Y entonces no volvimos a hablarnos nunca más... desde que me mude a su casa ninguno de los dos artículo palabra, nos cruzábamos como extraños...supongo que el entendió que todo había acabado, que no volvería a hablarle.
Todo acabo, pero antes de eso esa misma noche, esa última noche a las 01:00 de la mañana se colo en mi cuarto escabulléndose en mi cama.
Esa noche ambos nos fundimos en una sola alma, un solo ritmo cardíaco perfectamente coordinado.
Nunca sentí una pasión así con nadie, sentí que ambos eramos una sola persona, sentí que por mucho que amase a Leo nunca volvería a unirme así con nadie.
Pero era un amor prohibido, yo lo sabía y él también, por eso al terminar salio de mi cuarto en silencio como si nada hubiese pasado y yo sin decir nada le mire marchase mientras una lagrima corría por mis mejillas.
Desde esa noche, nunca más nos llevamos bien. Las cosas cambiaron mucho y desde que se fue de mi cama no volvió a sonreírme, a mirarme. Si le miraba me respondía con unos ojos asqueados.
Si le hablaba ignoraba mis palabras como a un fantasma a quien nadie escucha.
Desde esa noche, hasta el día de hoy me despierto en la madrugada, le miró y me vuelvo a acostar.
Me trata con asco, le repugna mi presencia, mis palabras le horripilan pero yo... yo sigo soñando cada noche que le miro y le preguntó:
-¿Por qué me odias Alex?
En mi sueño el se giraba y continuaba ignorándome andando.
- Alex...si te deje de hablar es porque tenía miedo, miedo de que me estaba enamorando de tí.
Entonces se para, le abrazo por detrás y me perdona...
Pero entonces despierto, le veo dormido y pienso:
Nada volverá a ser como antes.
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El Estupido Gemelo De Mi Novio
Teen Fiction- Al final te enamoraras de mi. Dije con una picara sonrisa. -Eso si no te enamoras tu antes de mi. -Sabes que no puede ser estoy saliendo con tu hermano... - Eso es por ahora...
