Ya era fin de año cuando Flor y Este Chico decidieron ser novios. El se lo pidió por el simple hecho de todas las travesuras descontroladas que ya habían hecho. Sin darle mucha mente, La Chica aceptó, no por tener una relación (cosa que detestaba) sino por las cosas divertidas que hacían juntos.
Fueron juntos al baile de graduación, ella quería divertirse ese día y Este Chico solo quería pasar un fin de curso feliz con sus amigos. Tenían muchas diferencias y discutían con frecuencia, tanto que ya el sentía las ganas de agredirla, pero sabía que no podía por respeto a ella.
Ella fue con un vestido negro ajustado en el centro por un cinturón plateado y unas ballerinas. Él estaba de lo más elegante con un esmoquin negro una camisa azul y unos converse bajitos azules, del mismo tono de su camisa. Cuando la pasó a recoger le regalo un corsage (corsash) de flores azules para que estuvieran combinados.
En el baile, ella le susurró que quería hacer algo con él. Él desde luego se asustó; sabía lo que le esperaba: sangre. Este Chico odiaba hacerle daño, pero le gustaba hacer cosas nuevas con ella. La quería tanto que ya se sentía solo cuando estaban separados, no lo podía negar.
A mediado de la velada ella lo llevó al vestidor de las chicas, un lugar poco usado, bueno solo por las porristas; y comenzaron. Se desnudaron, se tocaron, se mordieron, se aruñaron y ella recordó el cinturón.
Ella le dijo que con el cinturón le atara las manos lo mas fuerte que el pudiera, que se las alzara y que le hiciera lo que el quisiera que trataría de resistir. Este Chico lo hizo, con miedo pero lo hizo. La engancho de un gancho para la ropa. Lo hicieron de pie. La tiró en la banca frente a los casilleros del vestidor, la mordió tantas veces que pareciera que se la iba a comer.
Después Flor le pidió que la desatara y que la azotara con el cinturón lo mas fuerte que el pudiera. Se negó. Ella se lo rogó tres veces más y por sus lindos ojos con su mirada picara. Solo así accedió.
La azotó una vez...
Dos veces más, seguidas...
Otra vez...
Cinco veces seguidas y ella pedía más.
Este Chico se dio cuenta de todo lo que le había hecho. Esta vez si se asustó. Flor estaba de lo más extasiada y satisfecha de todo lo que su novio le había hecho en esa noche tan especial.
Le termino besándole donde le había azotado, le susurró al oído un perdón y la convenció de ir a beber algo.
