Simón se fue, lo eché diciéndole que no diga más tonterías. Sólo me dormí... y sí, de vuelta otro de mis extraños sueños.
El depósito de mi casa estaba oscuro. Al fondo vislumbraba un pequeño y muy fino rayo de luz de luna. ¿Que hago en el depósito yo? Este lugar está muy out, no entiendo como Simón dormía acá ¡Ámbar, no es momento de pensar en el mexicano!
Se oían truenos, noche lluviosa en Buenos Aires, yo amo la lluvia...
Empecé a abrirme paso entre los muebles y demás cosas abandonadas... Era un lugar completamente horrible.
Se preguntarán a donde me dirigía. La luz de luna daba contra algo que producía un destello.... y por alguna razón me llama la atención.
Dicen que no todo lo que brilla es oro, pero en este caso si lo era... era como una medallita con forma de sol, con un diamante... llamativa y preciosa.
Leo una nota escrita. Letra pequeña pero caligrafía impecable.
"Sol Benson está viva. Sólo vos podés encontrar a tu prima"
-Tía LilieDesperté sobresaltada. Okey. Okey... eran las cinco de la mañana de un sábado. El sol todavía no salía. Pero yo tenía que ir al depósito para corroborar que había sido un sueño.
Encontré la medallita, sí, pero no había ninguna nota. Sin embargo decidí guardarla. Se veía muy bella...
Volví a la cama, no sin antes guardarla en mi alhajero.
Dormí profundamente hasta las 8:30. Me desperté y me empecé a arreglar como de costumbre. Al abrir mi alhajero la ví, y no pude evitar ponérmela. Me hacía sentir protegida, extrañamente.
Bajé a desayunar, no quería desayunar con mi madrina así que me senté en la cocina.
-Buen día señorita Ámbar, ¿Que hace aquí?-Me preguntó Mónica intrigada.
-Necesitaba cambiar un poco de aire. Y por favor, tuteame.
-¿Neta? Ámbar, ¿Te encuentras bien?-Me preguntó Luna
-Mejor que nunca.-Respondí.
De repente alguien toca la puerta. Miguel abre.
-¡Tío Migue!-La chica lo abraza...
Mónica también la abraza. La chica pasa. No puedo decir mucho de ella. Alta, flaca, de pelo marrón, largo y liso, viste ropa algo provocativa.
-Estrella.-Le dice a Luna.
-Ya te he dicho que no me digas así, Milanesa.
-Bueeno, perdóooon.
-Que ordinarias.-Dije.
-¿Y está qué?
-Ambar Smith, ahijada de la dueña de esta mansión.
-Milagros Valente, sobrina de Miguel y Mónica, y por supuesto la prima de Luna.
Un ardor invadió mi estómago, seguido de un odio inexplicable.
ESTÁS LEYENDO
¿Chica Buena?
FanfictionTodo el mundo lo decía siempre, Ámbar era mala como la peste, como una boa constrictora que te abraza para matarte. Era por eso que él no se le acercaba. Pero en cuanto la conoció bien notó por qué ella era así, tan fría, egoísta, ¿mala? Él le tenía...