Estocolmo | Larry Stylinson (Editada)

Capítulo 43

*15 minutos antes*

–Buenas tardes, Zayn. Cuanto tiempo sin vernos.

–No bromees–se sentó en la silla frente al menor–¿qué es esto?–levantó la mano mostrando el sobre con la carta que el castaño había visto por la mañana.

–Eso es...–la miró acercándose a él con los ojos entrecerrados fingiendo concentración–creo que es un sobre–se enderezó y bebió un sorbo de su café.

–No te hagas el chistoso–quitó la tasa de café de las manos del rizado–¿Qué mierda pasa con lo que dice la carta? ¿Planeabas decirle esas cosas a Louis?

–No sé de que me estás hablando–tomó de nuevo la tasa y dio otro sorbo a su café.

–¡De esto!–volvió a quitarle la tasa de café y le puso la carta en su cara.

–Debes dejar de ser tan intenso–se acercó a Zayn para quitarle la tasa–compra tu propio café.

–¿"Estoy cansado de no poder saber nada de ti, necesito verte, estaré en el café de siempre, todo el día esperando a cualquier tiempo que puedas darme"?–ignoró la broma de su amigo.

–Sabía que esa carta nunca le llegaría a Louis, de una u otra manera iba a hacerte venir.

–¿Qué mierda?–se levantó y lo empujó por el hombro–¡no puedes espantarme de esta manera, imbécil!

–Es que lo que dice la carta es verdad–cambió la expresión de su cara por una más seria–estoy harto de no saber nada de lo que pasa con él. Liam habló conmigo diciéndome que conocía la manera de hacerlo feliz, pero que la única manera en que le daría felicidad sería si yo no volvía a pisar Londres, al menos por un tiempo...

–Y para variar, no cumpliste con tu palabra–cruzó los brazos y alzó una ceja.

–¿Como van las cosas con Vito? ¿Las noticias?–el moreno lo miró sin contestar–¿Cuándo vuelve Liam?–su amigo desvió la mirada y torció los labios.

–No... No estoy seguro–mentía, Zayn lo sabía, Harry lo sabía y ninguno de los dos hizo nada para cambiar eso.

–De acuerdo...–dijo el rizado viendo a otro lado–voy a ir a investigar cómo está mi asunto.

–¿A dónde vas?–el moreno lo miró extrañado.

–A buscar a un amigo...–se levantó, acomodó su saco y lo miró–Uno de verdad–tomó su abrigo y se dirigió a la salida.

–Estás siendo injusto, Harry–dirigía su mirada al menor mientras caminaba.

–Estás siendo un hijo de puta–nunca volteó a verlo y salió del café.

Zayn se levantó de prisa de la mesa y corrió detrás de su amigo, quien al parecer lo esperaba, pues caminaba con mucha calma hasta su coche.

–¿A dónde vas?–lo detuvo por el brazo.

–Con alguien que me dará la información que necesito–estiró el brazo con la llave de su coche en mano y presionó el botón indicado para abrir la puerta.

–¿Walsh?

–Walsh–sonrió de lado y lo miró de reojo–sé que te interesa la información que pueda darme, ¿vienes?

–Vámonos–se apuró a llegar al coche y entró mirando a todas partes.

El menor abrió la puerta y miró al edificio sonriendo de lado–despistado–miró al suelo y se adentró en el coche y aceleró girando a la izquierda en la primera esquina.