My sole regret

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-William- gemí mientras él nos guiaba de nuevo a la cama

-Dulce, Joselyn- su voz en un suspiro. Mi nombre pronunciado con lujuria -te deseo. Pero ahora que se que tu confianza en mi ahora esta esta en duda- fijo mientras me dejaba gentilmente sobre la cama - y la recuoerare enteramente con el tiempo- aseguro depositando besos en el hueso de mi cadera -porque, mi dulce niña- su voz desbordaba adoración -lo haré- dijo solemnemente mientras besaba mi vientre -y cuando la recupere volveré a atarte, a vendarte los ojos dijo entre besos -te haré mía como corresponde dejo un beso entre mis pechos 

Quería discutir, quería decirle que deseaba que lo hiciera pero las palabras simplemente no salían.

-William...- dije en un suspiro.

-aun me deseas de esa forma, Joselyn?- pregunto mientras deslizaba sus manos por mi piel desnuda -aun te mojas cuando te digo que deseo follarte hasta dejarte sin sentido- sus palabras hicieron que me arqueara en busca de el contacto con su cuerpo pero el me lo negó y solo paso sus labios cerca de mis pezones. Su aliento acariciando seductoramente la punta -que pasa si te digo que me muero por tenerte en mi regazo y azotarte?-

Me retorcido bajo él, mi mente y mi cuerpo recordaban muy vividamente todas aquellas sensaciones que desembocaban las cosas que el describía

Su mano derecha acaricio con la yema de sus dedos mi seno, evitando el pezón, antes de hacer su camino al centro y empezar a bajar  por mi vientre dirigiéndose en linea recta al vértice de mis piernas.

-¿que encontrare cuando llegue Joscelyn?- pregunto mientras dejaba besos suaves y delicados en mi hombro y cuello 

No dije nada, solo me deje llevar de las profundidades azules de sus ojos. con un montón de osadía abrí ligeramente las piernas, vitando a ir y descubrirlo el mismo 

-Such a good girl- dijo con voz ronca 

Sus ojos no dejaron los míos mientras sus dedos iban cada vez mas cerca y cuando se deslizaron por mis pliegues húmedos, el deleite en ellos era un afrodisíaco en si mismo. 

-tan perfecta...- suspiro mientras sus dedos encontraban mi clítoris y empezaba a masajearlo perezosamente 

me mordí el labio, una de mis manos aferrándose a su cabello azabache y la otra aferrándose a su torso. 

su mano se parto y entonces palmeo la cara interna de mi muslo, haciéndome estremecer cuando la ligera comezón se combino con las descargas de placer que me provocaron sus dedos en mi

él sonrió cuando ahogue un gemido 

-sigues siendo una completa pervertida- dijo casi burlándose de mi no solo con su comentario, también con sus dedos que iban y venían por mis pliegues pero evitaban tocar mi clítoris 

Gruñí -mira quien lo dice- dije 

su mano se aparto de nuevo y me dio otra palmada en la cara interna del muslo -no, no, no sweet Joselyn- dijo dándome un mordisco en el hombro -si sigues de contestona me veré obligado a poner a ocupar tu boca- 

Jadee 

-No me des esa mirada Joselyn- dijo a modo de advertencia mientras me daba besos en la mandíbula 

-¿cual mirada?- pregunte -señor- añadí rápidamente 

-esa mirada en la que me dices que te encanta darme mamadas- 

Me ruborice, no pude evitarlo. 

Aquellas palabras sucias solo podían ser sexy y tentadoras cuando él lo decía. 

William se rió en cuanto se percato de mi reacción -te ves tan inocente de esa manera- dijo y me dio un tierno beso en los labios -y me dan una ganas increíbles de corromperte- en cuanto termino la oración sus dedos me penetraron