(O29)

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El aspecto de Hayley no había mejorado en el transcurso de los últimos dos días, tenia los ojos rojos la gran mayoría del tiempo, sus moradas ojeras y sus labios partidos, parecía cansada, las cosas con su manada habían empeorado de nuevo, a penas se habían arreglado y ya todo estaba como antes, pero la sed de matar en Hayley había aumentado y esta vez ya no le importaba nada, absolutamente nada.

–Hija, ¿estas bien?–Preguntó su madre al ver a su hija con la mirada perdida en el televisor, el cual estaba apagado.

–Si–Contestó fríamente sin quitar la mirada de en frente.

(...)

–¿Contigo habla Lydia?–Dijo Liam nervioso.

–Si, pero es mas distante, algo no esta bien con ella–Admitió Lydia con una mueca en su rostro.

–¿Aun visita la tumba de Theo?–Comentó Stiles.

–No, desde que salio del hospital se la ha pasado viendo televisión, pero la televisión esta apagada y también se encierra en su habitación y usualmente esta peleando con alguien, creí que hablaba por teléfono, pero lo destrozó con las manos–Soltó Liam preocupado.

–¿Destrozó su celular con las manos?–Preguntó Stiles impactado.

–Si...

–¿Hay algo que podamos hacer para ayudarla?–Dijo Scott intranquilo dirigiéndose hacía Deaton.

–Claro, pero tomará tiempo–Dijo Deaton con una mueca.

–Pues entonces explicamos como–Pidió Stiles.

(...)

Más tarde Hayley salió de su casa, a pesar de que estaba cayendo una tormenta en Beacon Hill, no le importo en lo absoluto.

Caminaba bajo la lluvia lentamente, sus ojos estaban completamente rojos, sus ojeras estaban presentes y sus ganas de aniquilar a alguien era lo que la mantenía a pie.

Camino algunos minutos más y trepó hasta el techo de aquella casa, miró a la ventana.

–Aquí esta mi presa–Susurró maliciosamente, con una sonrisa macabra.

Running low [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora