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Melody's Pov's..

—Ya me voy, Wen.—Dije mientras tomaba mi bolso del sofá.

Wendy asintió.

—No salgas, cualquier cosa me llamas.

—Está bién, vete ya.

Asentí y caminé hacia la puerta principal.

Dianne me había mandado un texto con la dirección hace ya unos minutos. No estaba muy lejos de mi casa.

Visualice el auto de mi padre en la entrada de la casa y me subí rápidamente.

Prendí el motor y puse en marcha el auto.

Sólo me tomó unos minutos encontrar la dirección.

Miré a través de la ventana y frente a mí se encontraba un gran Teatro abandonado y deteriorado.

Fruncí mis labios.

Tomé mi bolso y salí del auto.

Caminé hasta estar más cerca del Teatro y solo había silencio.

Traté de abrir la gran puerta de metal oxidado pero estaba trabada.

—¿Qué haces aquí, muñeca?—Preguntó una ronca voz a mi espalda.

Me dí la vuelta rápidamente y mi boca cayó al suelo.

—¡Me asustaste, idiota! ¿Qué haces aquí?—Pregunté confusa al ver a Peter.

—¿Qué haces tu aquí?

—Pregunté primero.—Dije cruzandome de brazos.

Peter revoleó sus ojos.

—Vine a boxear.

—Oh.

—¿Qué haces aquí?—Volvió a preguntar.—¿Me estás siguiendo, muñeca?

—¡Já! No seas estúpido, ¿Yo seguirte? ¡Pff! Vine con unas compañeras a ver a los chicos de la Universidad boxear.

—Y.. ¿Dónde están tus compañeras?—Preguntó burlón.

—Pues deben estár adentro.

—Ajá.—Dijo con una sonrisa arrogante.

—¿Puedes llevarme? Estoy pérdida, no sé cómo entrar.—Dije frunciendo mis labios.

—Claro. Vamos, muñeca.—Dijo tomando mi mano para guiarme.

Un escalofrío recorrió por mi espalda en cuánto sentí su mano tomar la mía.

Peter me guió hasta un pequeño callejón al lado del Teatro. Al final de éste había una pequeña puerta.

Peter la empujó y entramos. Pasamos por un enredo de pasillos hasta que llegamos hasta otra pequeña puerta. Peter la abrió y el ruido se hizo presente.

Alrededor había gente.
Personas por todos lados y en medio un gran Rin de boxeo.

En el lugar había mucha luz y varios banquillos en el que muchos chicos estaban sentados.

—Aquí es, boxeo clandestino, muñeca.—Habló Peter soltandome la mano.

—Guao..

—¡Melody! ¿Dónde te habías metido? ¡Estábamos por llamar a la policía!—Apareció Anne junto con las chicas hablando exageradamente.

Peter rió.

Imité su acción.

—¡Eres una exagerada, Ann!—Dije aún riendo.

—¿Dónde estabas, Mel?—Preguntó Dianne.

—No sabía cómo entrar.

—Hasta que llegó su salvador.—Habló Peter con aires de superioridad.

Rodé mis ojos.

—¿Y él és..?—Preguntó Sam.

—Soy Peter, un placer, linda.—Dijo Peter besando su mejilla seductoramente.

—Deja a mi amiga tranquila, idiota.—Dijo Dianne mirando a Peter con enojo.

—Uh, hermanita, tranquila.—Dijo Peter.

—¿Qué?—Preguntamos Ann, Sam y yo al unísono.

—Éste idiota es mi hermano.—Dijo Dianne.

—Oh.—Susurré.

—¿Dónde está mi estrella del boxeo?—Apareció un hombre con cara de desesperación.—¡Peter! ¿Dónde diablos estabas?—Dijo y se llevó a Peter del brazo.

—¿Estrella del boxeo?—Pregunté.

—Es uno de los mejores boxeadores de aquí.—Dijo Sam.—Y ahora el hermano de Diann.

—Dicen que es un idiota sin corazón. El típico marginado.—Siguió Ann.

—¿Es así?—Pregunté mirando a Diann.

—No lo sé, no vive en mi casa desde hace mucho y no hablamos.—Dijo Diann.

—Oh..—Susurré.

—Bueno, vamos que ya está por salir Zack.—Dijo Dianne con una sonrisa bobalicona en el rostro.

—¿Quién es Zack?—Pregunté.

—Es el chico que le gusta desde hace ocho años.—Dijo Ann revoleando sus ojos.

—¿Ocho años? Guao..

Las mejillas de Dianne se tornaron rojas.

—Ya déjenme, vamos.—Dijo Sam.

Las chicas caminaron y yo las seguí.

Peter subió al Rin buscando al alguien con la mirada.

Me encontró y sonrió.

Le devolví la sonrisa.

Ésto será interesante.

***
¡Volví! Y con un largo capitulo, segun yo..

Decidí que subiré dos caps por cada semana, ¿Les parece bien?
Bueno, eso es todo.

¡Besoos!

EscritoraAburrida.

Cambio Y Fuera.

Mi Estúpido Boxeador.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora