Y suavemente cogiendo mis manos me beso prometiendome un futuro juntos, con nuestro hijo, me confesó que me amaba, pero entonces desperté.
Esa noche soñe con Alex, pero al siguiente día el sueño se repitio con Leo.Mis planes se derrumbaban, mi corazón no me permitía dejarles así, con una triste despedida, con un solo adiós. No, tenía que haber otra solución.
De lo que si estaba segura es de que iba a tenerlo, aquella criatura no merecía morir por culpa de una madre que amo al hombre al que nunca debió acercarse.Decidí hablar con Alex, él era el padre y necesitaba saberlo, de todos modos, no me odiaría más de lo que me odia ahora.
Paso un mes y estuve buscando la manera de decirselo, el momenyo adecuado, las palabras perfectas. Pero nada...le dijese lo que le dijese acabaría mal...
Sin más preámbulos decidí hacerlo pero antes lo hablaría con Leo. Ni siquiera tenía el coraje para contarselo a Alex.- Leo...tengo que hablar contigo...
-¿Hay algún problema amor?-Estoy embarazada...
Su expresión cambio totalmente, se le dilataron las pupilas, se le puso la tez blanca y empezó a sudar.
-¿ Qué follón, no?¿ Y ahora...?
- Verás...Leo no es tuyo.
-¿ Comó?
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El Estupido Gemelo De Mi Novio
Teen Fiction- Al final te enamoraras de mi. Dije con una picara sonrisa. -Eso si no te enamoras tu antes de mi. -Sabes que no puede ser estoy saliendo con tu hermano... - Eso es por ahora...