Les seré sincera en esta parte...
Como yo sabia que mi relación se desgastaba llegaba al punto de estar triste, hasta que una amiga del equipo de la secundaria me invito a un partido en un equipo diferente llamado "Sporting club" y pues llegue y me prepare para el partido, en eso veo entrar a una chava de cabello largo, un poco más alta que yo, y me llamo la atención, demasiado diría yo, pero trataba de hacerla a un lado, si suena feo pero tenía novia:$, y tenía una suerte genial, que después de ese partido, al cabo de unos días, la encontraba en un callejón que conectaba el camino a su casa y mi camino a la escuela y nós saludabamos pero realmente me gustaba y yo ni me di cuenta realmente, pero insistía en salvar mi relación aunque yo sabia que el encanto se había perdido, la quería mucho pero, bueno hasta ahora me di cuenta que tanto ella como yo queríamos acabar eso, pero no lo acepté, y creó que ese es un gran error que cometí o que en algún momento todos llegamos a cometer; el hecho de obligar a alguien a estar a tu lado, ese es un error que no note, y que solo hizo que nós lastimaramos tanto ella como yo, y después de encariñarme tanto, llegue a sufrir más yo.
Sinceramente, cada vez que la veía pasar por el callejón no salia nada de mi boca, tan solo un "hola" era lo que mi cerebro podría formular para hablar, y hasta a veces llegaba a calcular la hora para encontrarla en ese lugar y poder volver a verla... Me atraía, hasta el punto que unos amigos se daban cuenta...
-¿te gusta, cierto?- dijo uno de ellos-
-No lo sé- respondí- puede que si, pero tengo a Karen y no quisiera cambiar eso-
Básicamente mi mundo giraba en torno a mi novia, pero era como si llegara un cohete y de a ratos hiciera que saliera de órbita.
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RomanceEsta es una historia sin comienzo, todo fue repentino, que ni siquiera sabes cuando y como comienza, de esto se trata, y lo mejor de todo, es que aun no tiene final, y sin dudarlo, aun no quiero que acabe.
