10: MIEDO

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Sólo siguió sus instintos, yendo detrás de los dos, que se quedaron hablando entre ellos. Él por su parte se ocultó entre los arbustos; aunque en realidad quería golpear al búlgaro, siendo realistas, el tipo Krum podía fácilmente patearle el trasero.

No alcanzaba a escuchar nada, sólo veía como el sujeto pasaba sus manos por el cabello de Granger, sintiendo como le hervía la sangre.

Antes de hacer una estupidez se retiró de ahí, sin ver que la castaña lo había visto.

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Al día siguiente tuvo clase de pociones con la casa de Gryffindor, y por ende ella estaba ahí, junto a Weasley, aún sin hablarse, pero en la misma mesa.

Snape estaba más irritable de lo usual, quizá porque Potter no se había muerto aún o porque Longbottom se había enfermado y no había asistido.

Vio a la castaña realizar su trabajo y recibir la mirada de Snape y retirarse. Así que decidió aprovechar la oportunidad.

Empujó a Crabbe, quien sostenía una cuchara con su asquerosa mezcla de lo que fuera que estaban viendo (¿Esencia de Díctamo? No, eso era de primer año) provocando que chocara contra su caldero tirándolo, causando que Snape comenzara a regañarlo, antes de empezar a arreglar el desastre.

Mientras tanto él aprovechó para salir de la sala, encontrándose a Granger, quién al parecer estaba esperando a Weasley, ¿o a Krum? Pero al verlo, casi sale corriendo.

- Granger-
- Déjame en paz, Malfoy.
- ¡Granger, espera!
- ¡No!

La chica se alejaba sin correr, así que le resultó bastante fácil alcanzarla, la agarró del brazo, mientras ahora él la lleva a ella.

- ¡Dije que me sueltes!
- ¡Calla!
- ¡Oh, primero me secuestras y ahora me mandas a callar! ¡Qué caballero Malfoy, en serio!

Mientras la chica seguía quejándose, él sólo la jaló, mientras revisaba que salas estaban vacías. Encontró una, para ser exactos, la sala de Defensa contra las Artes Oscuras; al parecer el loco de Moody no estaba por ahí, así que aprovechó, metiéndose con la chica, cerrándola por dentro.

Granger se había dirigido al otro lado de la sala, alejándose de él.

- ¿Ahora qué quieres, Malfoy?
- ¿Por qué tan defensiva, Granger?
- Estoy hablando en serio, aléjate de mí.
- Pero si yo sólo quiero hablar - Se fue acercando a la chica, quien se metía entre los asientos para alejarse del chico.- Vamos, Granger, tú eres la inteligente, sabes que es lo mejor.
- No quiero estar cerca de ti, Malfoy. Puedo soportar muchas cosas, tu presencia no es una de ellas.
- Pero eso no paso la noche del baile, ¿cierto? Esa noche estábamos los dos metidos en ese beso.

Mientras hablaba, había logrado acercarse a la chica, acorralándola entre los asientos.

- Eso fue un error.
- Pero te gustó, ¿no? Por eso no te alejaste.
- Eso fue-
- Un error, sí, ya lo escuché, pero - Tomó la cara de la chica con una mano, mientras tomaba una de sus manos, sonriendo burlonamente. - ¿No quieres repetirlo?

Antes de poder siquiera reaccionar, sintió la bofetada, ¿qué tenía la chica con golpearlo? Pero a diferencia de la vez pasada, ahora estaba consciente de lo que estaba haciendo, y de sus emociones, en especial de ese sentimiento de ira de que la chica lo siguiera rechazando aun cuando él aceptaba sus sentimientos y se esforzaba por hacerla entender.

Así que al diablo con el dulce Malfoy.

Tomó a la castaña por su cara, juntando sus labios violentamente, devorándolos. No sólo sentía los labios de la castaña, luchando y juntándose contra los suyos, también sentía las manos de ella sobre las suyas, temblando, tratando de alejarlo; sentía cómo su cuerpo trataba de alejarse, mientras él se juntaba hacia ella, prácticamente moviendo la banca.

No podía negárselo.

Sentía el miedo de Granger hacia él y le agradaba, porque al menos así, tenía sentimientos por él.

Not "Always", But "Forever"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora