Un Chihuahua sin suerte... O eso creía -Editando-

¿Fu-chan?

Entre clases, entrenamientos, mensajes, llamadas y encuentros casuales (plazas, cine, compras, cenas) habían pasado tres meses desde que comenzaron su amistad. Ambos con sentimientos uno por el otro, sin el valor a declararse, con miedo a ser rechazado. Ambos creyendo que no eran correspondidos.

Furihata Kōki aceptando que estaba enamorado de su amigo, ex capitán de Teiko y emperador de Rakuzan: Akashi Seijūrō. Decidió ocultar sus sentimientos, ya que estaba seguro de que alguien como Akashi jamás se enamoraría de alguien como él.

Akashi Seijūrō amando a Kōki, decidió no decirle sus sentimientos. Sabía que si no era correspondido, la amistad formada en estos meses se rompería. Prefería verlo con una linda sonrisa cuando platicaban.

Ambos prefieren su amistad, sobre su amor.

PV Kōki

Era lunes, el comienzo de la semana escolar. El viernes Seirin llevaría a cabo un festival, abierto, para todo el público. En el salón de Furihata habían decidido hacer un café maid. Y para su mala suerte, fue seleccionado para vestirse de chica. Él no lo podía creer, de entre tantos hombres, él fue elegido. Por ello, decidió ocultar esto al equipo de básquet, quienes actualmente se encontraban reunidos en el jardín a petición de Hyuga—sempai.

— ¿Que esperamos?— preguntó Kagami algo fastidiado.

—Ah... Riko. Me pidió que los reunieran— cuando dijo eso, un escalofrió recorrió su espalda. Tenía un mal presentimiento.

De pronto escucharon paso de corta distancia y lo que fue peor, un tarareo familiar. —Oh no— fue lo que todos pensaron.

Con una deslumbrante sonrisa llegó la entrenadora — ¡Hey! Chicos. Les tengo una excelente noticia. — Todos dieron un trago audible, su presentimiento se cumplió. Ella continuó. —Como saben esta semana no entrenaremos debido al festival. Por eso, del lunes al jueves redoblaremos el entrenamiento. Y, el viernes, tendremos un partido amistoso contra Rakuzan— dijo muy feliz.

— ¿QUÉ?— fue lo que dijeron al unísono los integrantes del equipo de básquet ball.

Kōki no lo podría creer, iba a jugar nuevamente con Akashi-kun. Había tenido la posibilidad de uno a uno en una de sus salidas, pero no en un juego de equipo.

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Ese día, el viernes del festival, había llegado. Sus compañeras de clases le pidieron llegar una hora antes, una vez que llegó lo llevaron al salón cerrado; lo maquillaron y luego comenzaron a vestir lo. Colocaron la peluca castaña del mismo tono que de su cabello, y cuando se admiró en el espejo no creía que lo vio.

Una chica bonita, muy parecida a su madre, ojos color chocolate bien definidos, un sutil maquillaje enmascaraban él, a Furihata Kōki.

—Furihata-kun te ves lindo. Dios, realmente pasas por una chica— tras ese comentario comenzó a temblar. —No te preocupes. Nadie averiguará que eres tú. — dijo con una pequeña sonrisa. —Vamos, deben echarte un vistazo los demás. Te llamaremos Fu-chan, para que no haya problema con los demás.

Cuando salieron muchas personas daban la vuelta para observarlo, eso lo apenaba. Sus mejillas se sentían calientes.

Llegaron a establecimiento y su compañera lo presento —Hey, aquí esta Fu-chan.

Todas las miradas estaban sobre él; personas de otros salones los habían seguido para poder apreciar a la linda chica. Solo escuchaba murmullos ¿Quién es? ¿De dónde salió?
Agradecía no haber invitado a Akashi al evento, sino estaría muy avergonzado. Más, de lo que ya lo estaba.

Todo marchaba bien en el café maid, llegaron más personas de las esperaban.

En los pasillos se escuchaban comentarios sobre una linda chica llamada Fu-chan del café maid de primer año. Kōki se había calmado al escuchar los comentarios positivos sobre el café y, más, que estaba siendo de ayuda para atraer clientela.

De pronto se escuchaban 'Kyaaaa' 'son ellos'.

Lo que no sabía, es que cierto peli celeste había invitado al emperador y al resto de la generación de los milagros. Hasta que el emperador entro al establecimiento y sus miradas se encontraron.

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PV Seijūrō

Había solicitado un encuentro amistoso contra Seirin. Su entrenadora acepto de inmediato, pero que no podía ser esa semana, sino hasta la otra, ya que la escuela estaba con el festival escolar. Después de haber hecho los acuerdos, colgó y se quedó pensativo. ¿Un festival escolar? ¿Por qué no había escuchado eso de Kōki? En vez de preguntarle a Kōki, mando un mensaje a Tetsuya.

Seijūrō: "Hola Kuroko ¿Es verdad que tienen esta semana un festival?".

Tetsuya: "Si, Akashi-kun. Es el viernes a partir de las 9 am ¿Por qué?".

Seijūrō: "Oh, ya veo y... ¿Va hacer abierto al público?".

Tetsuya: "Así es, si quiere puede venir. También podría invitar a los demás".

Seijūrō: "Esta bien, le avisaré a los demás, pero no le digas a nadie que vamos a ir. Quiero hacer una sorpresa para tú entrenadora".

Tetsuya: "Entrenadora o... ¿Tal vez, debería decir Furihata-kun? Buena noche, Akashi-kun.".

¿Por qué Kōki no lo había invitado, o mencionarlo en sus mensajes? Algo debería suceder ese día para que su AMIGO no le informará sobre el festival.
Mando mensaje a sus amigos y, minutos después, todos confirmaron e inclusive preguntaron si podían llevar compañía. Les respondió que sí, y solo tuvieron que concordar su llegada a Seirin.

Al fin, el viernes llego y todos se encontraban en la entrada de Seirin admirando en evento. Entraron y pasaron algunos puestos que se encontraban en la explanada. Cuando entraron a uno de los edificios, escuchaban comentarios sobre una chica llamada Fu-chan.

—Chicos ¿Qué les parece ir al café? Y, conozcamos a esa chica. — dijo Aomine Daiki tratando de celar a Sakurai.

Llegaron al café y al entrar, Seijūrō vio frente a él a una versión joven de la madre de Kōki.

Esa fue la razón de que Kōki no lo invitará. Pues Kōki haría cosplay de una maid. No podía quitar la vista de él. Realmente se veía hermoso y temblaba levemente ante su presencia, sus mejillas se notaban sonrojadas e intentaba hablar pero no salía sonido alguno.

Sí. Esa maid, era Furihata Kōki.