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Hoy se dirigieron a mí unas palabras encariñadas, como cuando estabas tú.

Mis brazos volvieron a rodear a alguien especial, como te abrazaba a ti.

Mis ojos se centraban y se enfocaban como solían hacerlo cuando te miraban.

Mis manos eran sostenidas con suavidad cálida y delicadamente.

Mi sonrisa se mostraba tímida e inocente como cuando te conocí.

Mi corazón se aceleraba poco a poco con la misma velocidad con la que te fuiste.

Mi boca pronunciaba con ritmo y melodía un nombre; nombre que ya no era el tuyo.

Mi mente dejaba tus recuerdos a un lado para que alguien más creara nuevos en mí.

Mis palabras parecen ya no tener sentido porque ahora ya no son para ti.

Mi inspiración ya no eres TÚ.

SECUELAS (2016)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora