujer.

-Uhmm Uhmm.- Lleve mis manos a mi cara.- Estoy bien..

-¿Como? Quirate las manos de tu cara, no entendí nada.- Poso sus manos en la mía, volviendo a sentir su piel morena suave y rasposa de un lado. Me puso los pelos de punta y sentí una corriente eléctrica recoger mi espina dorsal.

-Ahora dime, ¿estas mejor?.- Volvió con la pregunta. Si supiera que no por que la deseo tanto.

-S-si..- Apenas dije.

-Bien.- Soltó mis mano, el escalofrío se había ido muy rápido en cuanto me soltó.

Pasaron, mas días, mas meses. El año escolar estaba a un mes de acabar. Yo me llevaba mucho mejor con la maestra. Yamilet cumplió su promesa, no dijo nada y seguimos siendo amigas, muy buenas amigas.

-Bien chicas, estamos a un mes de salir, ¿estan emocionadas?

-Siii- todas dijimos a la profesora con entusiasmo en la voz.

Tocaron la campaña para salir al descanso, como siempre, fui la ultima en salir.

-Señorita.

-¿Si?

-Podría quedarse..

-¿He?

Me confundí demasiado con lo que dijo.

-¡Un momento!..- Se exalto un poco por no completar la frase.

-Ah, si.- Conteste retrocediendo.

Me dirijo a su escritorio y mis amigas ponen cara de 😏. No me gustaba ninguna de sus expresiones. Me recargue en su escritorio, y comenzamos a platicar. Fue un muy buen descanso, unos minutos antes de que se terminara el descanso, me pregunto si tenia alguna relación.

-Por el momento no..- Dije agachando la cabeza.

-Oh! Pero no te desanimes, algo vendrá, yo lo se.- Dijo pícara y tocándome el hombro- Así como ah mi, no pensé que me casaría, y ve.

Solte una sonrisita y asentí.

-Vamos, no te desanimes peque..- No la deje terminar su palabra.

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Mi Profesora Y Yo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora