Sesshomaru entro por una de las puertas traseras que Rin le había mencionado, ya que cuando ella llego a esa casa fue lo primero que hizo, revisar que hubiera mas puertas donde pudiera salir sin que los empleados se dieran cuanta, y esa por donde entraba el peli-plata era la cual casi nadie veía o no le prestaban atención. Una vez adentro camino por los pasillos de la gran casa, al parecer estaba cerca a la sala, se acerco ya que escucho la voz de Rin, y si era ella quien estaba con Yura y Suikotsu, el peli-plata frunció el ceño al ver que aquel hombre que estaba ahí se llevaba bien con Rin, ahí se quedo viendo, después de un rato Suikotsu se puso de pie y salio por la otra puerta, Yura fue a acompañarlo y Rin se quedo sola.
- Sal se que estas ahí. - dijo ella, Sesshomaru se acerco y ella se puso de pie --. Que bueno que llegaste. - lo abrazo con fuerza y después se puso en puntillas para besarlo --, ¿Que ocurre? - pregunto al ver que el no correspondía.
- ¿Quien era ese? - pregunto algo molesto, ella lo miro confundida, acaso estaba ¿Celoso? Pues así parecía, sonrió le agradaba verlo celoso.
- El es un doctor, fue quien atendió a mi hermana, durante los últimos dos años y es hermano de Yura. - el la seguía mirando, al parecer no estaba muy satisfecho con su respuesta y ella se dio cuenta, así que suspiro y lo abrazo por el cuello --. Si te lo estas preguntando, entre el y yo no hubo nada.
- ¿A que vino? - Rin rio ya que era evidente que estaba celoso, ella comenzó a besarle en cuello, el a los pocos segundos la tomo por la cintura.
- Vino por que se entero lo que paso, quería saber si su hermana estaba bien. - dijo mientras seguía besando su cuello, dejo de besarlo para verlo a los ojos --. Como te lo dije, entre el no hubo nada, ni amigos. - el seguía sin decir nada --. Vaya si que eres celoso.
- ¿Quien te dijo que yo estoy celoso?
- Nadie, pero puedo verlo. - su voz era melosa --. No te enojes - lo beso y esta vez el correspondió, ella marco el ritmo del beso --. Tu eres el único. - susurro en sus labios, ahora inicio el beso uno mas demandante, ella se alejo de golpe de el y le dio la espalda --. Veo que no me crees.
El se acerco a ella, lo ultimo que quería era discutir, la abrazo por la espalda, ella podía sentir la respiracion en su oreja la cual el mordió con delicadeza, ella cerro los ojos mientras suspiraba, el la apego a su cuerpo, comenzó a besar el cuello.
- Eres mía - susurro en voz ronca, Rin sintió su piel erizarse, su respiración comenzó a ser entrecortada y el seguía besándole el cuello, sus manos que la tenia en la cintura comenzó a subirlas lentamente por debajo de la blusa.
- A-aquí no. - hablo ella jadeante.
- ¿Donde esta tu habitación? - la giro para robarle un beso, ella solo correspondía.
- Arriba, la tercera a la... derecha. - la volvió a besar. Ambos comenzaron subir las escaleras, las personas del servicio estaban ocupados preparando la cena. Yura quien al regresar a la sala lo vio alejarse solo sonrió. Cuando llegaron a la habitación de Rin, el cerro la puerta con seguro, la tomo de los muslos para cargarla, ella lo rodeo con sus piernas, sus bocas no se separaban, la tumbo sobre la cama y el sobre ella, comenzó a quitarle la ropa desesperadamente, sentía como si hubieran pasado años que no estaba con ella, cuando la desnudo de la parte de arriba, ella tomo su rostro entre sus manos, sus miradas se encontraron, ella sonrió, temía que eso fuera un sueño --. Creí que... - el la interrumpió.
- No me paso nada. - la beso ella metió sus manos en la cabellera plateada jalándolo hacia ella.
- ¿Seguro... que estas bien? Cuando... dijeron que tu helicóptero - el la cayo con otro beso, lego la miro de nuevo a los ojos.
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Dulce Perdición
Fiksi PenggemarRin Clark es una bailarina exótica en un club nocturno, sabe que los hombres solo la buscan por su cuerpo, cosa que ya le da igual que la busquen por eso, sabe que en ese trabajo es a lo que se expone, es seria, fría y la estrella del lugar. Sesshom...