La mañana llegó, y Yoichi fue con mucha emoción a la preparatoria, no veía la hora de avisarle que podía ir a ver a Mikaela
Corrió hacia su salón, y como lo esperaba, su amigo ya se encontraba sentado, leyendo un libro
- ¡Yuu! -saludo alegremente, sentándose a su lado
- Hola, Yoichi ¿Cómo estas?
- Muy bien, pero no tan bien como tú luego de que te de las nuevas noticias
- ¿Qué sucede?
- Hoy puedes ir a ver a Mikaela -le dijo sonriendo y el azabache quedó shockeado
- ¿De verdad me lo dices?
- Claro, tonto. Luego de tu trabajo, te acompañaré a verlo -y su abrazo repentino lo hizo sonreír
- Gracias, amigo, gracias. No te das una idea lo que lo extraño
- No me agradezcas a mi, sino a mi Rey. El esta dispuesto a dejar que veas a su nieto, porque sabe que le hará muy bien
- ¿El abuelo de Mikaela lo decidió?
- Así es
- ¿No habrá problemas?
- Claro que no. Confía en mí -le sonrió
- Sí, amigo. Muchas gracias
Las clases pasaron muy lentas para Yuichiro que esperaba ansioso para poder ver a su rubio, luego de tantos días. Estaba muy feliz y no lo podía disimular. Sus manos se movían solas por los nervios, y su respiración no se acompasaba ni un segundo. Sus mejillas dolían de tanto que sus labios sonreían, pero no le importaba, esa felicidad no podía oprimirla
La hora de almuerzo llegó, y esos dos amigos junto a la chica fueron a sentarse bajo un árbol, ya que el día estaba sumamente lindo. Pero no contaban que una escena le arruinará el día al castaño
A un par de metros se encontraba Shihō con una rubia sentada en sus piernas, muy acaramelados los dos, sonriéndose con sensualidad
- Amigo -susurro el azabache, colocando una de sus manos en su hombro. Yoichi entristeció, y un fastidio de parte de la pelirroja se dejo salir por un momento
- No lo consueles, Yuu -dijo fríamente causando la sorpresa de ambos jóvenes, pero luego el castaño bajo la mirada comprendiendo
- Pero, Yoichi...
- Nada. Escuché tu conversación con Shihō el otro día, Yoichi, al igual que le pregunté como se sentía el al respecto de eso. Y el tiene la razón en este momento para este con esa chica, y tu no tienes la razón para estar triste ahora mismo. Como habías dicho, tu no me prohíbes irse con las demás chicas o chicos, y si no te diste cuenta, ahora está tratando de respetar tu decisión -lo miró tratando de no reflejar molestia. Yoichi solo asintió deprimido, pero justo por delante de sus ojos, pasó su salvación
- Welt -lo llamo, sorprendiendo a ese joven, pero como si se tratase de su dueño, el ojicarmín fue casi corriendo
- Hola, Yoichi, Yuichiro-san, Alice-sama
- Hola, Welt -le sonrió Yuichiro
- Tsk -chasqueo la lengua con algo de molestia al captar lo que su amigo quería causar- Hola, Lacus -no le caía mal, ni nada por el estilo, pero odiaba saber que ese chico destruía a una pareja con sentimientos mutuos, aunque no sean exactamente pareja
Y obviamente sabia que Yoichi nunca se enamoraría del Welt
Shihō, al escuchar ese nombre, giró su rostro hacia donde estaba Yoichi, y se llevó una muy fea sorpresa al ver como este le sonreía con tanto empeño a ese pelilila
ESTÁS LEYENDO
•Trueblood• [MikaYuu]
DiversosSus familias se oponían rotundamente en su relación, no por que ambos eran hombres, sino por que el era un Sangre Pura, y el otro, sólo un simple humano Pero unos giros inoportunos ocurrirán en la historia, provocando lo que nunca habían pensado *-*...