•Trueblood• [MikaYuu]

•O n e•

"... Seas o no un ángel, abre todas las venas de tu blanco cuerpo y que la sangre roja y espumosa brote en millares de chorros deliciosos, así quiero verte y beber de esas mil fuentes hasta que pueda llorar tu muerte en un delirio de voluptuosa voluntad..."

Su familia era una de las cuatro "Trueblood" que existían en la actualidad, y eso ya era mucha responsabilidad de por si en su espalda

Pero como si fuera poco, su familia entre la cuatro, era considerada y reconocida como "Los Reyes" debido a su capacidad de sellar la sangre vampírica de cualquier vampiro para así convertirlos en humano, pero de forma efímera para volver a la normalidad, o sino, podrían caer ante la locura; además, también podían controlar las armas anti-vampiros sin ningún problema

Entre su familia y otra Trueblood, era obligación de los de menor rango, servirles o salvarlos de algo. Y eso lo detestaba

A pesar de llevar una vida normal de un chico de 17 años, su padre lo agobiaba repitiéndole lo importante que era seguir con la descendencia de la Sangre Pura

¡Hasta lo había comprometido con la hija de los Hyakuya!

Y para joderle más la vida, esa chica no le caía para nada bien

Pero para no pensar en esas cosas, trataba de seguir su vida normal, yendo a la preparatoria con sus dos mejores amigos y tratando de no estar en su casa

Detestaba que lo tratarán como a un rey, o algo parecido. Que acatarán todo lo que su boca decía, y que nadie, nunca, le discutiera nada

Odiaba llevar esa sangre en sus venas

Odiaba ser un vampiro

- Hola, príncipe -dijo con cordialidad un chico de cabellos Rosa

- Vuelve a llamarme así y te descuartizare para después quemarte -le gruñó, mostrando sus afilados y brillantes colmillos

- Vale, vale. Era una broma, gruñón~ -sonrió mientras colocaba sus manos a los costados. Se sentó a lado del chico, mientras miraban la luna llena- Hoy es el día donde los cazadores son más fuertes ¿Que haces en el tejado de tu casa? ¿Sin ningún tipo de protección?

- No molestes -gruño de nuevo- Adentró están Akane con su familia hablando del compromiso y toda esa mierda. No quiero ni necesito escuchar. Después de todo, mi opinión ni le interesa a mi padre

- Debe de ser difícil...

- Ni te lo imaginas. Para empeorar, mi sed ésta aumentando. Detesto esto

- A mi ni me mires -le bromeó- Tal vez Yoichi podría ofrecerte

- No podría hacerte eso

- Aunque no quieras, eres el príncipe, y es nuestro deber hacer lo que podamos por tu bien estar

- Deja de decir eso -le gruñó, levantandose notablemente molestó

- Mikaela

- Dejame sólo

Salió saltando hacia el bosque que se encontraba alrededor de su hogar

Necesitaba despejarse y olvidarse de todo

No quería saber nada más sobre ser príncipe o algo relacionado

Sólo quería ser Mikaela. Nada más que el

Se sentó frente a un arroyó, mirando el reflejo de la luna llena en esta

Eso era lo único que lo tranquilizaba, hasta ahora

Noto como el agua, que hasta el momento se encontraba tranquila, comenzó a moverse. Como si algo chocara contra ella o si alguien se hubiese metido