Quien dice que no existe los vampiros, los hombres lobos, brujos, hadas, elfos, angeles, demonios, dioses.... Quien dice que no puedan existir los dragones? Pues bien que te cuente Davina Quien es ella. Bien pues digamos que es una dragona con un p...
Cuando terminamos de trabajar ya eran las 6 de la tarde y nos fuimos directamente a casa. Cuando llegamos a casa recorde que Flora estaba en el plaza esperándome así que la llame:
Yo: Flora ven ha casa ahora, es muy importante ya dejaremos el entrenamiento para otro día.
Flora: Esta bien, ya voy.
Finaliza la llamada
- Qué ha dicho?- dice Malía
- Dice que ya viene, pero se le notaba en la voz que estaba desilusionada. Le encanta entrenar.- Dije un poco triste. Tengo miedo de un que todo esto algún día se acabe. Es uno de los motivos por lo que no quiero irme pero en verdad nunca he sido caprichosa y no pienso serlo en un futuro. Me gusta darle caprichos a mi hermana y mi madre. Cuando era pequeña era igual siempre que me compraba algo pensaba algo como "¿Con quien jugaré primero?" O cuando estaba jugando y a mis compañeros les gustaba siempre decían "si quieres te lo puedo dejar" O cuando íbamos la familia de compras no solía pedir nada pero si que me daba un poco de envidia los niños que siempre les compraban todas las cosas que pedían. En cambio yo me quedaba callada, sabia de sobra que mi familia no podía malgastar en caprichos a si que nunca pedí nada y estoy contenta con ello.
- Claro cariño a quien te crees que se parece. Las dos sois igualitas, igual de despistadas y llenas de energía y alegría. Aunque también sois unas orgullosas y gruñonas - dice con una sonrisa en la cara. El cual yo la imito.
Oímos el portazo de la puerta principal y vemos a Flora entrar en el salón donde estábamos sentadas en lo mullidos sofás color café que estaban demasiado viejos y desgastados bueno igual que en toda mi casa al decir verdad.
- Vaya, llegaste rápido.
- eh.... si es que he venido corriendo. - dice Flora. Recortando el aire.
- Vale, bien, tengo algo que importante que contaros, ves a buscar mama a la habitación hablaremos aquí en el salón.
Ella asintió y salió del salón hacia la habitación de mi madre. Minutos después las vimos. Mi madre como estaba débil Se apoyaba en los hombros de mi hermana y en su bastón. Se sentaron en el sofá frente a nosotras y me miraron. Al segundo pregunto mi madre:
- ¿Qué nos tienes que decir que es tan importante?
Miro a Malía y asiente diciéndome así que contará lo que ha pasado.
- Pues veréis.......- conté lo que decía la carta que nos dictó el Sr George y después Malía contó su plan , es decir, lo que me había propuesto ella en la fabrica. Después de que acabamos hubo un silencio incomodo y entonces hablé:
- Yo no quería tomar ninguna decisión hasta que lo hablara con vosotras. En lo del dinero y el entrenamiento debo admitir que la razón la tiene Malía, pero a mi no es lo que más me importa. De verdad que no quiero dejaros solas. Y si ocurre algún accidente y yo no estoy . Y si mama empeora y estas sola en casa. No puedo arriesgarme a perderos no después de perder ya a papá. A parte de eso yo todavía no me he transformado y no se como siquiera hacerlo, tengo la impresión de que algo dentro de mi que no me deja hacerlo es algo un tanto estaño.
- Escúchame Davina, esta oportunidad en única y sabes de sobra que la podemos aprovechar en cuanto a nosotras te aseguro que estaremos bien asta Malía nos visitará de vez en cuando verdad Malía? - miro hacia ella y asiente - En cuanto a lo de transformarte.... hay algo que he estado ocultandote . Flora , por favor ves a mi cama, debajo hay una pequeña caja de metal con una cerradura tremela corazón.
Ella se levanta y camina hacia mi madre le ha indicado. No se que es lo que mi madre tiene que contarme pero se que no va a se bueno, tengo un mal presentimiento con esto. Miro a mi madre y le pregunto
- Qué pasa mama? Que es lo que me quieres contar?- Se que seguramente se malo por mi sexto sentido no me falla nunca pero soy demasiado curiosa como para aguantar en preguntar.
- Calla hija no seas impaciente- me chista ella.
Flora vuelve con una caja de hierro vieja y oxidada. Se la da ha mi madre y ella murmura un "gracias". Mi madre se aclara la garganta y habla:
- Antes de nada cuando empieze con la historia no quiero que me interrunpes entendiste?- asenti y contunuo - Bueno, hace mucho años, la corte real se dividía en tres bandos, estos colaboraban juntos para gobernar el reino ya que en un pasado el reino estaba dividido en tres. Cada bando se diferenciaba por una sola cosa, el color de los dragones ; El bando Rojo, El Bando Negro y El Bando Blanco y este último era el más poderoso. Con el paso de los años los bandos decidieron unirse y que un rey y una reina gobernarán todo el reino. El bando blanco decido no gobernar el país y que gobernara un de los otros paises. Este bando al no querer gobernar decidió quien lo haria; por supuesto eligió al Rojo ya que eran los segundos paso poderoso de los tres. El Bando Rojo decidió que lo Blancos al ser más poderosos se ocuparían de la seguridad y los que dirigían todas las guerras. Al Bando Negro le dejo la justicia pero el Bando Negro resignado y lleno de dolor y traición por el Bando Blanco por no elegirlos a ellos huyeron del reino y nunca volvieron a verlos. Hasta hace 17 años , los Negros volvieron a aparecer más fuertes que nunca y se enfrentó al rey y la reina y sus guardias que eran los blancos. Mataron a todos los blancos y a casi la mitad de los Rojos. Pero no contaron de que Zafrinah y Thor tuvieran esa misma noche una hija preciosa de ojos marrones y cabello rojo como el fuego- de pronto siento que las lágrimas cubren mis ojos y empiezan a derramarse. Mi madre con dolor en los ojos prosiguió- Zafrinah la mujer más poderosa del reino huyó con el bebé hacia el bosque y lo dejo protegido con un hechizo de fuego. Este no desaparecería asta que la persona indicada lo recogiera. Esa noche tu padre y yo íbamos paseando por el bosque- un sollozo de alguien interrunpio la historia , ah era mio xd- entonces lo vimos, una hermosa bebé cubierta por un escudo rojo. Cuando la cojimos llevaba esto- saco un colgante hermoso en forma de corazón un una gema roja envuelto en unas alas preciosas color plata.
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La llevamos a casa y le pusimos el nombre de Davina. Con el tiempo vimos que era una niña demasiado fuerte y decidimos entrenarla.
Deje de llorar y me tire a los brazos de mi madre.
- No te lo dije antes porque no estaba preparada y ahora te vendría bien saberlo - me reí de la broma y la abrace más fuerza. Yo estaba de acuerdo con que no estaba preparada y encima tenia mucho peso como para saber este gran secreto.
- Gracias mama.
Ella empezó a llorar desoladamente Y mi hermana y Malía se nos unieron. Mi madre me apartó y me puso el collar este comenzó a brillar inmediatamente. Y mi madre dijo:
